Sí que eres lo que comes: cuanto mejor sea, mejor estarás

Seguir una dieta saludable, repleta de frutas y verduras, podría ser tan buena para tu organismo como dar 4.000 pasos al día, especialmente entre los adultos de mediana edad, según un nuevo estudio publicado en la revista European Journal of Preventive Cardiology, una publicación líder de la Sociedad Europea de Cardiología.

"Este estudio proporciona algunos de los datos más sólidos y rigurosos hasta el momento para respaldar la conexión de que una mejor dieta puede conducir a una mejor condición física", comenta Michael Mi, del Centro Médico Beth Israel Deaconess de Harvard y autor principal del trabajo. “La mejora en el estado físico que observamos en los participantes con mejores dietas fue similar al efecto de dar 4.000 pasos más cada día”, añade.

Las ventajas de tomar un puñado de cacahuetes para tu salud

Sarah Romero

Nutrición y salud

La investigación se llevó a cabo entre una cohorte de adultos que vivían en una comunidad compuesta por 2.380 personas del Framingham Heart Study. En general, el grupo de participantes estaba bien equilibrado presentando una edad media de 54 años y siendo el 54% de ellos mujeres. Los expertos midieron los niveles de oxígeno a todos los participantes, hombres y mujeres, que realizaron la misma cantidad de actividad física: correr en una cinta caminadora.

Concretamente, evaluaron la aptitud física de los voluntarios mediante una prueba de ejercicio cardiopulmonar de esfuerzo máximo en un cicloergómetro, que mide el VO2 máximo, una evaluación estándar de oro que indica la cantidad de oxígeno utilizada durante el ejercicio de máxima intensidad (también se conoce como capacidad aeróbica máxima o consumo máximo de oxígeno).

Respecto a la dieta, los investigadores evaluaron la misma mediante el cuestionario de frecuencia de alimentos semicuantitativo de Harvard, que examinó el consumo de 126 elementos dietéticos durante el último año, con opciones que iban desde nunca o menos de una vez al mes hasta seis o más porciones al día. Estos datos se emplearon para calificar la calidad de la dieta utilizando el índice de alimentación saludable alternativa (AHEI; 0 a 110) y el puntaje de dieta de estilo mediterráneo (MDS; 0 a 25), asociados con la salud del corazón. Tener una puntuación muy alta indicaba una dieta de mejor calidad (con las verduras, las frutas, los cereales integrales, los frutos secos, las legumbres, el pescado y las grasas saludables como protagonistas).

¿Estaba asociada una dieta saludable a la aptitud física?

Tras controlar ciertos factores que podrían influir en la conclusión de los datos, como el sexo, la edad, el índice de masa corporal (IMC), la ingesta diaria total de energía, la diabetes, los niveles de colesterol, el tabaquismo, la presión arterial y el nivel de actividad física habitual, los puntajes promedios fueron 66,7 para AHEI y 12,4 para MDS.

“En los adultos de mediana edad, los patrones dietéticos saludables se asociaron fuerte y favorablemente con el estado físico, incluso después de tener en cuenta los niveles de actividad habituales. La relación fue similar tanto en mujeres como en hombres, y más pronunciada en los menores de 54 años en comparación con los adultos mayores”, aclaran los autores.

"Una dieta de estilo mediterráneo con alimentos frescos e integrales y un mínimo de alimentos procesados, carnes rojas y alcohol es un excelente lugar para comenzar"

¿Qué significaba esto?

Para profundizar en esta asociación de nutrición, ejercicio y salud, los científicos examinaron la relación entre la calidad de la dieta, el estado físico y los metabolitos. La metabolómica implica la medición integral de todos los metabolitos en una muestra biológica. Los metabolitos son las sustancias, generalmente moléculas pequeñas, que se producen o utilizan cuando un organismo descompone los alimentos, las drogas, las sustancias químicas o sus propios tejidos. Son los productos del metabolismo.

Descubrieron que 24 de los 201 metabolitos analizados en muestras de sangre recogidas de 1.154 del total de voluntarios del estudio estaban asociados con una dieta y un estado físico deficientes o con una dieta y un estado físico favorables. Los resultados se mantuvieron incluso después de ajustar los mismos factores considerados en los análisis anteriores.

“Nuestros datos de metabolitos sugieren que comer de manera saludable se asocia con una mejor salud metabólica, lo que podría ser una forma posible de mejorar el estado físico y la capacidad de hacer ejercicio", continúa Mi.

Sin embargo, el investigador recalca que se trata de un estudio observacional y no se puede extraer una causa y efecto de las conclusiones, pero sí que sirve para destacar nuevamente los beneficios potenciales de una dieta más saludable, no solo para la prevención de enfermedades, sino también como una forma de mejorar la condición física y, con ello, la calidad de vida.