Esta especia ya se usaba en el medievo y es ideal para el dolor de rodilla: proporciona colágeno de forma natural y querrás incluirla en todas tus comidas

• Las hierbas y especias que son capaces de reducir la inflamación
• ¿Qué pasa si tomo colágeno todos los días? Esta es la respuesta de la ciencia

El dolor de las articulaciones es común en las personas de edad avanzada y es uno de los síntomas de la artrosis. Esta enfermedad provoca dolor mecánico y rigidez al moverse. Se presenta sobre todo en las rodillas, caderas, muñecas o columna vertebral. La principal causa es el envejecimiento. Con la edad se produce menos colágeno que se encarga de conectar tejidos como la piel, los músculos y los huesos.

El colágeno es la proteína más abundante en el cuerpo humano. Aunque se relacione principalmente con una piel más joven, es esencial para la estructura general de nuestro cuerpo, afectando nuestra calidad de vida. Se encuentra en las articulaciones, dientes, córneas y vasos sanguíneos, influenciando así nuestra movilidad.

Un ingrediente muy usado en España

La alimentación puede favorecer a su producción, como el orégano. Esta es una de las especias más usadas en la cocina española. Pero en el medievo destacaba por sus beneficios para la salud. La hierba no solo añade sabor a tus comidas, sino que también proporciona colágeno de forma natural, lo que la convierte en un aliado perfecto para mantener tus articulaciones en buen estado.

La ciencia destaca sobre todo su capacidad antioxidante, gracias a los compuestos presentes en las especies del género Origanum, según un estudio. Los antioxidantes son esenciales porque protegen las células del daño oxidativo, lo que previene enfermedades crónicas como el cáncer, enfermedades cardiovasculares y diabetes. Además, estos antioxidantes estimulan la producción de colágeno, una proteína vital para la salud de las articulaciones y otros tejidos del cuerpo.

Entre las principales propiedades del orégano destacan sus beneficios antiinflamatorios, antioxidantes y diuréticos

Sus propiedades antiinflamatorias quedaron demostradas en un estudio elaborado por un equipo de investigación, compuesto por científicos de la Universidad de Bonn y del Instituto Federal Suizo de Tecnología de Zúrich (ETH). Sus autores comprobaron su efecto en ratones. Se les administró un compuesto activo del orégano llamado beta-cariofilina y la inflamación disminuyó en más del 70% de los casos. Este compuesto también mostró potencial para combatir la arteriosclerosis y la osteoporosis.

Otra investigación de la Universidad de Illinois en Chicago resaltó que tanto el aceite de orégano como su aceite esencial tienen propiedades antiinflamatorias significativas. Además, otro estudio realizado en ratas mostró que la aplicación tópica de extracto de orégano redujo notablemente la inflamación causada por Propionibacterium acnes, una bacteria que provoca inflamación de la piel y acné. Además, el carvacrol, el principal antioxidante del orégano, ha demostrado reducir la inflamación y los niveles de colesterol en sangre en ratones alimentados con una dieta alta en grasas, según un trabajo publicado en International Journal of Molecular Sciences.

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Entre las principales propiedades del orégano destacan sus beneficios antiinflamatorios, antioxidantes y diuréticos. Además, ayuda a eliminar la salmonela y a aliviar problemas respiratorios como la tos. Un estudio conjunto entre la Universidad Autónoma de Querétaro y la University of Illinois ha revelado que el orégano tiene una fuerte actividad antimicrobiana, siendo eficaz contra bacterias como la Salmonela y Escherichia coli, responsables de enfermedades gastrointestinales. También resulta beneficioso para la salud digestiva gracias a su poder antimicrobiano y el sistema inmunológico.