Un inmunólogo español explica cómo el estrés "afecta a nuestro sistema inmunológico de maneras muy diferentes"
José Gómez Rial, jefe del Servicio de Inmunología del Hospital Universitario de Santiago de Compostela, ha desgranado en su cuenta de X su fucionamiento
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fb7e%2F3d9%2F641%2Fb7e3d9641639bd327397c41bf11d5b62.jpg)
El estrés es una respuesta natural del cuerpo ante situaciones que percibe como amenazantes o desafiantes.
Aunque en pequeñas dosis puede ser beneficioso para mantenernos alertas y enfocados, el estrés crónico —o sostenido durante un periodo prolongado— tiene efectos negativos en la salud, especialmente en el sistema inmunológico.
Esta interacción entre el estrés y el sistema inmune tiene profundas implicaciones para la salud, ya que puede disminuir nuestra capacidad de defendernos contra infecciones, enfermedades crónicas y otros problemas de salud.
José Gómez Rial, jefe del Servicio de Inmunología del Hospital Universitario de Santiago de Compostela, ha desgranado en su cuenta de X que "el estrés afecta a nuestro sistema inmunológico de maneras muy diferentes, dependiendo de si es agudo o crónico".
🧵 1/8 El ESTRÉS afecta a nuestro sistema inmunológico de maneras muy diferentes dependiendo de si es agudo o crónico. Vamos a profundizar en los mecanismos de acción detrás de cada tipo. #Inmunología #SaludMental
— Jose Gomez Rial (@gomez_rial5) October 29, 2024
En primer lugar, ha señalado al estrés agudo: "Cuando enfrentamos un estrés temporal (un examen o una presentación), el cuerpo libera hormonas como la adrenalina y el cortisol en respuesta", esto eleva la circulación de células T y macrófagos, "mejorando la capacidad para responder rápidamente a patógenos". "Durante el estrés agudo, el cortisol actúa como un modulador. A bajas concentraciones, puede facilitar la movilización de células inmunitarias hacia el sitio de lesión o infección. Este proceso es esencial para la respuesta inmune inicial y la reparación del tejido", escribe en la red social antes conocida como Twitter.
En segundo lugar, ha apuntado al estrés crónico: "Si el estrés persiste, la situación cambia drásticamente. La exposición continua al cortisol conduce a una resistencia a los glucocorticoides, donde el cuerpo no responde adecuadamente a estas hormonas, resultando en una mayor inflamación y baja de la respuesta inmune". El inmunólogo gallego ha señalado que esta resistencia se traduce en una elevación de citoquinas pro-inflamatorias, que pueden contribuir a enfermedades autoinmunitarias y otras condiciones inflamatorias crónicas. "El sistema inmune se convierte en un esclavo de la inflamación, y reduce su capacidad para defenderse", añade.
Además, señala que "el estrés crónico altera la expresión genética en las células inmunitarias, aumentando los marcadores de inflamación y disminuyendo la actividad antiviral. Esto se asocia con un mayor riesgo de enfermedades y trastornos psicológicos, creando un ciclo vicioso".
El especialista resume: "El estrés agudo puede potenciar la respuesta inmune, mientras que el estrés crónico la compromete severamente. La gestión del estrés es clave para mantener nuestra salud inmunológica y mental".
Asimismo, concluye: "Cuida tu salud mental y practica técnicas de relajación. Esto no solo te ayudará a sentirte mejor, sino que también fortalecerá tu sistema inmunológico".
El estrés es una respuesta natural del cuerpo ante situaciones que percibe como amenazantes o desafiantes.