Si tres ministros distintos han aumentado las plazas de médicos en las aulas, ¿por qué seguirán faltando en las consultas?
García ha anunciado que las facultades tendrán 1.500 nuevos egresados, la misma iniciativa de Miñones y Darias. El objetivo es paliar la falta de médicos, pero los expertos no creen que sea una buena medida (ni a presente, ni a futuro)
Este verano ha puesto más de manifiesto que nunca una problemática de la que se lleva avisando años, la falta de médicos en la sanidad española. Para paliar esta agujero de personal, al menos tres ministros de Sanidad distintos —en tres años consecutivos— han plantado la misma medida: ampliar las plazas en las facultades de Medicina.
Recientemente, la actual titular del Ministerio, Mónica García, anunciaba la aprobación presupuestaria de 23 millones de euros para financiar más de 1.500 nuevas plazas en las universidades. Hace un año, el por entonces ministro de Sanidad, José Miñones, explicaba que se iban a destinar casi 50 millones de euros a la creación de 677 nuevas plazas. Y en 2022, Carolina Darias daba la misma cantidad de dinero para aumentar un 15% los egresados, calculando que eso supondría en torno a 1.000 nuevos estudiantes en el primer curso de la carrera.
Pero, ¿realmente esta medida va a servir para solucionar un problema estructural tan grave como el que enfrentamos? Expertos en la materia creen que no y, en cualquier caso, no con la premura que necesitamos. El decano de la facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), Javier Arias Díaz, considera que "las soluciones 'fáciles', como aumentar el número de alumnos de Medicina, no son adecuadas".
En la misma línea se muestran desde el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM), que califican el aumento de plazas de "una medida más" y señalan que lo que realmente hace falta es generar suficientes plazas de formación especializada, orientar a los estudiantes de medicina hacia la atención primaria y mejorar las condiciones de los especialistas.
Problemas solo en determinadas especialidades
El decano de la universidad presencial más grande de España destaca a este periódico que "hay déficit de médicos en determinadas especialidades, no en otras, y que, en cualquier caso, un aumento de facultades o de plazas de ingreso en Medicina no solucionarían a corto plazo dicho déficit porque la formación de cualquier especialista tarda como mínimo 11 años".
El punto de vista de Arias coincide con el de la Conferencia Nacional de Decanos de Medicina, que hizo un detallado informe al respecto, y con los documentos que ha ido elaborando Vicente Matas, del Sindicato Médico Andaluz.
Una opinión similar mostraba hace un año —cuando Miñones anunciaba las casi 700 nuevas plazas— Tomás Cobo, presidente del CGCOM, y con el nuevo anuncio de García sigue pensando "totalmente" igual. Cobo señala a El Confidencial que ahora mismo en España no faltan médicos en general, pero sí en determinadas especialidades.
De este modo, el presidente de los médicos cree que para aliviar la crecida de vacantes en los centros sanitarios, más allá de sumar graduados, una de las claves es aumentar las plazas MIR de las especialidades donde hay déficit, ya que en la actualidad "faltan unidades docentes con una formación médica especializada". Asimismo, apunta a que "tiene que existir un orden en el que se forme a los médicos en el grado, pero que luego puedan tener la oportunidad de tener formación médica especializada, porque si no, no van a poder trabajar en ese sistema público".
Riesgos: peor formación, superávit de médicos y malas homologaciones
El decano de la UCM apunta a un hándicap formativo con este aumento progresivo de las plazas en las facultades: "La masificación en las facultades suele repercutir negativamente en la calidad de la formación, por limitaciones inherentes a la capacidad de laboratorios e instalaciones y disponibilidad de suficiente profesorado cualificado, pero, particularmente, por el déficit relativo de acceso a prácticas clínicas, pues el número de camas y centros de salud se queda corto y es algo que la Conferencia de Decanos ha puesto de manifiesto que ya se está sufriendo en prácticamente todas las comunidades autónomas".
La misma preocupación muestran desde el Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM), que apuntan a que "el incremento de plazas supone un aumento de estudiantes por aula, conllevando un deterioro en la calidad de enseñanza".
Asimismo, el decano de Medicina alerta de que esta progresión podría saturar de profesionales el mercado en un futuro: "Los estudios demográficos sobre futuros jubilados y egresados médicos, realizados por el mencionado sindicato, indican que en 10 años habrá un notable superávit de médicos".
Por otro lado, alza la voz sobre las homologaciones de títulos extranjeros que se están haciendo en los últimos años para paliar la falta de médicos en los centros. Para Arias, con las homologaciones exprés, "se corre el riesgo de reconocer titulaciones que podrían haber sido sometidas a evaluaciones y controles de calidad menos rigurosos que los deseables, ya que fueron realizados en base a los estándares existentes en sus países de origen".
"No deberíamos permitir una bajada de los estándares de calidad de la atención médica en España", concluye a este respecto.
Atención primaria, la más necesitada
En concreto, el mayor déficit de especialistas está en atención primaria, como muestra el Informe de la oferta y necesidad de especialistas médicos 2021- 2035 del Ministerio de Sanidad. Precisamente aquí es donde se debería prestar atención si queremos que los centros de salud tengan profesionales. Pero uno de los grandes problemas al respecto, es que los recién graduados huyen de las especialidades vinculadas a los ambulatorios, como muestran año tras año las plazas vacantes del MIR, este 2024 dejó 246 plazas de médico de familia desiertas.
Entre los motivos de que los profesionales no quieran la atención primaria, Cobo apunta a la formación universitaria: "Durante la carrera de Medicina, a los estudiantes se les orienta exclusivamente hacia la atención hospitalaria y no hacia la atención primaria". Por ello, considera que se debería enfocar "a los médicos también hacia la atención primaria, que es una especialidad tan bonita como cualquier otra hospitalaria. Pero claro, si te forman hacia determinado terreno, pues sencillamente vas a ese terreno y el otro queda abandonado, en muchas ocasiones porque no lo conoces".
Y, ante todo, no debemos olvidar que la condiciones laborales son clave para la elección de una especialidad. Por lo que el presidente de los médicos cree que se deben buscar atractivos para que elijan la especialidad.
Este verano ha puesto más de manifiesto que nunca una problemática de la que se lleva avisando años, la falta de médicos en la sanidad española. Para paliar esta agujero de personal, al menos tres ministros de Sanidad distintos —en tres años consecutivos— han plantado la misma medida: ampliar las plazas en las facultades de Medicina.
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