Ni correr ni hacer pilates: los mejores ejercicios para evitar las piernas cansadas en verano

Con la llegada del verano, muchas personas experimentan la molesta sensación de piernas cansadas. Este problema es más común de lo que parece y puede empeorar con el calor. Afortunadamente, existen ejercicios específicos que pueden ayudar a aliviar estos síntomas sin necesidad de recurrir al running o al pilates.

Las piernas cansadas suelen estar relacionadas con una insuficiencia venosa crónica, una condición donde las venas no funcionan adecuadamente y la sangre no fluye correctamente de regreso al corazón. Esto puede provocar hinchazón, dolor y la aparición de varices. La buena noticia es que ciertos ejercicios pueden mejorar la circulación y fortalecer las paredes de las venas.

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Para ello, la farmacéutica, divulgadora científica y docente Marián García, más conocida como Boticaria García y colaboradora de espacios como Zapeando, Espejo Público, Y ahora Sonsoles, La Sexta Noche u Órbita Laika, ha revelado en el blog de su página web las pautas que una mujer con piernas cansadas debe seguir para que no tenga un impacto directo en la calidad de vida.

Sufro de piernas cansadas: ¿Qué ejercicios puedo hacer?

Entre las actividades más recomendadas se encuentra el caminar, especialmente si se hace de manera regular. Caminar activa los músculos de las piernas, lo que ayuda a bombear la sangre hacia arriba. Subir escaleras es otro ejercicio sencillo y efectivo que también fortalece los músculos y mejora la circulación.

La natación es una excelente opción para aquellos que buscan un ejercicio refrescante y eficaz. Al nadar, el cuerpo está en posición horizontal, lo que facilita el retorno venoso y reduce la presión sobre las piernas. Además, el agua fría ayuda a disminuir la inflamación y proporciona un alivio inmediato.

Realizar movimientos específicos también puede ser muy beneficioso. Ejercicios como caminar de puntillas, hacer giros con los tobillos y flexiones suaves pueden ayudar a mantener las venas activas y prevenir la acumulación de sangre en las piernas. Además, estos movimientos son fáciles de incorporar en la rutina diaria y pueden hacerse en cualquier lugar.

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Es importante no olvidar la importancia de mantenerse hidratado, darse duchas cortas de agua fría y evitar el sedentarismo. Estar sentado o de pie durante largos periodos sin moverse puede empeorar los síntomas. Levantarse y moverse regularmente, aunque sea solo unos minutos, puede marcar una gran diferencia.

Además de los ejercicios, algunos hábitos pueden contribuir a mejorar la situación. Usar medias de compresión, evitar la ropa ajustada, llevar tacones y mantener un peso saludable son medidas complementarias que pueden aliviar las piernas cansadas. Estos cambios en el estilo de vida no solo benefician la salud venosa, sino que también mejoran el bienestar general.

Hacer diferentes tipos de ejercicio y llevar una alimentación rica en flavonoides reduce la sensación de piernas cansadas

Para aquellos que buscan un enfoque natural, incorporar alimentos ricos en flavonoides como los frutos rojos, o nutrientes como el magnesio y la vitamina E, puede fortalecer las venas y mejorar la circulación. Estos pequeños cambios pueden contribuir significativamente a reducir la sensación de pesadez y mejorar la salud de las piernas. Mantenerse activo y cuidar los hábitos diarios son claves para disfrutar de unas piernas ligeras y sin molestias durante la época estival.