Así puedes tratarte una gripe o un catarro sin ir al médico, según los sanitarios

Gripe, catarros y otros virus respiratorios nos acompañan durante los meses de invierno desde siempre, aunque en los dos últimos años su presencia ha sido anecdótica por la supremacía incuestionable del SARS-CoV-2. Ahora han vuelto, y lo han hecho con fuerza, como queriendo recuperar el tiempo perdido. Los datos hablan por sí solos: en la semana 48 de este año (del 28 de noviembre al 4 de diciembre), la tasa de gripe ha sido de 164 casos por 100.000 habitantes; en 2018, en esa misma semana, la tasa era de 15,5 casos por 100.000 habitantes y hasta enero no se superaron los 100 casos por 100.000 ciudadanos. Sumando los casos de covid, gripe y VRS (virus respiratorio sincitial), las infecciones respiratorias agudas afectan en estos momentos a 846 personas de 100.000.

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Fran Sánchez Becerril

La cifra es alarmante, por su magnitud y por su prematuridad. “Lo normal es que los picos de infecciones respiratorias comiencen en la semana 49 o 50, a partir de ahí van subiendo para después caer hacia finales de enero”, describe Guillermo Estrada, coordinador del grupo de respiratorio y tabaquismo de la Sociedad Española de Farmacia Clínica, Familiar y Comunitaria (SEFAC) .“Pero este año se han adelantado casi un mes y han llegado con mucha fuerza. Si siguen aumentando hasta los últimos días de enero como en años anteriores, no me quiero imaginar las tasas que se van a alcanzar”, alerta.

La explosión de gripes, catarros y covid coincide con las huelgas de médicos de atención primaria que se están llevando a cabo en diferentes comunidades, lo que hace aún más difícil conseguir una cita médica. La opción B es acudir a un servicio de urgencias, pero no suele ser una decisión acertada ni para el propio paciente -que tiene que esperar muchas horas en las salas de espera atiborradas – ni para los sobrepasados sanitarios, que insisten en que, lo habitual, es que sean procesos leves y autolimitados en el tiempo.

Enfermedades de siempre

El doctor José María Molero, portavoz del grupo de trabajo de enfermedades infecciosas de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (SemFYC) destaca que “hay enfermedades que se repiten todos los años y sabemos como evolucionan. Los catarros de ahora son los mismos de siempre; el virus de la gripe es similar al de otros años”. Lo que quiere decir el médico es que las personas sin problemas de salud importantes pueden tratarse en su casa. “Esto no es potenciar la automedicación, sino la autorresponsabilidad en la salud. De hecho, que el paciente se quede en su casa y se automedique es lo recomendado”, insiste.

Los ciudadanos hemos escuchado insistentemente que no debemos consumir medicamentos sin el consejo médico, una verdad con matices porque, defiende Molero, “la automedicación responsable no está contraindicada para el uso de fármacos para controlar los síntomas de los catarros y gripe. Lo que no hay que hacer nunca es automedicarse con antibióticos”.

Que un catarro progrese a una neumonía ocurre en uno de más de 500 pacientes y a una sinusitis bacteriana, en uno de mil

Los antimicrobianos están limitados a infecciones bacterianas, que pueden aparecer después de un proceso vírico, aunque es una evolución muy infrecuente. “Que un catarro progrese a una neumonía ocurre en uno de más de 500 pacientes; que un catarro nasal derive en una sinusitis bacteriana, sucede en uno de mil casos, y que tomar antibióticos prevenga las complicaciones o reduzca el tiempo de las infecciones respiratorias víricas, no es cierto”, zanja el portavoz de SemFYC.

Entonces, ¿qué hay que hacer?

Médicos y farmacéuticos ofrecen diferentes consejos para combatir los síntomas asociados a gripes y resfriados, lo que no significa que sean propuestas contradictorias. Los facultativos ponen el acento en la importancia de mantener una correcta hidratación para “fluidificar las secreciones y favorecer su expulsión; humidificar el ambiente (preferible a los aerosoles con vapor caliente) y hacer lavados nasales de agua con sal con una jeringuilla”, enumera Molero. “Si esto no resuelve la congestión, entran en acción los fármacos, con descongestionantes externos (gotas o espráis) utilizados durante los primeros 5 días, alivian la congestión nasal, o con combinaciones de fármacos y antihistamínicos que se pueden utilizar durante unos días para respirar mejor (pero hay que añadir un plus de hidratación porque estos medicamentos resecan las vías respiratorias).

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Alimente

Las opciones se amplían en la farmacia. Guillermo Estrada, farmacéutico en Lorca (Murcia) confirma la elevada incidencia actual de infecciones respiratorias y defiende el consejo de salud que se ofrece en las oficinas de farmacia. “Hay estudios que confirman que el 20% de las infecciones respiratorias leves que se atienden en Primaria se pueden resolver en la farmacia. Esto es relevante porque es una descarga importante para los médicos”.

