La ingesta moderada de alcohol provocó 100.000 casos de cáncer el año pasado
Uno de cada siete casos de cáncer atribuibles al alcohol en 2020 correspondieron a personas que bebían menos de dos copas al día
Que el alcohol puede provocar cáncer no es ninguna novedad, pero lo que no se sabía con certeza hasta ahora es que para ello no hace falta una ingesta excesiva. De acuerdo con un estudio e la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC, por sus siglas en inglés), que forma parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS), publicado este miércoles en la prestigiosa revista médica 'The Lancet Oncology', el consumo ligero o moderado de esta sustancia (hasta dos bebidas alcohólicas al día) causó 100.000 casos de cáncer el año pasado.
La IARC define el consumo de alcohol como la ingesta de todas las bebidas que contienen etanol y divide los resultados del estudio en tres categorías: consumo moderado (0,1 a 20 g por día, equivalentes a hasta dos bebidas alcohólicas), consumo de riesgo (20 a 60 g por día, que equivale de dos a seis bebidas diarias) y consumo excesivo (más de 60 g por día, es decir, más de seis bebidas alcohólicas).
Los resultados del análisis indican que los patrones de consumo excesivo y de riesgo (más de dos bebidas alcohólicas por día), representan la mayor parte de los casos de cáncer atribuidos a esta causa; en concreto, un 86%. Sin embargo, la cifra de cánceres asociados al consumo moderado no es desdeñable, al representar uno de cada siete casos. "Hemos demostrado que incluso un consumo leve o moderado tiene un impacto significativo en la incidencia de esa enfermedad", señala Harriet Rumgay, autora principal de la investigación.
"Hemos demostrado que incluso un consumo leve o moderado de alcohol tiene un impacto significativo en la incidencia del cáncer"
Asimismo, el estudio describe las diferencias por segmentos de población. Tres cuartas partes de los casos de cáncer atribuibles al alcohol en 2020 corresponden a hombres, mientras que las mujeres sufrieron los 172.600 restantes. En cuanto a regiones, el Este asiático, Europa Central y del Este tuvieron la mayor proporción de casos asociados a bebidas alcohólicas. "Se estima que entre el 28% y el 45% de las poblaciones de Asia oriental son portadoras del polimorfismo ALDH2. Por lo tanto, una proporción de los cánceres asociados con el alcohol en las poblaciones de Asia oriental en nuestro estudio podría deberse al mayor riesgo de esta variante genética", explican los expertos.
Ocho tipos de cáncer con más riesgo
El estudio describe ocho tipos de cáncer cuyo riesgo aumenta por el alcohol: cavidad bucal, faringe, laringe, esófago, colon, recto, hígado y mama femenina. "Existen varias vías biológicas por las cuales el consumo de alcohol puede conducir al desarrollo de cáncer, incluyendo alteraciones del ADN, proteínas y lípidos o daño por acetaldehído, el metabolito cancerígeno del etanol; estrés oxidativo; y alteraciones en la regulación de hormonas como estrógenos y andrógenos. El etanol también podría promover el desarrollo del cáncer indirectamente, al actuar como solvente para otros agentes cancerígenos como los químicos en el tabaco", se detalla.
Los casos más numerosos debidos al alcohol el año pasado fueron los de cáncer de esófago, con 190.000; seguidos por los de hígado, con 155.000; y los de mama femenina, con 98.000. Estas enfermedades contribuyeron a engrosar el recuento global de 6,3 millones de casos y 3,3 millones de muertes por cáncer en 2020.
Que el alcohol puede provocar cáncer no es ninguna novedad, pero lo que no se sabía con certeza hasta ahora es que para ello no hace falta una ingesta excesiva. De acuerdo con un estudio e la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC, por sus siglas en inglés), que forma parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS), publicado este miércoles en la prestigiosa revista médica 'The Lancet Oncology', el consumo ligero o moderado de esta sustancia (hasta dos bebidas alcohólicas al día) causó 100.000 casos de cáncer el año pasado.