Menú
Estos son los 5 hábitos comunes que aceleran el envejecimiento después de los 50
  1. Bienestar
Se puede revertir

Estos son los 5 hábitos comunes que aceleran el envejecimiento después de los 50

Aunque la genética es un factor importante, el estilo de vida también se convierte en un elemento clave

Foto: Estos son los 5 hábitos comunes que aceleran el envejecimiento después de los 50. (Fuente: iStock)
Estos son los 5 hábitos comunes que aceleran el envejecimiento después de los 50. (Fuente: iStock)

Llegar a la vejez con un buen estado de salud es el propósito de la mayoría. Y es que todos queremos vivir los últimos años de vida alejados de enfermedades. Aunque la genética es un factor importante, el estilo de vida también se convierte en un elemento clave para no acelerar el envejecimiento.

A partir de los 50 se comienza a notar de forma más acusada el paso del tiempo, aunque es una edad en la que podemos hacer cambios significativos para nuestra salud que nos ayudarán a estar más sanos. Los estudios señalan que entre los 45 y 50 años los hombres empiezan a perder gradualmente masa muscular “a un ritmo de aproximadamente un 12-15% por década hasta la octava década”.

Foto: David Sinclair. (Harvard Medical School)

La sarcopenia, el nombre que recibe este proceso, es uno de los efectos del envejecimiento. Este problema aumenta el riesgo de caídas y fracturas. Por eso, para que este proceso no se acelere es importante hacer ejercicio de fuerza con regularidad. Los expertos recomiendan incluir ejercicios para fortalecer la musculatura. La actividad física proporciona múltiples beneficios al cuerpo, el corazón y la mente. Principalmente, contribuye a la prevención y gestión de enfermedades no transmisibles, como las enfermedades cardiovasculares, el cáncer y la diabetes, como señala la Organización Mundial de la Salud.

Los 5 hábitos que debes eliminar

Cuando se llega a los 50 se producen varios cambios en la alimentación que afecta a nuestro peso y estado físico. Cuando se van cumpliendo años se abandona la dieta saludable. Un hábito que se nota pronto en nuestro cuerpo. También hay otros factores que provocan ese descontrol en la comida. Se tarda más en quemar calorías, ya que el metabolismo se ralentiza y si no se hacen cambios se ganará peso.

Aunque también puede ocurrir lo contrario. Un estudio explica que durante el envejecimiento se presenta una desaceleración natural del metabolismo y se produce una serie de cambios en la regulación de la energía, lo que contribuye a la pérdida de peso y grasa. La alteración en el sabor y aroma inciden en la digestión y las secreciones salivares, estomacales, pancreáticas e intestinales.

Foto: (iStock)

Dos hábitos no saludables que influyen en el envejecimiento son fumar y beber. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el tabaco es la primera causa evitable de enfermedad, invalidez y muerte prematura en el mundo. La bronquitis crónica, el cáncer de pulmón, la hipertensión, una úlcera gastrointestinal o los accidentes cerebrovasculares están relacionados con fumar. El consumo de tabaco acelera el envejecimiento. Sanidad señala que fumar produce sequedad cutánea y acelera la aparición de arrugas en la cara de forma prematura.

En cuanto al alcohol, perjudica el desarrollo cerebral y puede ocasionar problemas de memoria y de aprendizaje provocados por el etanol que contienen las bebidas alcohólicas. Y en un estudio se comprobó que nos envejece. Los investigadores midieron el estado de metilación del ADN de jóvenes de 15 y 20 años que sirve para conocer la edad biológica (puede ser diferente a la cronológica real). Observaron que el consumo de alcohol producía un envejecimiento acelerado en tejidos como el hepático o el sistema inmune.

El estrés puede derivar en muchos problemas de salud, como presión arterial alta, enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares, obesidad y diabetes

El estrés es un problema que afecta a millones de personas y generalmente no se le da la importancia que merece. Ese estado de preocupación se puede volver crónico si no se trabaja. El estrés no controlado puede derivar en muchos problemas de salud, como presión arterial alta, enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares, obesidad y diabetes, según apunta Mayo Clinic.

La soledad y el aislamiento social pone en riesgo la salud física y mental. Para el bienestar es necesario tener una vida social activa y rodearse de personas que nos hagan sentirnos queridos. La ausencia de interacciones están asociados a enfermedades cardiovasculares, obesidad, presión arterial alta, depresión, demencia, o el Alzheimer.

Llegar a la vejez con un buen estado de salud es el propósito de la mayoría. Y es que todos queremos vivir los últimos años de vida alejados de enfermedades. Aunque la genética es un factor importante, el estilo de vida también se convierte en un elemento clave para no acelerar el envejecimiento.

Salud
El redactor recomienda