Ni manzanilla ni té matcha: esta es la infusión que regula los niveles de azúcar en sangre

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Una de las dolencias más aparatosas que se puede padecer en cuestiones de salud es la resistencia a la insulina. Este es un problema que puede derivar en cuadros más complejos como la diabetes tipo 2. No obstante, son muchos los consejos que los expertos difunden para intentar combatir esta característica, entre los que se encuentra el consumo de ciertos productos con componentes positivos para este tipo de casos.

Uno de los más destacados es el té verde. Numerosos estudios han demostrado que, entre varios de sus efectos, puede poseer notables beneficios en las personas que posean esta condición. En su composición se encuentra la Camellia Sinensis, una planta que aporta fuertes mejoras en factores como el metabolismo de la glucosa y la disminución del estrés oxidativo.

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Además, las últimas investigaciones prueban que este tipo de té es capaz de disminuir la cantidad de azúcar en sangre en ayunas, lo cual es una forma muy precisa de medir la resistencia a la insulina. La clave está en la presencia en sus ingredientes de antioxidantes y antiinflamatorios, entre los que se encuentra el polifenol y el galato de epigalocatequina. En relación a sus efectos, destaca una menor inflamación y un mejor proceso de aceptación de la insulina a nivel corporal.

Combinaciones y alternativas

El té verde posee muchas más virtudes para la salud de las que pueda parecer en un primer momento. Una de ellas son los beneficios que ofrece al microbioma intestinal, lo que es otro factor que favorece a la resistencia contra la insulina. Y es que hay que poner especial atención a su elaboración. Por ejemplo, para que el té no disponga de cierto amargor en su sabor, es vital que la temperatura del agua no supere ni se quede por debajo de entre los 75 y los 85 grados.

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Por otro lado, esta infusión puede ser combinada con otros productos que enriquezcan su consumo. Algunos ingredientes que se le pueden añadir son los cítricos, la menta o el jengibre. Además de ser buena para la salud, nos permitirá experimentar con el sabor, elaborando las combinaciones más sabrosas para el usuario que las ingiera.

Una alternativa al té verde en cuestiones de la prevención de la resistencia a la insulina es el té de canela. Su riqueza en polifenoles y antioxidantes lo hace una opción muy atractiva para esta clase de casos. Su composición permite una mayor sensibilidad a la insulina, provocando que las células empleen la glucosa con mayor eficiencia.