Toxoplasma gondii: así es el parásito más exitoso del mundo

El 'Toxoplasma gondii' (T. Gondi) es una especie de protozoo parásito intracelular obligado, eucariota y causante de la toxoplasmosis, una enfermedad leve que puede complicarse hasta convertirse en fatal, especialmente en los gatos y en los fetos humanos. Se dice que es probablemente el parásito más exitoso en el mundo, ya que, según indica el Dr. López Tricas, la mitad de la población ha desarrollado anticuerpos frente a él, lo que indica que tiene o ha tenido el parásito en algún momento de su vida.

No existe un tratamiento que pueda erradicar el parásito del cuerpo ni hay ninguna vacuna aprobada para su uso en humanos

Solo en Estados Unidos, más de 60 millones de personas hospedan a este diminuto huésped. Por su parte, un estudio realizado en bancos de sangre y clínicas de embarazo en Australia en la década de 1970 situaba la tasa de infección en un 30%, y otro estudio reciente basado en la comunidad de Australia Occidental encontró que el 66% de las personas estaban infectadas, lo que demuestra que su contagio se ha multiplicado por dos en los últimos 50 años.

¿Quién puede enfermar?

La mayoría de las personas infectadas no enferman, pero en aquellas con el sistema inmune debilitado, o bebés de mujeres que contrajeron la infección durante el embarazo, puede provocar graves lesiones en el cerebro, los pulmones, el corazón, los ojos o el hígado. Además, se ha vinculado con una gran variedad de trastornos neurológicos como la esquizofrenia y los episodios psicóticos. Hasta el momento, no existe un medicamento o tratamiento que pueda erradicar el parásito del cuerpo, ni hay ninguna vacuna aprobada para su uso en humanos.

La enfermedad causada por este parásito, la toxoplasmosis, puede dejar cicatrices en la parte posterior del ojo. Por ello, una nueva investigación buscó signos de ella en personas por lo demás sanas, encontrando que un número significativo presentaba la marca de toxoplasma.

Es muy común que el parásito se aloje en los ojos, concretamente en la retina, causando la infección conocida como toxoplasmosis ocular, y causa ataques recurrentes de inflamación retiniana y cicatrización retiniana permanente. La investigación muestra que generalmente afecta a adultos sanos. Un ataque de inflamación activa provoca ‘flotadores’ y visión borrosa. Cuando la inflamación progresa a cicatrización, puede haber pérdida permanente de la visión.

Un informe realizado por el oftalmólogo del Hospital La Paz de Madrid Jesús Fraile Maya estima la prevalencia de la toxoplasmosis ocular entre el 30 y el 60% de la población en España.

¿Cómo se detecta?

Para diagnosticar esta infección, es necesario un examen de retina, idealmente con las pupilas dilatadas. La lesión retiniana es fácil de detectar, debido a la forma en que el Toxoplasma activa las células retinianas para producir ciertas proteínas, y un oftalmólogo u optometrista puede reconocerlo inmediatamente. A menudo, también se realiza un análisis de sangre para hacer el diagnóstico. Si la afección es leve, el médico puede dejar que el propio sistema inmunitario del cuerpo controle el problema, lo que lleva unos meses. Sin embargo, por lo general se prescribe una combinación de medicamentos antiinflamatorios y antiparasitarios. Si no es tratada, puede ocasionar ceguera permanente.

Los organismos infecciosos del toxoplasma se excretan solo en las heces de los gatos y puede sobrevivir en el ambiente largos periodos

Aunque el T.Gondii puede infectar a la mayoría de los animales, el gato es su mayor portador. Además, los organismos infecciosos del toxoplasma se excretan solo en las heces de los gatos, por lo que requiere una especial atención, ya que puede sobrevivir durante largos periodos en el ambiente, incluso durante condiciones climáticas extremas.

Puedes ingerir los parásitos por accidente si te tocas la boca después de trabajar en el jardín, limpiar una caja de arena o tocar algo que haya estado en contacto con heces de gato infectadas. Los gatos que cazan o que se alimentan con carne cruda tienen más probabilidades de contraer el T. gondii. Los utensilios de cocina que están en contacto con la carne cruda pueden albergar este parásito, por lo que es recomendable lavarlos siempre muy bien con agua caliente y jabón. La superficie de las frutas y verduras también pueden contenerlo, así que para estar seguro de eliminarlo, lava y pela todos los productos, en especial, si los comes crudos.