Emface: las claves del discreto 'lifting' muscular que se ha puesto de moda

“Envejecer es el único medio de vivir mucho tiempo”, decía Auber con cierta sorna. Las técnicas para que el paso de los años no se note en la cara son numerosas, y todos estamos familiarizados con la lectura de informaciones sobre el bótox, rellenos, ultrasonidos y otras técnicas que prometen, con mayor o menor éxito, que las personas de tu entorno te digan que los años no pasan por ti.

En esta columna pretendo manteneros al día sobre las novedades en dermatología medicoquirúrgica y estética. Por eso os quería informar que acaba de salir al mercado una nueva tecnología que actúa de forma diferente: tonifica la musculatura de los músculos elevadores de la cara y aumenta la formación de colágeno. Lo consigue sin agujas, sin toxinas, sin rellenos y sin hematomas. Y sirve para hombres y mujeres.

En qué consiste

Al paciente se le colocan unos parches en la frente y en ambas mejillas. La sesión dura entre 20 y 30 minutos, y se recomiendan 4 sesiones al año. Los efectos se notan desde la primera sesión y duran algo más de 9 meses.

Durante esos 20 minutos, el aparato provoca contracciones musculares dirigidas específicamente a estos músculos faciales, que son los músculos elevadores de la cara:

• frontales (los músculos responsables de levantar las cejas)
• cigomáticos mayor y menor (los músculos responsables de la sonrisa)
• el risorius (los músculos de las mejillas)

Mecanismo de acción

El sistema combina HIFES (high-intensity facial electrical stimulation) con radiofrecuencia, es decir, utiliza campos eléctricos de alta intensidad emitidos simultáneamente con radiofrecuencia sincronizada. Estas dos tecnologías combinadas aumentan la densidad y el tono de los músculos faciales y de sus fascias, e induce la formación de elastina y colágeno en la piel.

Sin dolor

Muchos de los tratamientos que utilizamos en dermatología estética son dolorosos como los pinchazos de bótox o rellenos, Ultherapy, etc. Sin embargo, este no duele. El paciente nota que determinados músculos faciales se contraen involuntariamente al ser estimulados. Lo interesante es que al terminar el tratamiento no hay enrojecimiento ni hematomas, y se puede volver a la actividad diaria habitual sin secuelas.

Sin resultados asombrosos

Los resultados que vemos en los pacientes son sutiles pero evidentes. Se puede apreciar un discreto efecto lifting y una disminución de las arrugas después del tratamiento.

La técnica, al no introducir ningún material extraño en la piel, no tiene consecuencias estéticas a medio o largo plazo. Por esto puede ser atractiva para personas que quieren resultados naturales

Una de las ventajas de la técnica es que no deja huella estética, es decir, que al no introducir ningún material extraño en la piel no tiene consecuencias estéticas a medio o largo plazo. Por ello esta técnica puede ser atractiva para personas que quieren resultados naturales.

Opinión

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Lo verdaderamente único es que se trata de una técnica que, por primera vez, tonifica de forma precisa determinada musculatura facial, por lo que es un abordaje totalmente nuevo del rejuvenecimiento sin cirugía. Emface se unirá al resto del arsenal estético del que disponemos los dermatólogos para ayudar a envejecer a nuestros pacientes con elegancia y discreción.

Por último, un toque de sentido común: la mejor técnica antienvejecimiento es aceptar que vamos a envejecer. Por ello no debemos olvidar que “las peores arrugas son las del alma”.