Ayuda en la farmacia

Hecha esta aclaración, el miembro de SEFAC expone la amplitud de recursos que ofrecen las farmacias para abordar con éxito las infecciones respiratorias, desde el diagnóstico – “disponemos de test rápidos de covid, gripe y VRS, que son una herramienta espectacular” – hasta los antigripales – “hay más de 250 referencias aprobadas” -, jarabes antitunsivos o mucolóticos. ¿Por qué el médico se aferra a la ingesta de líquidos, el agua con sal y el paracetamol o Nolotil? “Porque la mayoría de los fármacos para las infecciones respiratorias leves no están financiadas y los facultativos no las pueden prescribir”, despeja Estrada.

Por tanto, la farmacia es una opción muy válida para buscar alivio sintomático, y "el profesional podrá determinar con bastante seguridad qué infección padece el enfermo".

Atención a los síntomas

En el contexto de 'tripledemia actual', el coordinador de respiratorio de SEFAC revela algunas pistas para saber de qué infección se trata:

• Dolor de cabeza y fiebre: gripe o covid (el resfriado no suele dar fiebre). El paracetamol es el fármaco indicado.
• Cuando hay congestión nasal (sensación de no poder respirar): es más probable que sea un resfriado, incluso covid.
• Dolor muscular y cansancio extremo: gripe.
• Tos:covid o resfriado.
• Aparición gradual de los síntomas: característico de resfriado y covid
• Aparición brusca de síntomas y evolución rápida: gripe.
• Picor nasal: covid y resfriado
• Dolor de garganta: covid y resfriado

Fármacos sin receta

El boticario de Lorca enumera los fármacos que se pueden administrar sin receta, si bien "necesitan una valoración clinca previa":

• Paracetamol: en la farmacia hay todas las dosis de paracetamol desde 500, 650 mg y 1g, pero la cantidad de comprimidos que vienen en la caja es menor.
• Ibuprofeno: solo se venden sin receta las presentaciones de menos de 600 mg.
• Antigripales: recomendados para gripe, resfriados y covid. Contienen diferentes principios activos: analgésicos y antipiréticos, descongestivos, antitusivos, mucolíticos. Su precio oscila entre 8 y 12 euros y un envase suele ser suficiente para resolver la infección. “Son la opción perfecta porque reúnen tres tratamientos en uno y la adherencia es perfecta”.
• Mucolíticos y expectorantes

Remedios naturales

Jon Ruiz, farmacéutico en Amorebieta (Vizcaya) reitera el valor del consejo de salud en la farmacia, donde además de las opciones químicas hay otras naturales. “Todas ellas mejoran los síntomas, y elegir una opción u otra depende de las preferencias del paciente”.

Entre los preparados naturales, Ruiz apunta:

• Kaloba: compuesto por plantas tradicionales, actúa como descongestivo y alivia el malestar del catarro.
• Complejos a base de plantas para estimular el sistema inmunológico.
• Aceites esenciales: en cápsulas (vía oral), de aplicación tópica o en difusor (mejoran el ambiente de una habitación).
• Homeopatía: “A pesar de la mala prensa, para mí suponen una buena opción”, defiende el boticario. Cita el oscillococcinum para las fases iniciales del proceso respiratorio.
• Propóleo: (derivado de la miel) en espráis o ampollas, es un antiinflamatorio y antiséptico para aliviar las molestias de garganta.
• Plantas enteras: es una opción cuya demanda está en descenso. Entre ellas destacan tomillo, eucalipto y salvia.
• Infusión de tomillo: a base de sofrito con ajo (es vermífugo), agua, pan y tomillo (orégano opcional). Se prepara una infusión y se cuela. “Es muy eficaz para la carraspera de garganta”, asegura Jon Ruiz, que confiesa ser un fiel seguidor de este ‘consomé’ desde su infancia.

Cuando sí hay que ir al médico

Aunque la mayoría de las veces no es necesario ir al médico ante un catarro, gripe, incluso covid, José María Molero insiste en que “si el paciente nota algo que no le parece normal, debe llamar por teléfono a su centro de salud para que un médico valore si necesita algún tipo de atención extra”.

Las señales de alerta en el curso de un proceso respiratorio vírico son:

• Dolor al respirar en una zona determinada del pecho o en los costados
• Dificultad al respirar
• Fiebre prolongada: en una gripe, debe bajar de 38º C al cuarto día; y si persiste después del día 5, hay que consultar al médico.
• Fiebre muy alta, por encima de 39,5º C y 40º C más de 48 horas
• Pérdida de la conexión y de la alerta. Decaimiento extremo.
• Mayores de 70 años, con enfermedades crónicas, que no mejoran al cabo de los 7 y 10 días, deben consultar.
• Diarrea que dura más de 4 días o 3 días si es con más de 8 deposiciones al día.