La evolución de la salud menstrual: por qué los productos del futuro van a ser más efectivos

A lo largo del siglo XX, la menstruación se vio envuelta en un eufemismo: se hablaba de “esa época del mes”, una debilidad, un fastidio... Sin embargo, con el paso del tiempo se fue normalizando este ciclo natural en el cuerpo de la mujer mientras es fértil y le permite quedarse embarazada de manera natural. Si bien es cierto que las opciones de una buena salud menstrual son muchas en la actualidad, la tecnología no ha cambiado demasiado en los últimos años.

¿Qué es exactamente la salud menstrual?

La salud menstrual hace referencia a la salud física y emocional relacionada con el ciclo menstrual de una mujer. Incluye aspectos como la regularidad del ciclo, la intensidad y duración de los síntomas premenstruales y menstruales, y la ausencia de problemas de salud relacionados. También se considera la educación y el conocimiento sobre el ciclo menstrual y cómo puede afectar a la salud general de una mujer.

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Y ¿qué hay de nuevo?

Un equipo de científicos de la Universidad de Maryland (EEUU), dirigidos por el investigador Srinivasa Raghavan, ha creado un nuevo apósito superabsorbente que puede retener tres veces más líquido que los tampones para la menstruación o las toallitas sanitarias para la micción.

Se trata de un material innovador, un hidrogel en forma de lámina, hecho de un material similar a la gelatina que contiene un polímero capaz de absorber más de 30 mililitros de sangre menstrual en 60 segundos. Hay que recordar que los tampones actuales de gasa solo capturan el 55 por ciento de esta cantidad.

Grandes superabsorbentes

La hoja de hidrogel ha sido probada no solo con sangre, sino también con jarabe o fluidos más espesos que el agua para probar su capacidad de absorción. El producto está siendo muy eficiente en las pruebas de laboratorio y los investigadores confían en poder fortalecer aún más sus capacidades y hacer que, incluso, los futuros tampones o toallitas sanitarias sean reutilizables en el mercado, en aras de convertir un dispositivo actualmente desechable en cada uso en uno más amigable con el medioambiente gracias a su poder de reutilización.

De hecho, también podrían utilizarse como tiritas o para el tratamiento de heridas en general. Estos apósitos absorbentes se podrían emplear como apósito principal o secundario debido a que su núcleo único y excepcionalmente absorbente podría controlar el sangrado.

La clave está en que el hidrogel se suele volver quebradizo, al igual que los sólidos y, cuando absorbe grandes cantidades de líquido, finalmente se desmorona. A diferencia de estos materiales tradicionales, el nuevo hidrogel es un rediseño de cómo se deberían comportar estos materiales idóneamente; es decir, mezclar las propiedades deseadas de una toalla de papel y de un hidrogel, todo en uno gracias a un buen cóctel químico.

"El nuevo apósito superabsorbente puede absorber tres veces más líquido que los tampones"

"Al igual que el vinagre se encuentra con el bicarbonato de sodio, se desarrollaron burbujas de dióxido de carbono dentro del gel", explican los investigadores. Tras formar un material parecido a la espuma, lo intercalaron entre losas de vidrio hasta que se convirtió en una fina lámina que, posteriormente, fue expuesta a la luz ultravioleta.

Lo siguiente que sucedió es que el líquido se asentó en las burbujas, eliminando los poros, en una lámina. Esa lámina fue finalmente sumergida en alcohol y glicerol, y secada al aire. Y voilà. Se obró el milagro: consiguieron una lámina suave y flexible con una capacidad de absorción de más de 100 veces su peso en agua. El objetivo es seguir mejorando el producto y optimizarlo para aumentar su capacidad de absorción.