Adiós al dolor de espalda: redúcelo con estos sencillos ejercicios

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Uno de los problemas de salud físicos más comunes entre la población en los últimos años son los dolores de espalda. Y es que son muchos los usuarios que acuden a fisioterapeutas y demás expertos con el objetivo de tratar estas dolencias. De hecho, los últimos datos ofrecidos por la Organización Mundial de la Salud revelan que más de 600 millones de personas en el mundo padecen algún tipo de dolor en la espalda.

No obstante, existen diferentes ejercicios para mitigar este tipo de lesiones que son recomendables para incluir en nuestra rutina deportiva habitual. Esto se incrementa si padecemos algún tipo de problema de ciática o dolores lumbares, los cuales suelen aparecer a causa del envejecimiento. Por lo que fortalecer la espalda a edades tempranas puede suponer un gran alivio físico en el futuro.

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Uno de los más frecuentes y recomendables son el ejercicio en el que debemos recostarnos boca arriba y llevar las rodillas hasta el pecho de manera suave. Mantendremos esa postura durante un par de segundos para después soltar las piernas. Con varias repeticiones de este estilo y durante 20 segundos cada una, conseguiremos cierto alivio en la espalda en los próximos días.

Mitigar el dolor de espalda con ejercicios

Otro ejercicio igual de recomendable para mitigar el dolor de espalda será muy sencillo de practicar. Tan solo habrá que tumbarse y, con los pies en el suelo, flexionar las rodillas y moverlas de un lado a otro lentamente. Con ello rotaremos también la parte lumbar de la columna, lo que aliviará los dolores originados en esa zona. Con realizar diez repeticiones en tres ocasiones diarias será más que suficiente.

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Como alternativa a estos, nos tumbaremos boca abajo y estiraremos suavemente la parte baja de la espalda, de modo que nuestro torso y cabeza queden orientados hacia delante, como si nos fuésemos a levantar. Repetir dicho movimiento diez veces en tres series nos otorgará cierta mejoría si lo practicamos de manera regular. De todas formas, si este ejercicio nos parece demasiado intenso, podemos apoyarnos sobre nuestros antebrazos o reducir el grado de estiramiento.

Por último volveremos a disponernos boca arriba y colocaremos un pie detrás de la rodilla. Es entonces cuando tiraremos de manera suave de esa rodilla hacia el lado opuesto. Efectuaremos estos estiramientos durante 20 segundos. Si nos resulta incómodo o complicado, podremos apoyar la rodilla superior en el suelo. Con cinco repeticiones al día en cada pierna durante tres secuencias será notablemente efectivo.