Las bebidas energéticas y su relación con otras sustancias peligrosas
En los últimos años, ha crecido el número de estudiantes que las ingieren habitualmente a la vez que consumen otras drogas como el alcohol o el cannabis
Se trata de bebidas que contienen altas dosis de cafeína, guaraná y/o taurina, y suelen incluir ciertos ingredientes añadidos que 'prometen' aportar mayor energía y aumentar el rendimiento deportivo. Por esta razón, en los últimos años estos refrescos se han ido popularizando, sobre todo entre los estudiantes de secundaria y los deportistas.
Entre el 40 y el 50% de los jóvenes ha consumido estas bebidas en los últimos 30 días
De hecho, “casi la mitad de los jóvenes han tomado bebidas energéticas durante el último mes, siendo la prevalencia mayor en los chicos que en las chicas”. Así lo asegura un informe publicado por el Observatorio Español de las Drogas de la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas y las Adicciones (OEDA) y difundido por el Consejo General de la Psicología de España.
El documento, que recoge datos sobre la prevalencia de consumo, las tendencias y las percepciones de los jóvenes de entre 14 y 18 años acerca de las bebidas energéticas y extraídos de la encuesta ESTUDES 2021, refleja que más del 50% de los chicos y casi el 40% de las chicas las han consumido en los últimos 30 días.
El consumo de bebidas energéticas, en cifras
Los datos recabados ponen de manifiesto el alcance que tiene el consumo de bebidas con cafeína entre los jóvenes de este grupo de edad. De 2019 a 2021 ha incrementado la prevalencia de ingesta en las chicas, pasando de un 31,1% al 39%. Este consumo, además, está relacionado con la ingesta de alcohol, ya que el 16,1% de los jóvenes había mezclado ambas sustancias durante el último mes, especialmente en los adolescentes de 18 años.
Por ello, el informe subraya que el consumo de estas bebidas energéticas, en general, es mayor entre quienes han consumido, al mismo tiempo, sustancias psicoactivas, como alcohol, tabaco y otras ilegales, y han seguido patrones de riesgo como emborracharse. Según la OEDA, su ingesta está ampliamente extendida en estos grupos de edad, sobre todo en aquellos jóvenes que también consumen cannabis (32,5%).
En cuanto al fracaso escolar, la encuesta también refleja que es posible que exista una relación entre el consumo de bebidas energéticas y sacar peores notas en clase o repetir curso. Incluso, este tipo de alumnos registran más faltas de asistencia escolar que el resto de compañeros. Estas diferencias se incrementan todavía más si los jóvenes las consumen mezcladas con alcohol, como hemos indicado anteriormente.
Tomar precauciones y evitar mezclas
Es muy habitual que los deportistas utilicen este tipo de bebidas para mejorar el rendimiento a la hora de hacer algún tipo de actividad física. Sin embargo, no todas las bebidas señaladas como energéticas son realmente útiles debido a que sus ingredientes pueden ocasionar deshidratación y malestares estomacales.
“Los refrescos que sí cumplen con estos fines son los que emulan la concentración salina del plasma sanguíneo y, por ende, son de fácil absorción y contienen niveles de carbohidratos (azúcares) beneficiosos para aumentar la resistencia”. Así lo explican desde la Clínica Las Condes, donde además advierten de que algunas bebidas conocidas como 'estimulantes' contienen altos niveles de hidratos de carbono que, para poder ser absorbidas por el organismo, extraen agua al cuerpo en vez de proporcionársela, por lo que acaban deshidratando al huésped. Esto es todavía más peligroso en el caso de los deportistas.
También pueden provocan dolores de cabeza, insomnio, malestares gastrointestinales o incluso pueden tener un efecto laxante. "En realidad, estas bebidas no son otra cosa que una droga legal para obtener ciertos beneficios en la vida social", según asegura el cardiólogo Patricio Venegas.
Del mismo modo que señalan en el informe, la mezcla de estos refrescos con drogas como la cocaína o la marihuana “es extremadamente peligrosa”, advierten desde la clínica, ya que aumenta el riesgo de padecer problemas cardiovasculares como presión arterial alta, arritmia o taquicardia. Entre las principales precauciones, el centro clínico destaca 7:
- No deben ser consideradas ni consumidas como recreativo.
- Infórmate de lo que vas a consumir a través de las etiquetas.
- No deben ser consumidas por diabéticos, hipertensos y cardiópatas.
- Evita su consumo si tomas medicamentos y pide consejo médico.
- Procura no mezclar la bebida con alcohol.
- La carga calórica es alta, por lo que no es recomendable su consumo en personas que padezcan obesidad o diabetes.
- No deben reemplazar nunca una dieta variada y equilibrada.
Se trata de bebidas que contienen altas dosis de cafeína, guaraná y/o taurina, y suelen incluir ciertos ingredientes añadidos que 'prometen' aportar mayor energía y aumentar el rendimiento deportivo. Por esta razón, en los últimos años estos refrescos se han ido popularizando, sobre todo entre los estudiantes de secundaria y los deportistas.
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