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La auténtica clave para tener mayores niveles de vitamina D
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Bacterias que producen butirato

La auténtica clave para tener mayores niveles de vitamina D

El estudio constata que 12 tipos particulares de bacterias aparecían con más frecuencia en los microbiomas intestinales de los hombres con muchos más niveles del nutriente

Foto: Foto: Unsplash/@dimitri.
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De ella cada vez se habla más, y no es para menos. Nos referimos a la microbiota; así se conoce al conjunto de bacterias, virus, hongos y protozoos que conviven en el interior de nuestro organismo y en la piel. Ni más ni menos que 100.000 millones de microbios invisibles que hasta ahora se les ha considerado como grandes enemigos por ser responsables de grandes pandemias, como la de covid-19 que actualmente nos asola. Pero son mucho más que eso: la microbiota está considerada como el superórgano de nuestro cuerpo.

"Nuestros habitantes bacterianos influyen en todos los aspectos de nuestra anatomía, ya sea de manera directa o indirecta"

Ya en 2016 en el famoso libro 'El intestino feliz', de Justin Sonnenburg y su mujer, Erica Sonnenburg, destacados investigadores en este campo y directores del laboratorio del Departamento de Microbiología e Inmunología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Stanford (EEUU), se apunta: “Cada vez está más claro que la microbiota desempeña un papel relevante en la aparición de enfermedades como las alergias, el asma, la obesidad, problemas metabólicos e, incluso, el estado de ánimo… Nuestros habitantes bacterianos influyen en todos los aspectos de nuestra anatomía, ya sea de manera directa o indirecta”.

Ahora, investigadores y colaboradores de la Universidad de California en San Diego, en Estados Unidos, han demostrado en hombres mayores que la composición del microbioma intestinal de una persona está relacionada con sus niveles de vitamina D activa, una hormona importante para la salud e inmunidad ósea.

Ya el año pasado la revista 'Frontiers in Immunology' se hacía eco de un trabajo de revisión que constataba el cada vez mayor papel que juega el microbioma en los estados de salud y enfermedad: "Los estudios del mismo en enfermedades autoinmunes sistémicas demuestran patrones microbianos únicos en la enfermedad inflamatoria intestinal, la artritis reumatoide y el lupus eritematoso sistémico en menor medida, mientras que no existe un solo error o patrón que caracterice la esclerosis múltiple”.

Enfermedades autoinmunes

Tienden a compartir “una predisposición a la deficiencia de vitamina D, que altera el microbioma y la integridad de la barrera epitelial intestinal”, continúa el trabajo, que determina además que la deficiencia de vitamina D puede contribuir a la autoinmunidad a través de sus efectos sobre la función de barrera intestinal, composición del microbioma y/o efectos directos sobre las respuestas inmunitarias”.

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Foto: iStock.

De hecho, desde el inicio de la pandemia a este nutriente se le ha otorgado un papel relevante en relación con el covid-19 (tanto el riesgo de infección como la gravedad de la enfermedad). Así, un documento publicado en junio por el National Institute for Health and Care Excellence del Reino Unido (NICE) afirma que, si bien no hay evidencia que respalde la ingesta de vitamina D específicamente para prevenir o tratar el covid-19, sí recomienda que todas las personas tomen un suplemento de de la misma diariamente durante la pandemia, especialmente si no reciben suficiente exposición al sol debido a la protección o al confinamiento

Las nuevas evidencias

El nuevo estudio, publicado en 'Nature Communications', también reveló una nueva comprensión de la vitamina D y cómo se mide normalmente. Este nutriente puede puede tomar varias formas diferentes, pero los análisis de sangre estándar solo detectan una, un precursor inactivo que el cuerpo puede almacenar. Para utilizar la vitamina D, el cuerpo debe metabolizar el precursor en una forma activa.

"Nos sorprendió descubrir que la diversidad de microbiomas, la variedad de tipos de bacterias en el intestino de una persona, estaba estrechamente asociada con la vitamina D activa, pero no con la forma precursora", asegura la autora principal Deborah Kado, directora de la Clínica de Osteoporosis en UC de San Diego. "Se cree que una mayor diversidad de la flora intestinal está asociada con una mejor salud en general".

Kado dirigió el trabajo para el Grupo de Investigación del Estudio de Fracturas Osteoporóticas en Hombres (MrOS), financiado por el Instituto Nacional sobre el Envejecimiento, un gran esfuerzo de múltiples centros que comenzó en 2000.

