Testosterona: clave para la salud, la sexualidad y la vitalidad de los hombres a cualquier edad

El hombre, al igual que la mujer, envejece y su calidad de vida empeora cuando sus niveles hormonales disminuyen.

A pesar de ello, no existe la misma concienciación que con la mujer, la menopausia y todos sus trastornos. El hombre con la andropausia tiende a normalizar ciertos cambios porque los trastornos no ocurren de manera brusca.

Con el paso del tiempo, las funciones fisiológicas del organismo se van deteriorando. Las hormonas caen, los niveles bajos nos exponen a sufrir diversas patologías y a encontrarnos peor, con menos ánimo, más cansados. Lo positivo es que estos déficits hormonales pueden tratarse.

Como experta en equilibrio hormonal y metabólico de Neolife vamos a hablar de la importancia de la testosterona en el hombre. Una apariencia más feminizada (no buscada), una osteoporosis, una pérdida de masa muscular, una importante sensación de cansancio, problemas del sueño, un abdomen prominente, el sobrepeso, un estado de ánimo bajo, una pérdida del deseo sexual o directamente una disfunción eréctil son signos y síntomas de un déficit androgénico del hombre adulto, o lo que es lo mismo, un nivel bajo de testosterona.

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Señores, antes de ir a comprar Viagra, mejor revisen el estado de sus hormonas, será un acto más interesante para su salud general.

La testosterona nos evita caer en la fragilidad si la acompañamos de ejercicio físico y de una alimentación rica en proteínas. Se trata de una hormona anabólica, es decir, que promueve la síntesis de proteínas, indispensable para la ganancia de masa muscular.

Metabólicamente, esta hormona puede revertir estados alterados de la glucosa y de resistencia a la insulina. Además, es un arma interesante contra la grasa visceral, ese temido acúmulo de tejido adiposo interno que produce factores inflamatorios que aumentan nuestro riesgo de cáncer.

Alejarnos de la osteoporosis y de la elevada mortalidad tras una fractura de cadera es posible con la testosterona, ya que mejora la densidad mineral ósea.

Esta hormona es amiga del corazón, mejora el perfil de los lípidos e incrementa la perfusión sanguínea miocárdica.

¿Qué decir de la próstata? Pues bien, se ha documentado que los cánceres de próstata agresivos son más frecuentes en personas que han mantenido niveles bajos de testosterona a lo largo del tiempo.

La testosterona tiene numerosas funciones, nos puede incluso ayudar a alcanzar, en cierto modo, la felicidad, mejorando nuestras habilidades mentales (rendimiento cognitivo) y disminuyendo la tristeza.

Y viene ahora la pregunta pragmática: ¿cómo hacer para recuperar niveles de testosterona de un hombre joven y saludable? Lo primero sería acudir a una clínica de medicina preventiva con médicos formados en optimización hormonal y así establecer un diagnóstico. No hace falta esperar a la tercera edad para revisar este déficit hormonal, varones de incluso 35 años pueden presentar ya niveles mejorables. La forma de realizar un reemplazo hormonal bioidéntico es variada, se ajusta a la historia clínica del paciente y a las preferencias de este.