Las enfermedades cardiovasculares y la esquizofrenia están relacionadas entre sí
Un nuevo trabajo científico ha vinculado estos problemas de salud (además del tabaquismo) a un mapa genético determinado con muchos puntos en común
Las enfermedades están más relacionadas entre sí de lo que puede parecer, al menos algunas de ellas. Ese es el caso, según ha probado un nuevo estudio, de la esquizofrenia, que se ha vinculado a la aparición de enfermedades cardiovasculares.
En el trabajo científico que ha dado a conocer la American Psychiatric Association se han establecido curiosas correlaciones. Por ejemplo, se ha visto que las personas que tienen esta enfermedad neurológica son más propensas a padecer una adicción al tabaco y, al mismo tiempo, presentan un menor riesgo genético de sufrir obesidad. El estudio, publicado en el American Journal of Psychiatry, ha revelado que hay una unión entre los factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares y la esquizofrenia, sobre todo en el contexto del índice de masa corporal y el tabaquismo.
"Además, debemos tener en cuenta que el tabaquismo puede ser una forma de 'automedicación' para los esquizofrénicos"
Dados los resultados del estudio, se ha querido recalcar la importancia que tienen los factores ambientales en el desarrollo de la obesidad y de otras morbilidades asociadas a las enfermedades cardiovasculares.
El equipo de científicos, liderado por la doctora Linn Rødevand, analizaron las variantes genéticas de las personas estudiadas para establecer las secciones de su código genético compartidas entre las dos enfermedades a examen. Es aquí donde se encontraron los genes compartidos y se estableció la correlación entre las enfermedades cardiovasculares y la esquizofrenia.
Además de eso, los investigadores también observaron que esas localizaciones del genoma se comparten con otras enfermedades y factores físicos, como la relación cintura-cadera, la tensión sanguínea, la diabetes tipo 2, la cantidad de lípidos en sangre y las enfermedades coronarias.
Por otra parte, la correlación entre la esquizofrenia y el tabaquismo significa que aquellos que padecen esta enfermedad neurológica se ven mucho más afectados por las cualidades adictivas de la nicotina. Como explican los propios investigadores, "los pacientes con esquizofrenia sufren un mayor efecto de la nicotina y, por tanto, un mayor síndrome de abstinencia cuando dejan el tabaco. Además, debemos tener en cuenta que el tabaquismo puede ser una forma de automedicación, dado que el consumo de esta sustancia supone, hasta cierto punto, un intento de compensar la sobreestimulación de los receptores nicotínicos nAChRs".
Al igual que todo el mundo, debido a que sigue siendo la principal causa de muerte a nivel mundial, los esquizofrénicos deben mantener un gran nivel de alerta para evitar la aparición de las enfermedades vasculares y del corazón, dado que se encuentran en una situación de más riesgo (genético) que aquellas personas con el cerebro sano.
Las enfermedades están más relacionadas entre sí de lo que puede parecer, al menos algunas de ellas. Ese es el caso, según ha probado un nuevo estudio, de la esquizofrenia, que se ha vinculado a la aparición de enfermedades cardiovasculares.