Múltiples investigaciones han sugerido que las personas con niveles bajos de vitamina D tienen un mayor riesgo de cáncer, enfermedades cardiacas, peores infecciones por covid-19, como recuerda un ensayo de 'PLOS ONE', y otras enfermedades. Sin embargo, el trabajo clínico aleatorizado más grande hasta la fecha, con más de 25.000 adultos, concluyó que tomar suplementos de ella no tiene ningún efecto sobre los resultados de salud, incluidas las enfermedades cardiacas, el cáncer o incluso la salud de los huesos.

Precursores

"Nuestro estudio sugiere que eso podría deberse a que estos estudios midieron solo la forma precursora de la vitamina D, en lugar de la hormona activa", asevera Kado. "Las medidas de formación y degradación de la vitamina D pueden ser mejores indicadores de los problemas de salud subyacentes y quién podría responder mejor a los suplementos de la misma".

El equipo analizó muestras de heces y sangre aportadas por 567 hombres que participaban en MrOS. Los participantes viven en seis ciudades de los Estados Unidos, su edad promedio fue de 84 años y la mayoría informó tener buena o excelente salud. Los investigadores utilizaron una técnica llamada secuenciación de ARNr 16s para identificar y cuantificar los tipos de bacterias en cada muestra de heces basándose en identificadores genéticos únicos. Utilizaron un método conocido como LC-MSMS para cuantificar los metabolitos de la vitamina D (el precursor, la hormona activa y el producto de degradación) en el suero sanguíneo de cada participante.

12 tipos particulares de bacterias

Además de descubrir un vínculo entre la vitamina D activa y la diversidad general del microbioma, los investigadores también observaron que 12 tipos particulares de bacterias aparecían con más frecuencia en los microbiomas intestinales de los hombres con mucha vitamina D activa. La mayoría de ellas producen butirato, un ácido graso beneficioso que ayuda a mantener la salud del revestimiento intestinal.

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Es más, un estudio del Centro RIKEN para la Integración de las Ciencias Médicas (Japón) arrojó luz sobre el papel que tienen las bacterias del intestino en la maduración del sistema inmune y proporciona pruebas que apoyan el uso del butirato como terapia de enfermedades inflamatorias intestinales, como la enfermedad de Crohn. El estudio, publicado en 'Nature', demuestra que el butirato, un producto derivado de la digestión de las fibras dietéticas por la microflora del intestino, actúa como un interruptor epigenético que impulsa el sistema inmune induciendo la producción de células T reguladoras en el intestino

"Los microbiomas intestinales son realmente complejos y varían mucho de persona a persona", señalan los autores. "Cuando encontramos asociaciones, generalmente no son tan distintas como las que hallamos aquí". Debido a que viven en diferentes regiones de los EEUU, los hombres del estudio están expuestos a diferentes cantidades de luz solar, una fuente de vitamina D. Como era de esperar, los que vivían en San Diego, California, recibieron la mayor cantidad de sol y también la mayoría de las formas precursoras de la vitamina. Pero el equipo inesperadamente no encontró correlaciones entre el lugar donde vivían los hombres y sus niveles activos del nutriente.

Metabolizar

"Parece que no importa cuánta vitamina D obtiene a través de la luz solar o los suplementos ni cuánto puede almacenar su cuerpo", insiste. "Importa que su cuerpo sea capaz de metabolizar eso en vitamina D activa, y tal vez eso es lo que deben medir los ensayos clínicos para obtener una imagen más precisa del papel de la vitamina en la salud". "A menudo encontramos en la medicina que más no es necesariamente mejor", apostillan.

E insisten: "Entonces, en este caso, tal vez no se trate de la cantidad de vitamina D con la que se suplementa, sino de cómo alienta al cuerpo a su uso".

El estudio se basó en una sola instantánea en el tiempo de los microbios y la vitamina D que se encuentran en la sangre y las heces de los participantes, y esos factores pueden fluctuar con el tiempo según el entorno, la dieta, los hábitos de sueño, los medicamentos y más de una persona. Según el equipo, se necesitan más estudios para comprender mejor el papel que juegan las bacterias en el metabolismo de la vitamina D y para determinar si la intervención a nivel del microbioma podría usarse para aumentar la densidad ósea y otros parámetros del salud.

De ella cada vez se habla más, y no es para menos. Nos referimos a la microbiota; así se conoce al conjunto de bacterias, virus, hongos y protozoos que conviven en el interior de nuestro organismo y en la piel. Ni más ni menos que 100.000 millones de microbios invisibles que hasta ahora se les ha considerado como grandes enemigos por ser responsables de grandes pandemias, como la de covid-19 que actualmente nos asola. Pero son mucho más que eso: la microbiota está considerada como el superórgano de nuestro cuerpo.

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