¿Puede la aspirina ayudar a prevenir la recurrencia de un cáncer de mama? Responde la ciencia
Una nueva investigación ha evaluado si la aspirina a 300 mg mejora la supervivencia libre de enfermedad invasiva entre las supervivientes de cáncer de mama no metastásico
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Múltiples estudios observacionales han apuntado a una disminución del riesgo de muerte entre las supervivientes de cáncer de mama usuarias habituales de aspirina. Aún más convincentes fueron los datos de ensayos aleatorizados de aspirina para enfermedades cardiovasculares. En un análisis conjunto de 5 grandes ensayos aleatorizados de aspirina para prevenir la enfermedad vascular con datos sobre los resultados del cáncer, los participantes asignados al azar a la aspirina tenían un riesgo reducido de cáncer con metástasis a distancia, principalmente debido a un riesgo reducido de adenocarcinoma metastásico.
Además, las pacientes con adenocarcinoma que no presentaban metástasis en el momento del diagnóstico inicial y que siguieron recibiendo aspirina hasta el momento del diagnóstico o después de éste tuvieron un riesgo reducido de metástasis, en particular una posible reducción de la mortalidad por cáncer de mama. No solo eso, sino que el seguimiento a largo plazo del Women's Health Study, un ensayo aleatorizado de aspirina a 100 mg en días alternos para la prevención de enfermedades crónicas, también reveló una disminución del riesgo de adenocarcinoma metastásico.
La aspirina puede afectar al crecimiento tumoral en función de sus efectos antiagregantes plaquetarios y antiinflamatorios. Las plaquetas pueden contribuir a las metástasis de múltiples maneras: promoviendo la angiogénesis tumoral, induciendo la liberación de factores de crecimiento y citocinas y protegiendo a las células tumorales de la eliminación de las células inmunitarias. La inflamación también induce la liberación de citocinas y factores de crecimiento que pueden promover el crecimiento tumoral y la desregulación inmunitaria. También se ha demostrado que la aspirina inhibe las vías de la PI3Kinasa, la proteína cinasa B y la diana de la rapamicina en mamíferos, todas ellas vías clave para el crecimiento tumoral. Las terapias dirigidas a estas vías están aprobadas por la Food and Drug Administration para el cáncer de mama y otros tipos de cáncer.
En conjunto, las pruebas obtenidas en estudios epidemiológicos y de laboratorio, así como en ensayos aleatorizados, sugirieron firmemente el papel de la aspirina en la mejora de los resultados del cáncer de mama, lo que condujo al estudio A011502, que, hasta donde sabemos, es el primer ensayo aleatorizado controlado con placebo sobre la aspirina que informa de resultados entre supervivientes de cáncer de mama.
Nuevas evidencias sobre la recaída
Pero, a pesar de que los estudios observacionales de supervivientes de cáncer de mama y los ensayos prospectivos de aspirina para enfermedades cardiovasculares sugieren una mejor supervivencia del cáncer de mama entre las usuarias de aspirina, faltan estudios prospectivos de aspirina para prevenir la recurrencia del cáncer de mama. Teniendo en cuenta esta falta de información en la vuelta del tumor, un equipo de científicos se ha lanzado a investigar para determinar si la aspirina disminuye el riesgo de eventos de cáncer invasivo entre las supervivientes de cáncer de mama. Y sus hallazgos se han publicado este miércoles en la revista científica JAMA.
La principal conclusión de los autores es que: "Entre los participantes con cáncer de mama no metastásico de alto riesgo, la terapia diaria con aspirina no mejoró el riesgo de recurrencia del cáncer de mama ni la supervivencia en el seguimiento temprano. A pesar de su promesa y amplia disponibilidad, la aspirina no debe recomendarse como tratamiento adyuvante para el cáncer de mama".
"La terapia diaria con aspirina no mejoró el riesgo de recurrencia del cáncer de mama ni la supervivencia en el seguimiento temprano"
Para llegar a este dato, los científicos asignaron al azar a un total de 3.020 participantes cuando el comité de seguimiento de datos y seguridad recomendó suspender el estudio en el primer análisis intermedio porque el índice de riesgo había cruzado el límite de inutilidad preespecificado. Tras una mediana de seguimiento de 33,8 meses, se observaron 253 eventos de supervivencia libre de enfermedad invasiva (141 en el grupo de aspirina y 112 en el grupo de placebo), lo que arroja un índice de riesgo de 1,27.
Todas las supervivencias libres de enfermedad invasiva, incluida la muerte, la progresión invasiva (tanto a distancia como locorregional) y los nuevos eventos primarios, fueron numéricamente mayores en el grupo de aspirina, aunque las diferencias no fueron estadísticamente significativas. No hubo diferencias en la supervivencia general. Las tasas de eventos adversos de grados 3 y 4 fueron similares en ambos grupos.
Múltiples estudios observacionales han apuntado a una disminución del riesgo de muerte entre las supervivientes de cáncer de mama usuarias habituales de aspirina. Aún más convincentes fueron los datos de ensayos aleatorizados de aspirina para enfermedades cardiovasculares. En un análisis conjunto de 5 grandes ensayos aleatorizados de aspirina para prevenir la enfermedad vascular con datos sobre los resultados del cáncer, los participantes asignados al azar a la aspirina tenían un riesgo reducido de cáncer con metástasis a distancia, principalmente debido a un riesgo reducido de adenocarcinoma metastásico.