Si te despiertas con la voz afónica, este es el motivo y así puedes remediarlo

Es muy habitual que cuando nos levantamos por la mañana, tras una noche de sueño, notemos cierta carraspera. Como si no nos saliera la voz. A veces, incluso, puede dar la sensación de que tenemos algo, un cuerpo extraño, en la garganta. Y a veces puede resultar incómodo, pero no preocupante.

Juan Carlos Casado, presidente de la comisión de Laringología, Voz, Foniatría y Deglución de la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC), lo describe como “sensación como de tener una corbata y de disfonía y cambio en la voz”.

Lo cierto es que generalmente no se debe a una situación grave, sino que está causado porque “durante la noche, como no hablamos, las cuerdas vocales están paralizadas, normalmente en posición de abducción abiertas y se acumula mucosidad entre ellas por la respiración”.

Y añade el doctor Casado: “Por eso, cuando nos despertamos y empezamos a hablar, cuesta arrancar. Digamos que hay que calentar las cuerdas vocales y en ese calentamiento puede aparecer una pequeña disfonía, que se llama disfonía matutina, sin importancia”.

Mucosidad entre las cuerdas vocales

Según el experto, esta disfonía matutina no tiene por qué tener una causa concreta más allá de esa deshidratación o enfriamiento de las cuerdas vocales: “No es necesario que haya ninguna patología de base. Puede darse en pacientes que tienen alguna infección o alergia”.

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De hecho, según Casado es especialmente prevalente “en personas con reflujo o fumadores, porque acumulan mayor cantidad de mucosidad entre las cuerdas vocales”. Y deja claro que “normalmente son síntomas de algo banal, que no tiene mayor importancia”.

Aunque también advierte de que en algunos casos puede haber una patología de base en esa cuerda vocal “como puede ser un pólipo, un nódulo o incluso algo más grave como un carcinoma in situ, un cáncer de la cuerda vocal”.

Recurrir a la hidratación

A pesar de que generalmente, tal y como indica el especialista, no revista ninguna gravedad, a veces puede resultar incómodo, sobre todo si sucede con mucha frecuencia. En estos casos, Casado recomienda recurrir a la hidratación de las cuerdas vocales.

En concreto, el experto en Laringología, Voz, Foniatría y Deglución recomienda: “Si nos levantamos por la noche al baño o por cualquier otro motivo, es conveniente beber agua. Si estamos bien hidratados, la mucosidad entre las cuerdas vocales y la posibilidad de que aparezca esa disfonía será menor”.

Acudir al médico

Ante la posibilidad de que la disfonía esconda un problema de mayor gravedad, es importante saber cuándo hay que acudir al médico (el especialista que lo estudia es el otorrinolaringólogo) a consultar esa posibilidad que, aunque sea escasa, existe.

Es especialmente prevalente en personas con reflujo o fumadores, porque acumulan mayor cantidad de mucosidad entre las cuerdas vocales

“Hay que pensar en ir al médico cuando la disfonía persiste a lo largo del día. Si, pese a que hemos bebido agua, o hemos realizado esa pequeña tos para expulsar la mucosidad, persiste la disfonía. Y con más motivo, si el paciente es fumador”, concluye Juan Carlos Casado.