Qué es el cloretilo: así es la droga de fácil acceso de moda entre los jóvenes

Las alarmas se han disparado en las últimas horas ante el aumento del consumo del cloretilo –un potente anestésico de uso deportivo– como droga. En concreto, la Policía ha advertido de su consumo en la Feria de Sevilla. Y varios especialistas llevan tiempo alertando sobre los riesgos de este producto que los más jóvenes están empleando para ‘colocarse’.

La capital hispalense no es la única zona donde se respira cloretilo para drogarse. Antes del confinamiento, en febrero de 2020, la guardia civil detuvo en El Berrueco (Madrid) a dos individuos que presuntamente menudeo de drogas. Los agentes se incautaron de éxtasis, popper, cristal, cocaína, metanfetamina y ketamina. Pero la sorpresa llegó cuando encontraron también 37 botes de cloretilo.

En los años 80 el cloretilo ya estuvo de moda para ‘colocarse’, pero se ha popularizado de nuevo por culpa de las redes sociales, donde los jóvenes suben vídeos en los que comienzan a reírse a carcajadas después de inhalar el spray. Sin embargo, desconocen los verdaderos riesgos que puede ocasionar en su cuerpo, como son una aceleración de las pulsaciones, el bloqueo del sistema nervioso o arritmias que pueden ocasionar muerte súbita.

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Cabe destacar que el acceso a este producto es muy fácil. Al ser un analgésico deportivo común que no requiere receta médica, se puede comprar en farmacias –incluidas las online– y tiene un bajo coste (unos 6 euros).

Qué produce el cloretilo

Bien empleado, el cloretilo es un anestésico en forma de spray que está indicado para intervenciones quirúrgicas menores o como medicamento deportivo. Este fármaco sirve para aliviar el dolor y proporciona una sensación de anestesia local en la zona en la que se aplica, por lo que se suele usar para pequeñas lesiones o cuando se realiza un tatuaje.

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Pero cuando se inhala los efectos que se consiguen son los siguientes:

• Euforia.
• Analgesia: reducción de la sensación de dolor.
• Cosquilleos y sensación de calor.
• Evasión/desconexión del entorno.
• Alteración del grado de consciencia, debido a que deprime el sistema nervioso central.
• Cambios en la percepción del tiempo.
• Risa incontrolable.
• Confusión/estado de ensueño.
• Disociación.
• Alteraciones auditivas, principalmente en forma de eco o reverberaciones.
• Alteraciones visuales de tipo geométrico a dosis altas.

Riesgo inmediato para la salud

Inhalarlo puede tener “efectos negativos que son bastante graves”, según explica la anestesióloga Elena Casado Pineda. “No olvidemos que estamos hablando de un gas anestésico”, recuerda.

Además, destaca como otro de los peligros que “no se pueden controlar sus dosis porque se inhala sin control, llenando los pulmones y llegando al torrente sanguíneo y al sistema nervioso central”.

En concreto, la médica del Hospital de Gandía señala que los riesgos durante el consumo inmediato “son imaginables”. "Y añádele a 'las maravillas clásicas' el hecho de que te puedes quemar la via aérea a -200ºC”, apostilla.

• La administración directa puede causar dermatitis de contacto y quemaduras, ya que está extremadamente frío.
• Al ser un gas anestésico, provoca una depresión del SNC que puede suponer un riesgo al aumentar la probabilidad de sufrir caídas, desmayos o accidentes.
• Pueden darse náuseas, vómitos y calambres estomacales. Al día siguiente de la toma pueden aparecer diarreas y dolor abdominal.
• Irritación nasal y ocular.
• Incapacidad para hablar.
• Narcosis (sopor/letargo): alteración reversible del estado de conciencia por inhalación de nitrógeno.

Peligros de su uso prolongado

Casado destaca que el gran riesgo, "como todas las drogas, no es el efecto inmediato, sino el de acumulación”. “Un uso prolongado o en dosis altas puede provocar deterioro de la función hepática, arritmias, convulsiones y pérdida de la consciencia”. En este sentido señala los siguientes peligros de su uso continuado:

• Descoordinación, desequilibrio y vértigos.
• Temblores.
• Deterioro/pérdida de la memoria a corto plazo.
• Dolores intensos de cabeza.
• Nistagmo (movimientos rápidos e involuntarios de los ojos) que puede manifestarse con una visión doble.
• El uso crónico también se ha relacionado con un deterioro neurológico grave a largo plazo, que incluye alucinaciones y ataxia.

De hecho, se han notificado casos de coma por el uso indebido del cloretilo. El último reseñable fue el de una menor de Montroi (Valencia) de 16 años que acabó en coma por una intoxicación por inhalación de cloretilo, según informó la prensa local. Por suerte, la adolescente se recuperó.

Aumento del riesgo por mezclar

Si de por sí inhalar este spray es peligroso para la salud, si el consumo se produce en el ambiente festivo en el que se suele hacer y se mezcla con otras drogas, el riesgo aumenta todavía más.

“Puede deprimir la actividad eléctrica del corazón y también sensibilizarlo a las catecolaminas y aumentar el riesgo de arritmias graves combinado con cocaína o anfetaminas”, ejemplifica la anestesióloga.

“O si se mezcla con otras drogas depresoras como opiáceos o Trankimazin, que también está de moda, se produce una potenciación de los efectos depresores como mareos, pérdida de la coordinación, sedación, desmayos, etc”, añade.

En resumidas cuentas, combinar el cloretilo con otras drogas podría producir una parada respiratoria y la muerte.