El nuevo giro contra el covid-19: tratar antes de enfermar

En la carrera por ganar la batalla al covid-19 son numerosos los obstáculos a los que la ciencia se enfrenta y, como era de esperar, la primera línea de combate ha estado inevitablemente ‘enmarcada’ a las puertas de Urgencias y, cómo no, tras las barreras de las UCI y de las plantas covid-19.

Sin embargo, puede que un paso, uno de lo más importantes, es tratar de atajar el problema antes de lamentarlo. De eso trata el artículo de opinión del doctor Peter S. Kim, en colaboración con Sarah W. Read y Anthony S. Fauci, todos del programa de Investigación Terapéutica en la División del Sida, del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID, por sus siglas en inglés), del que se hace eco el 'JAMA'.

"Ha habido mucha atención de los medios sobre la vacuna, y con razón, pero en los NIH también estamos trabajando arduamente para desarrollar tratamientos precoces para el covid-19"

En declaraciones a Alimente, el investigador Peter Kim reconoce: “Creo que es fundamental que hagamos grandes esfuerzos concertados para desarrollar tratamientos precoces para el covid-19, ya que eso tendrá un impacto significativo tanto en los resultados individuales de los pacientes como en la salud pública. Ha habido mucha atención de los medios sobre la vacuna, y con razón, pero nosotros en los NIH (Instituto Nacionales de la Salud de EEUU) también estamos trabajando arduamente para desarrollar tratamientos precoces para el covid-19. Lo vemos como un esfuerzo crítico”.

Lo que se sabe

La enfermedad por coronavirus (covid-19) tiene peculiaridades: hasta el 20% de los individuos sintomáticos progresará a una enfermedad grave o crítica con manifestaciones clínicas que incluyen neumonía, síndrome de dificultad respiratoria aguda, disfunción del sistema multiorgánico, hipercoagulación y manifestaciones hiperinflamatorias.

Reconocen los autores: "Son más de 47 millones de casos de covid-19 en todo el mundo lo que ha provocado más de 1,2 millones de muertes. Además, el conjunto de datos acumulados cada vez sugiere más en la dirección que apunta a que algunos pacientes, incluidas las personas con síntomas leves, tendrán un curso de recuperación variable y prolongado que incluye fatiga, deterioro cognitivo y disfunción cardiopulmonar, entre otros síndromes. Además de las opciones para pacientes con enfermedad grave que requieren hospitalización y que, por tanto, reciben corticosteroides como terapia que ha emergido como un tratamiento de elección para los críticamente enfermos, se necesitan, por tanto, y con urgencia intervenciones que evalúen si estos se pueden administrar de forma temprana durante el curso de la infección para prevenir la progresión de la enfermedad y las complicaciones a más largo plazo de la misma".

Casos leves

La atención reciente se ha centrado en el potencial del tratamiento temprano para las personas con infección por SARS-CoV-2 del síndrome respiratorio agudo severo con alto riesgo de resultados graves. Sin embargo, hay una notable ausencia de terapias que hayan demostrado ser eficaces para los pacientes con infección temprana o leve. Los beneficios inmediatos de dichos tratamientos incluyen la mejora de los resultados del paciente y la prevención de hospitalizaciones. "Los beneficios a más largo plazo pueden incluir la prevención de las secuelas crónicas de la infección, así como se han doblado los esfuerzos por evitar la transmisión o acortar el periodo de contagio. Los tratamientos ambulatorios, junto con una vacuna eficaz, tendrían implicaciones significativas para la capacidad de poner fin a esta pandemia", insiste el especialista.

Se ha informado de éxitos recientes en el desarrollo de tratamientos eficaces para pacientes hospitalizados con enfermedades moderadas a graves. El ensayo Adaptive Covid-19 Treatment Trial (ACTT), uno de fase 3, aleatorizado y controlado con placebo, demostró que el agente antiviral remdesivir fue eficaz para reducir el tiempo de recuperación en adultos hospitalizados por la enfermedad,

Eficacia en pacientes hospitalizados o leves

Además, el estudio RECOVERY, diseñado para evaluar la eficacia de varias intervenciones terapéuticas, en comparación con la atención estándar, reveló que la dexametasona redujo la mortalidad en pacientes hospitalizados que requerían ventilación mecánica. Otro ejemplo de eficacia señala de nuevo al remdesivir, como también a la dexametasona, que han sido respaldados a nivel mundial por múltiples comités de guías de tratamiento de la pandemia y han llevado a mejoras en los resultados de los pacientes entre aquellos que requieren hospitalización.

Sin embargo, los tratamientos efectivos para personas con enfermedad leve a moderada han sido más difíciles de evaluar tanto en la práctica clínica como en ensayos. El remdesivir, por ejemplo, requiere de inyecciones intravenosas diarias hasta 10 días y este de tipo de administración de forma ambulatoria no favorece la adherencia al tratamiento. La dexametasona, por su parte, no se ha probado en ensayos en tratamiento precoz de la enfermedad. Otros fármacos, como la hidroxicloroquina, no han demostrado su eficacia en estudios clínicos rigurosos a pesar de que los primeros llevados a cabo, no controlados, sugirieron un efecto positivo administrado de forma precoz. Además, el cálculo de riesgo-beneficio en la enfermedad leve a moderada difiere del de la enfermedad grave. "Los tratamientos para pacientes ambulatorios con enfermedad leve deben ser seguros con pocos efectos adversos y fáciles de administrar. A pesar de estos obstáculos, un grupo de nuevos tratamientos ha entrado ahora en la línea de desarrollo clínico", indican los investigadores.

"Tenemos varios tratamientos muy prometedores esperando ser probados, pero sin voluntarios no podremos probarlos", Peter Kim

Recuerda a Alimente el científico: "Pedimos a la comunidad que apoye nuestros esfuerzos haciendo correr la voz sobre la importancia de este trabajo. A aquellos que, desafortunadamente, son víctimas de la pandemia, les pedimos que consideren el voluntariado como participantes en nuestro estudio. Tenemos varios tratamientos muy prometedores esperando ser probados, pero sin voluntarios no podremos probarlos. Y si eso sucede, nunca sabremos si estos tratamientos funcionan o no. Algunos de los medicamentos que planeamos evaluar para el tratamiento precoz del covid-19 también pueden ser efectivos para prevenir sus secuelas a largo plazo, pero necesitamos ensayos clínicos para probar esta hipótesis".

Lo que sabemos

Varios antivirales aprobados o en desarrollo para otras infecciones virales, como el VIH, el virus de la hepatitis C y los ebolavirus están bajo investigación para el tratamiento precoz de covid-19. Estas investigaciones aún no han arrojado resultados clínicamente demostrables; sin embargo, hay muchos ensayos aún en curso. Ejemplos de antivirales en ensayos para 'adelantarnos' a la enfermedad son: MK-4482 (EIDD-2801), un inhibidor de ribonucleósidos biodisponible por vía oral que se desarrolló originalmente para el virus influenza (NCT04575597); SNG001, una formulación nebulizada de interferón-β1a desarrollada para infecciones virales en pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica; y mesilato de camostat, un inhibidor de la serina proteasa aprobado para el tratamiento de la pancreatitis crónica y la esofagitis por reflujo posoperatoria.