Enganchados al Respibien: así es la adicción a los 'sprays' que sufren miles de personas

“Estoy usando oximetazolina desde hace unos meses por una desviación en el tabique que me impedía respirar bien. Hace poco empecé a notar que sin el puñetero frasquito ya no podía respirar”, cuenta Ana. “Llevo con esta adicción cerca de cuatro años, fui al otorrino para tratar de desengancharme, pero el tratamiento no me ayudó y volví a caer”, relata Eduardo. “Llevo varios años con el Respibien y ya ha llegado un punto que no me hace nada y paso las noches sin dormir porque no puedo respirar”, narra Esther. Estos son solo un puñado de los testimonios que vuelcan en internet los adictos a los sprays nasales descongestionantes cuyo principio activo es la oximetazolina.

Miles de personas declaran estar enganchados a estos aerosoles –comercializados con nombres como Respibien, Utabon o VicksInhalador–, hasta el punto de existir grupos en Facebook donde cuentan sus experiencias para tratar de ayudarse como 'Adictos al Respibien (oximetazolina)' y 'Yo también tengo adicción al Respibien'...

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Por las palabras que emplean en sus testimonios parece que la dependencia sea de estupefacientes, “porque estamos habituados a utilizar la palabra adicción relacionada con otro tipo de sustancias, pero realmente lo que sufren algunas personas se puede catalogar de adicción”, sentencia Christian Calvo, otorrinolaringólogo del Hospital Clínico de Santiago de Compostela. “Estas personas se convierten en adictas porque se vuelven dependientes del medicamento, sin su efecto no se sienten cómodas”, apostilla a El Confidencial el vocal de la comisión de otorrinolaringología pediátrica de la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (Seorl-CCC).

El abuso de estos medicamentos en aerosol comienza de una manera inocente, sin aparentemente causar dependencia, ni problemas para los usuarios. No obstante, lo cierto es que puede tornar en poco tiempo en una gran adicción con riesgo para la salud asociado.

“El medicamento funciona muy bien los primeros días, haciendo que la mucosa del interior de la nariz se descongestione, creando más espacio para respirar. Sin embargo, al poco tiempo produce un efecto rebote. Esto quiere decir que cuando desaparece el efecto del medicamento, la mucosa se congestiona más que antes. Por lo tanto, vuelven a necesitar el medicamento, generando un círculo vicioso”, describe el especialista.

Hipertensión, perforación del tabique o ictus

En la ficha técnica de los sprays nasales a base de oximetazolina solo se recogen efectos secundarios leves. Sin embargo, el otorrino explica que en publicaciones científicas se han relacionado este tipo de medicamentos con complicaciones más graves como crisis hipertensiva, perforación del tabique o, incluso, ictus.

Además, de manera más común, el uso excesivo de estos aerosoles causa rinitis medicamentosa: la inflamación de las membranas mucosas de la nariz debida no a una alergia como respuesta fisiológica a un alérgeno, sino al uso continuo de aerosoles o gotas nasales descongestivas.

El especialista aclara que el abuso de estos productos “lo que suele provocar de manera más habitual y lo que vemos en la enorme mayoría de nuestros pacientes es simplemente una dependencia. No son capaces de dejar de utilizar el medicamento”. Como es el caso de Juan José, que lleva “más de 20 años enganchado”, o de Ashanti, que “después de 30 años de adicción a la oximetazolina”, el pasado enero decidió dejarlo.

Riesgo cardiovascular

Calvo alerta de que el abuso de estos productos implica riesgos para el corazón y los vasos sanguíneos: “De hecho, figura en el prospecto del medicamento que no deben emplearlo aquellas personas con problemas cardiovasculares”.

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El otorrino subraya que esto ocurre porque este tipo de medicamentos son de la misma familia que la adrenalina, una hormona que estimula el corazón.

El problema de la venta libre en farmacias

El vocal de la Seorl-CCC considera que la venta libre de estos sprays en farmacias es “un problema, porque a los otorrinos únicamente nos llega una pequeña porción de los pacientes con dependencia a este medicamento”. “La gran mayoría no son conscientes del problema”, apostilla mientras señala que esta opinión es generalizada entre sus colegas.

Al mismo tiempo recuerda cuál debe ser el empleo correcto de estos aerosoles: “Siempre en pautas cortas de tres o cuatro días. Se utiliza en aquellos momentos en los que es preciso conseguir una descongestión nasal, por ejemplo durante un catarro, sinusitis, mocos en el oído, etc”.

Cómo desengancharse de la oximetazolina

El otorrino señala que el proceso para superar la adicción a estos aerosoles nasales es la fuerza de voluntad.

“Les explicamos a los pacientes que están enganchados la situación y que estarán unos días con la nariz congestionada. Y que poco a poco irán recuperando su función normal. Intentamos, para ayudar en el proceso, utilizar otros medicamentos y productos más inocuos como lavados nasales y corticoides en spray”, describe el otorrino.