Evita estos alimentos si no quieres sufrir artritis

La artritis es la inflamación crónica de una o más articulaciones, y sus principales síntomas son el dolor, la rigidez, la dificultad para moverse y, a veces, la hinchazón. De entre el centenar de tipos, la más común es la osteoartritis, que afecta casi a la mitad de las personas en algún momento de su vida, especialmente durante la vejez.

Aunque la artritis afectó tanto a los neandertales como a los antiguos egipcios, no fue hasta el año 1886 en el que el Dr. John K. Spencer acuñó el término 'osteoartritis', según ha podido comprobar un grupo de investigadores de la Facultad de Medicina Albert Einstein y del Sistema de Salud de la Clínica Mayo.

Este análisis demuestra que la eliminación de algunos alimentos y bebidas puede reducir la gravedad de los síntomas en pacientes con artritis inflamatoria y osteoartritis, así como mejorar su calidad de vida en general. ¿Quieres saber cuáles son estos alimentos? Te lo contamos.

Huye de los azúcares añadidos, el exceso de sal y el gluten

Tartas, pasteles, helados, golosinas... Es normal que queramos darnos algún capricho de vez en cuando, pero reducir al mínimo el consumo de azúcar es fundamental para combatir esta afección. Así se desprende de un trabajo del Colegio Americano de Reumatología, que señala a los refrescos y postres dulces como los alimentos que más empeoran los síntomas de la artritis reumatoide, considerada autoinmune.

El consumo regular de bebidas azucaradas (exceptuando las bebidas dietéticas) se asocia con un mayor riesgo de artritis reumatoide en las mujeres, independientemente de otros factores dietéticos y de su estilo de vida. Así lo confirma la Sociedad Americana de Nutrición Clínica.

Reducir el consumo de gluten puede aliviar algunos de los síntomas de la artritis

Por otro lado, en algunos avances de la Universidad de Girona en colaboración con la Dra. Humeira Badsha, del centro médico de reumatología y artritis de Dubái que lleva su nombre, se observa cierta relación entre los alimentos con gluten y el aumento de la inflamación, por lo que los expertos recomiendan reducir su uso. En este sentido, los celiacos tienen mayor probabilidad de desarrollarla, lo que provoca que tengan una prevalencia mayor de su enfermedad, según señala el Greater Baltimore Medical Center.

También es recomendable no consumir alimentos que tengan exceso de sal, como camarones, pizza, ciertos quesos y, en general, productos procesados. De hecho, un estudio de la Universidad de Roma, el primero que investiga los efectos de la sal de cocina en la inmunidad adaptativa en pacientes con artritis reumatoide, sugiere que una ingesta dietética restringida de sodio podría contribuir a amortiguar la respuesta proinflamatoria.

Evita los alimentos procesados

La carne roja puede causar inflamación, por lo que, en general, las dietas que abusan de este alimento provocan altos niveles de estos marcadores, factores de riesgo de cara a desarrollar artritis inflamatoria, según las conclusiones a las que ha llegado el Comité de Físicos para la Medicina Responsable de Washington. En esta línea, una investigación de la Facultad de Medicina de la Universidad George Washington muestra que las dietas veganas mejoran los síntomas de esta afección.

"La comida rápida aumenta la inflamación y el riesgo de desarrollar obesidad"

Por su parte, los alimentos ultraprocesados, como la comida rápida, los cereales refinados y los productos horneados procesados (ya que suelen tener un alto contenido de azúcar agregada, conservantes y otros ingredientes potencialmente inflamatorios) contribuyen a empeorar los signos de la artritis y aumentan los factores de riesgo como el sobrepeso, según un estudio de la Universidad de Génova.

Reduce tu consumo de alcohol

Cenar con una buena botella de vino puede parecer un plan perfecto, pero tu columna vertebral no diría lo mismo, ya que su estructura puede dañarse si se bebe demasiado alcohol. Así lo advierten desde la Universidad Católica de Corea del Sur, que han comprobado que abusar de las bebidas alcohólicas puede aumentar la frecuencia y la gravedad de los ataques de gota. Además, desde el Hospital Diakonhjemmet de Noruega apuntan que el consumo crónico de alcohol puede estar asociado con un mayor riesgo de desarrollar osteoartritis.