Una vacuna para luchar contra el cáncer de piel muestra resultados prometedores

Las compañías farmacéuticas Moderna y MSD (llamada Merck en EEUU y Canadá) han dado a conocer este martes a través de un comunicado los resultados prometedores que ha arrojado, en ensayos preliminares, una terapia contra el melanoma.

Una combinación de la vacuna experimental contra el melanoma de Moderna Inc (MRNA.O) y la inmunoterapia Keytruda de Merck & Co (MRK.N) redujo el riesgo de recurrencia o muerte por cáncer de piel en un 44% en comparación con Keytruda solo.

El estudio es el primer ensayo aleatorizado que demuestra que la combinación de la tecnología de vacunas de ARNm, que ha estado detrás del desarrollo de las exitosas vacunas covid-19, con un fármaco que reactiva la respuesta inmunitaria ofrecería un mejor resultado para los pacientes con el tipo más mortal de cáncer de piel.

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"Es un gran paso adelante en la inmunoterapia", ha declarado Eliav Barr, jefe de desarrollo clínico mundial y director médico de Merck. Por su parte, el director médico de Moderna, Paul Burton, ha señalado que la combinación "tiene capacidad para ser un nuevo paradigma en el tratamiento del cáncer".

"Comenzaremos estudios adicionales en melanoma y otras formas de cáncer con el objetivo de brindar tratamientos contra el cáncer verdaderamente individualizados a los pacientes. Esperamos publicar el conjunto de datos completo y compartir los resultados en una próxima conferencia médica de oncología, así como con las autoridades", ha señalado Stéphane Bancel, director ejecutivo de Moderna.

Estudio con 157 pacientes

En el estudio en curso participaron 157 pacientes con melanoma en estadio III/IV cuyos tumores fueron extirpados quirúrgicamente antes de ser tratados con el combo fármaco/vacuna o Keytruda solo con el objetivo de retrasar la recurrencia de la enfermedad.

La combinación fue en general segura y mostró un beneficio estadísticamente significativo en comparación con Keytruda solo tras un año de tratamiento. Se produjeron efectos secundarios graves relacionados con el fármaco en el 14,4% de los pacientes que recibieron la combinación fármaco-vacuna, frente al 10% con Keytruda solo.

Un campo de estudio prometedor

En octubre, Merck ejerció una opción para desarrollar y comercializar conjuntamente el tratamiento, conocido como mRNA-4157/V940, compartiendo los costes y cualquier beneficio a partes iguales. Merck y Moderna tienen previsto discutir los resultados con las autoridades reguladoras e iniciar un estudio de fase III en pacientes con melanoma en 2023.

La colaboración entre Merck y Moderna es una de las varias que combinan potentes fármacos que activan el sistema inmunitario para combatir el cáncer con la tecnología de vacunas de ARNm. Estas vacunas, denominadas neoadyuvantes, están diseñadas para atacar tumores muy mutados.

La vacuna personalizada se combina con Keytruda (de Merck), un inhibidor de los puntos de control diseñado para desactivar una proteína llamada muerte programada 1 (PD-1), que ayuda a los tumores a eludir el sistema inmunitario.

Para crear la vacuna, los investigadores tomaron muestras de los tumores de los pacientes y de tejido sano. Tras analizar las muestras para descifrar su secuencia genética y aislar proteínas mutantes asociadas únicamente al cáncer, esa información se utilizó para diseñar una vacuna contra el cáncer a medida.

Cuando se inyecta a un paciente, sus células actúan como una planta de fabricación, produciendo copias perfectas de las mutaciones para que el sistema inmunitario las reconozca y destruya.

La vacuna personalizada de Moderna puede fabricarse en unas ocho semanas, un plazo que la empresa espera reducir a la mitad con el tiempo, según Burton.

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Barr señaló que las empresas tienen la intención de estudiar este método en otros tipos de cáncer con mutaciones muy marcadas, como el de pulmón. Otros tipos de cáncer muy mutados son los de vejiga y algunos de mama triple negativo.

BioNTech SE (22UAy.DE), competidor de Moderna mRNA, también tiene en marcha varios ensayos de vacunas contra el cáncer, entre ellos uno con el Memorial Sloan Kettering Cancer Center de Nueva York, que está probando una vacuna personalizada de BioNTech en combinación con Tecentriq de Roche (ROG.S) en pacientes con cáncer de páncreas.

Gritstone Bio Inc (GRTS.O) está probando una vacuna personalizada de ARNm autoamplificante en combinación con las inmunoterapias Opdivo y Yervoy de Bristol Myers Squibb (BMY.N) en un ensayo intermedio en pacientes con tumores sólidos avanzados.

Los expertos señalaron que las vacunas personalizadas son una de las muchas ideas prometedoras contra el cáncer en las que se está trabajando tras muchos fracasos en este campo.

"En general, creo que las vacunas contra el cáncer se encuentran en una especie de punto de inflexión, y probablemente habrá muchas vacunas en desarrollo en los próximos cinco años", ha destacado la Dra. Mary Lenora Disis, directora del Instituto de Vacunas contra el Cáncer de UW Medicine en Seattle.

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