Doctor Pellicer: “En los próximos años actuaremos sobre ovarios ‘envejecidos’ sin recurrir a donación de óvulos”
La medicina reproductiva ha sido uno de los campos más innovadores de los últimos 40 años. Hablamos con Antonio Pellicer, presidente del Consejo de Administración de IVI RMA Global y fundador de IVI, para conocer la situación actual
Según la Sociedad Española de Fertilidad, una de cada seis parejas en edad reproductiva tiene problemas para tener hijos, lo que supone entre un 15 y 20% de las parejas españolas. El principal factor es el retraso de la edad a la que se decide tener hijos, pero también puede haber otros condicionantes que se están estudiando, como los factores ambientales, enfermedades como el síndrome de ovario poliquístico o la endometriosis, y mutaciones genéticas, todos ellos objeto de estudio e investigación. Afortunadamente, en las últimas décadas la medicina reproductiva ha avanzado mucho y ha podido dar solución a algunos de estos problemas que enfrentan hombres y mujeres en su camino hacia la maternidad y paternidad. Sin embargo, aún quedan desafíos por delante.
El profesor Antonio Pellicer, referente en fertilidad y en reproducción asistida con una carrera de más de tres décadas, comparte su visión sobre el futuro en técnicas de fertilidad y las últimas investigaciones para revertir el efecto de la edad sobre la calidad de los óvulos.
PREGUNTA. ¿Cuáles son los últimos logros y desafíos de la medicina reproductiva?
RESPUESTA. Cuando comencé a trabajar, la probabilidad de que un embrión creado in vitro implantase en el útero materno era del 6% (año 1985). Hoy es mayor del 65%, es decir, hemos multiplicado por diez la eficacia y el reto es llegar lo más pronto posible a una tasa de éxito del 100% para disminuir, entre otras cosas, el estrés que los pacientes de infertilidad sufren cuando necesitan ser sometidos a los procedimientos de reproducción asistida. Otro campo derivado de la medicina reproductiva tremendamente novedoso y socialmente útil es poder diagnosticar las enfermedades en etapas preconcepcionales, con lo cual se eliminan. Los avances más recientes apuntan a que quizás incluso la enfermedad pueda ser tratada en el propio embrión.
"Encontrar ovocitos de escasa calidad (sobre todo por efecto de la edad) es lo más frecuente"
P. ¿Cuál es la técnica de reproducción asistida con mayor tasa de éxito?
R. Esa pregunta tiene muchos enfoques. La técnica más exitosa es la que utiliza ovocitos de calidad, semen de calidad, en una mujer que tenga un útero normal, no sea obesa ni tenga ninguna enfermedad que afecte a su estado general; y que sea menor de 46-47 años. A partir de ahí, las combinaciones son múltiples, pero siempre usando la fecundación in vitro y con una calidad de los elementos implicados lo mejor posible. Por eso tantas veces se recurre a la donación de ovocitos, que al final es la más exitosa en términos prácticos, ya que encontrar ovocitos de escasa calidad (sobre todo por efecto de la edad) es lo más frecuente.
P. ¿Cómo define la innovación en el contexto de la medicina reproductiva?
R. Ha sido, junto a la imagen, la revolución de los últimos 40 años. La innovación en medicina reproductiva se ha centrado en mejorar la calidad embrionaria para aumentar el éxito. Disminuir el tiempo entre el inicio del tratamiento y el embarazo, con lo que se elimina al máximo el estrés de las pacientes y se evitan complicaciones, como, por ejemplo, las derivadas de los embarazos múltiples.
P. ¿Qué innovaciones recientes en reproducción asistida le parecen más prometedoras?
R. La investigación en cómo revertir el efecto de la edad sobre la calidad de los óvulos (mal llamado rejuvenecimiento ovárico). Estas investigaciones son necesarias y muy prometedoras, dado que el modelo social está cambiando y se decide tener hijos más tarde. Así, las pacientes tropiezan, sin saberlo en muchas ocasiones, con una calidad de óvulos peor. Creo que en los próximos años podremos actuar sobre ovarios “envejecidos” sin recurrir necesariamente a la donación de óvulos que, es una técnica válida y exitosa, pero difícilmente aceptable por muchas parejas.
