Alerta en los hospitales españoles: las urgencias están colapsadas en todas las comunidades

Los propios sanitarios del Hospital La Paz de Madrid denunciaban esta semana el colapso que están sufriendo las urgencias de su centro ante el aumento de pacientes por la alta incidencia de virus, la falta de recursos y las horas bajas que vive la atención primaria. Los sindicatos apuntaban a que más de 160 personas se acumulaban en los pasillos de la clínica capitalina, esperando para ser atendidas o, incluso, para ingresar.

Escenas parecidas se están viviendo en los hospitales catalanes, como el Vall d'Hebron y el Bellvitge. La misma situación que ocurre en el Hospital Universitario de Toledo, donde han llegado a estar dos días con más de 60 personas esperando para ingresar.

El colapso de las urgencias está ocurriendo en los hospitales de todo el territorio nacional, según alertan desde la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (Semes). Una situación que califican de "complicada e insostenible", que "no ha hecho más que aumentar durante los primeros días del año, sin que el Gobierno de España y las comunidades autónomas apliquen soluciones de futuro para el sistema sanitario". En concreto, actualmente estos servicios atienden a un 30% más de pacientes de media respecto a cifras de 2019.

Desde Semes llaman la atención, una vez más, al Gobierno de España sobre la "necesidad inmediata de rescatar a la sanidad para evitar que nuestro país, en cinco años, se encuentre sin médicos en la base del sistema". E instan a dar respuesta a todos los pacientes, al tiempo que recuerdan que "para ello es necesario aprobar la especialidad de Medicina de Urgencias y Emergencias, como parte de la solución ante el grave problema de recursos humanos que vive la sanidad española".

Colapso en todas las regiones

“En Madrid estamos ante un aumento de entre el 10 y el 20% y con una mayor necesidad de ingreso”, explica Juan Armengol, presidente regional de Semes, ante la presión que están sufriendo los Servicios de Urgencias de la comunidad.

En el caso de Asturias, algunos hospitales como el Hospital Universitario Central de Asturias han alcanzado su récord absoluto de todos los tiempos este 9 de enero, según indica el responsable de la sociedad en el principado, José Antonio García, que añade que “las causas se deben a las dificultades de acceso de usuarios y pacientes debido a lo que sucede en atención primaria, sumando a esto la patología respiratoria estacional, el agravamiento de patologías crónicas y los festivos de las vacaciones navideñas”.

Ante la situación sanitaria, los expertos han indicado que cualquier aumento es crítico, ya que las urgencias llevan tensionadas demasiado tiempo. Las cargas asistenciales, el agotamiento y los problemas en otros niveles asistenciales no hacen más que poner en riesgo la red de seguridad del sistema de salud que supone este servicio.

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“En Cantabria, la presión se sitúa entre un 20 y un 35% más”, comenta el presidente regional de Semes, Luis Prieto. Lo mismo sucede en La Rioja, según explica el responsable autonómico, Joseba Rodríguez, en donde se mantiene el incremento de un 30% de hace meses.

En Navarra, según Iñaki Santiago, presidente en su comunidad, el incremento supera el 10%. El mismo aumento porcentual que en Murcia: “No hay sitio para los pacientes, no hay drenaje [paso de pacientes a hospitalización]”, indica Pascual Piñera, responsable murciano de la asociación, que continúa: “En nuestro caso, el incremento no es muy elevado, por lo que nuestro problema es que estamos sin camas en las cuales ingresar a los pacientes”.

En las Islas Baleares, el presidente regional de la sociedad, Daniel García, confirma que “durante todo el 2022 mantuvimos un aumento del 23%. En lo que llevamos de 2023, respecto al mismo periodo de 2022, ya hay un incremento del 33%”. En este sentido, en hospitales como el de Manacor, el porcentaje es de un 33% respecto al mismo periodo de 2022, según los datos que maneja Semes.

Sigue empeorando en 2023

Los expertos indican que esta tensa situación se ha mantenido durante todo 2022 y que, con este nuevo año, los datos están empeorando. Así lo recalca José Manuel Fandiño, presidente de la asociación en Galicia: “Seguimos batiendo récords. De manera global, hablamos de un aumento de un 15-20% con respecto a 2022. Sin ir más lejos, el lunes 9 de enero de 2023, en el Hospital Universitario de A Coruña fuimos testigos de un aumento del 45% con respecto a datos mensuales de enero 2022. Y con 70 pacientes sin cama”. Además, añade que el problema principal al que se enfrentan es la falta de drenaje en estos servicios e indica que, en ciudades como Pontevedra y Vigo, los picos también son de entre 40-45% respecto al 2022.

En esta misma línea se muestra Amparo Fernández de Simón Almela, presidenta autonómica de la sociedad en Andalucía, que confirma el incremento del 25% con el que ya han luchado durante el 2022 en su región, al tiempo que añade que “hay aumento de ingresos por agudizaciones de pacientes crónicos y pluripatológicos”. Del mismo modo, indica que los hospitales de provincias como Sevilla están con aumento de presión "muy altos" con más de 40 pacientes a la hora y con más de 400 pacientes de media, cuando se partía de unos 300.

Por su parte, Rafael Marrón, responsable de Semes en Aragón, explica que “el principal problema que tenemos actualmente es que se sigue entendiendo la urgencia como almacén de pacientes. El 10 de enero teníamos en urgencias 76 ingresos pendientes de cama, y más de la mitad de los pacientes esperando entre 48 y 72 horas por una habitación. Estamos en cifras récord. El mismo 10 de enero llegamos a tener a las seis de la tarde 215 pacientes”.

Respecto a la Comunidad Valenciana, Javier Millán apunta a que el incremento se sitúa en un 15%, pero con picos en días concretos de hasta el 40%.