¿Sufrirás esquizofrenia o desorden bipolar? Ahora es posible detectarlo con antelación

Partiendo de la idea de que sufrir cualquier tipo de enfermedad no es deseable por nadie, sino todo lo contrario, hay algunas que son más terroríficas que otras. Perder la vida es una perspectiva aterradora, pero perdernos nosotros, lo que somos, cómo pensamos y ser incapaces de diferenciar lo real de lo imaginario es discutiblemente peor. Las enfermedades mentales graves, como la esquizofrenia o el desorden bipolar, aunque tratables, implican un cambio en nuestras vidas que resulta difícilmente soportable. Es por esto que su detección temprana puede tener un valor incalculable y, por suerte, un equipo de científicos parece haber dado con la clave para descubrirlas con años de antelación.

El estudio donde el equipo de investigadores muestra sus resultados ha sido publicado por la revista científica 'World Psychiatry', y no solo parece que es posible detectar estos problemas mentales con antelación, sino que, como explican los autores, "se podría hasta prevenirlas". Así lo afirma el autor principal del estudio, el profesor Ian Kelleher, de la University College Dublin, que llevó a cabo el estudio codo con codo con otros investigadores del Instituto Finlandés para la Salud y el Bienestar (THL).

Según datos de la Sociedad Española de Psiquiatría, hay un total de 600.000 personas con esquizofrenia en nuestro país

"La esquizofrenia y el desorden bipolar aparecen, normalmente, en las primeras etapas de la edad adulta y pueden tener un impacto devastador tanto en los propios pacientes como en sus familias", subraya Ian Kelleher. Y continúa: "Nuestros resultados muestran que más de la mitad de los individuos que desarrollan estas enfermedades han acudido a los servicios públicos de salud mental en alguna etapa de su infancia, normalmente muchos años antes de que hayan, siquiera, desarrollado los primeros síntomas de esquizofrenia o desorden bipolar". Esto implica que, de todos los pacientes que hoy en día sufren estas enfermedades, los primeros signos aparecieron incluso décadas antes de haber sido diagnosticados pero, en realidad, ya había algunos síntomas que no fue posible detectar a tiempo.

Del mismo modo, el investigador comenta que sabe que "la acción temprana es la clave para mejorar las perspectivas de la enfermedad para las personas que sufren serios trastornos mentales. Este descubrimiento demuestra las enormes oportunidades que supone la toma a tiempo de medidas para dar a los pacientes tratamiento temprano, incluso cuando todavía se encuentran en su niñez, desarrollando servicios especializados dentro de los existentes sistemas de salud mental pediátrica", asegura el investigador.

Actualmente, en todo el mundo, existen un total de 65 millones de pacientes de esquizofrenia. De hecho, en nuestro país, según datos de la Sociedad Española de Psiquiatría, hay un total de 600.000 personas con "criterios diagnósticos de esquizofrenia o trastornos asociados", lo que representa entre un 0,8 y un 1,3% de la población. Por otra parte, según datos obtenidos por la Encuesta sobre la Salud Mental propuesta por la Organización Mundial de la Salud, el trastorno bipolar afecta a nivel mundial al 2,4% de la población.

Ambos trastornos se diagnostican ya en las primeras etapas de la vida adulta (finales de la segunda década de vida o principios de la tercera). A pesar de esto se sabe que cuanto antes llegue la atención médica, mejores son las perspectivas de desarrollo de la enfermedad y los pacientes pueden llevar (dentro de las limitaciones que estas afecciones suponen, por leves que sean) una vida más 'normal'.

Para llevar a cabo su estudio científico, los investigadores echaron mano del masivo registro finés de enfermedades mentales. Gracias a estos datos, el equipo de científicos pudo determinar que, entre la población general, el riesgo de desarrollo de esquizofrenia o desorden bipolar para pacientes de 28 años de edad estaba situado en el 1,8% para pacientes que no hubieran asistido en ningún momento de sus vidas a los servicios de salud psiquiátrica por problemas mentales sin relación aparente con estos trastornos. Pero para aquellos que sí lo hubieran hecho, sin ser ingresados, el riesgo era del 15%, mientras que en el último de los casos, cuando sí hubiera habido un ingreso psiquiátrico anterior, el riesgo alcanzaba el 37%.

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De hecho, como destaca otro de los autores, el profesor Mika Gissler, "este estudio muestra el inmenso poder que tienen los registros médicos electrónicos a la hora de responder importantes preguntas sobre la salud humana y las enfermedades mentales. Demuestra cómo estos datos pueden ser utilizados para entender no solo el desarrollo, sino también la evolución de las enfermedades mentales serias, desde la infancia hasta la edad adulta, y así poder identificar oportunidades importantes para actuar de forma temprana".

Sobre esto, el profesor Ian Kelleher comenta que "sabemos que es crucial intervenir a tiempo, lo antes posible, y así poder prevenir algunos de los más terroríficos aspectos de la esquizofrenia y el desorden bipolar. Entendemos que en un mundo ideal (que es a lo que aspiramos), intervendríamos incluso antes de que apareciera la enfermedad y de esta manera podríamos prevenirla en su totalidad".