P. ¿Qué innovaciones se están llevando a cabo en preservación de la fertilidad?
R. La preservación de la fertilidad no debe ser vista sólo como congelar ovocitos a una edad inferior a los 35 años. Preservar la fertilidad es también preocuparse de la salud del individuo. Cuando atendemos a la salud reproductiva, hay que insistir en la mujer joven, casi adolescente, y controlar algunas patologías que posteriormente podrían afectar a su fertilidad, como por ejemplo los ovarios poliquísticos o la endometriosis. Y ser conscientes de que, tanto para hombres como mujeres, el tabaco es un tóxico importante.
"Los informes sobre un descenso de la calidad del semen son muy inconsistentes"
P. Además del retraso de la edad para ser padres, ¿qué otros factores pueden estar afectando negativamente a la fertilidad?
R. En realidad, no hay nada destacable. Los informes sobre un descenso de la calidad del semen son muy inconsistentes. Desde el ámbito científico cada vez se da más peso al exposoma, exposiciones ambientales a las que el ser humano está sometido desde su nacimiento. Por ejemplo, es cierto que hay algunos disruptores endocrinos, como los componentes del plástico o el tabaco, que pueden tener su influencia en la fertilidad. El efecto de todas estas sustancias es un ámbito relativamente reciente científicamente hablando y en la actualidad solo conocemos la punta del iceberg de su impacto sobre la salud en general y la reproductiva en particular, por lo que su objetivación y cuantificación aún es muy compleja y es necesario seguir investigando en esta línea.
P. ¿Qué papel juegan los médicos en impulsar y adoptar esas tecnologías e innovaciones?
R. El médico, en general, adapta todos los avances cuando hay evidencia médica. Los médicos de esta especialidad están entrenados para buscar esa evidencia, para hacer investigación clínica y encontrar respuestas a muchas dudas que aún tiene la medicina, para ofrecer los tratamientos más novedosos y la mejor tecnología.
P. Algunas parejas para las que supone un problema ético la reproducción asistida optan por la naprotecnología, ¿cuál es su opinión sobre este método?
R. Eso es dejar a la naturaleza que actúe. Como el problema fundamental es la edad a la que acuden a nosotros, dejar a la naturaleza hacer su trabajo en una pareja en la que la mujer tiene 40 años, por ejemplo, es perder el poco tiempo que nos queda y del que tenemos que aprovechar, casi exagerando, cada mes que pasa.
"Sabremos orientar los casos todavía mejor con el análisis de los datos, mediante la IA"
P. ¿Cómo cree que la innovación transformará la práctica de la medicina reproductiva en los próximos 10 años?
R. Mejoraremos todavía más los resultados, haremos las técnicas más ‘patient’s friendly’ disminuyendo estrés en muchos procesos, como pincharse la medicación. Sabremos orientar los casos todavía mejor con el análisis de los datos, mediante la inteligencia artificial y, en definitiva, conseguiremos del modo más rápido y eficaz llegar cuanto antes a nuestro objetivo, que es traer bebés sanos al mundo.
Según la Sociedad Española de Fertilidad, una de cada seis parejas en edad reproductiva tiene problemas para tener hijos, lo que supone entre un 15 y 20% de las parejas españolas. El principal factor es el retraso de la edad a la que se decide tener hijos, pero también puede haber otros condicionantes que se están estudiando, como los factores ambientales, enfermedades como el síndrome de ovario poliquístico o la endometriosis, y mutaciones genéticas, todos ellos objeto de estudio e investigación. Afortunadamente, en las últimas décadas la medicina reproductiva ha avanzado mucho y ha podido dar solución a algunos de estos problemas que enfrentan hombres y mujeres en su camino hacia la maternidad y paternidad. Sin embargo, aún quedan desafíos por delante.