La dexametasona reduce eficazmente las muertes por coronavirus, según nuevos datos

Los expertos acaban de avalar el uso del esteroide dexametasona como un tratamiento confiable y eficaz contra el covid-19, incluso en pacientes con diabetes, según una investigación que se ha presentado en la conferencia anual de la Sociedad de Endocrinología en Edimburgo. En la segunda ola de la pandemia, la dexametasona se usaba de forma rutinaria para tratar a los pacientes hospitalizados después de que los datos sugirieran que estaba reduciendo las admisiones y muertes en la UCI.

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Se sabe que el uso de un esteroide, como la dexametasona, aumenta los niveles de azúcar en sangre, un riesgo grave para la salud de los pacientes con diabetes. La urgencia de la pandemia significó que los especialistas tuvieran que movilizarse rápidamente para salvar vidas, pero en ese momento se desconocían los riesgos y efectos posteriores del tratamiento con dexametasona. Este estudio indica que, a pesar de las complicaciones en el control de la glucosa en sangre, la dexametasona sigue siendo un tratamiento barato, que salva vidas y es eficaz para el coronavirus, siempre que se vigile a los pacientes para detectar cualquier complicación relacionada.

¿Una terapia segura?

Aunque el coronavirus se presentó como una infección respiratoria, los pacientes que necesitaron soporte respiratorio y tratamiento de cuidados intensivos mostraron signos de un sistema inmunológico hiperactivo. Esto provocó un debate sobre si el uso de un esteroide inmunosupresor sería una terapia segura. Se necesitaban pruebas sobre la eficacia y la seguridad, por lo que el grupo de recuperación movilizó rápidamente los ensayos clínicos que indicaron que era beneficioso en los pacientes que necesitaban soporte de oxígeno y que reducía el riesgo de muerte. Sin embargo, la dexametasona es un esteroide potente que puede inducir diabetes y empeorar la diabetes existente. Los pacientes con diabetes ya fueron señalados con un mayor riesgo de covid-19 grave y no estaba claro si este tratamiento podría ser inseguro para este y otros grupos de pacientes en riesgo.

La investigadora principal, la Dra. Victoria Salem, señala: "Realmente no sabíamos cómo manejarlo, íbamos aprendiendo sobre la marcha. El ensayo 'Recovery' mostró que si tenía coronavirus lo suficientemente grave como para necesitar tratamiento hospitalario con un ventilador, entonces hubo una reducción de casi un tercio en las muertes de los pacientes que recibieron dexametasona".

Los especialistas del Imperial College Healthcare NHS Trust evaluaron aún más los beneficios de la dexametasona con un enfoque en los resultados para los pacientes con diabetes, así como en cualquier otra complicación que surja del aumento de azúcar en sangre.

El equipo comparó los resultados de más de 800 pacientes en la ola 1 (sin dexametasona) con más de 1.300 pacientes en la ola 2 (con pauta de dexametasona). Este análisis arrojó que este esteroide redujo significativamente el riesgo de ingreso en la UCI y muerte en un 56%, aunque en pacientes con diabetes se asoció con la necesidad de medicamentos adicionales para mantener los niveles de azúcar en sangre y, en una pequeña minoría, con complicaciones diabéticas graves. Sin embargo, el beneficio independiente de la dexametasona para reducir la muerte por covid no disminuyó en pacientes con diabetes.

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Los resultados de este estudio se publicarán próximamente y, junto con otros estudios, ayudarán a orientar las estrategias de tratamiento futuras. Se necesita más trabajo para identificar los factores de riesgo y la mejor manera de tratar de manera efectiva y segura a los pacientes con diferentes afecciones. Los pacientes pueden recibir cotratamientos y seguimiento adicional para evitar y controlar las complicaciones relacionadas con los esteroides.

Salem concluye: "Nos preocupaba que la dexametasona fuera un arma de doble filo para los pacientes con diabetes, y si bien vimos un aumento en la diabetes inducida por esteroides y un empeoramiento de la diabetes, las muertes se redujeron significativamente en la segunda ola para todos los pacientes. Ahora nos sentimos seguros de usar dexametasona para pacientes con diabetes, solo con la advertencia de que puede resultar en un empeoramiento a corto plazo de su condición. Necesitamos asegurarnos de que tenemos el recurso adecuado disponible para educarlos y monitorearlos durante ese periodo".