Un caldo de cultivo para enfermedades: agua estancada, saneamientos rotos y animales en descomposición

La DANA ha dejado un trágico balance de víctimas mortales y daños materiales en numerosas localidades. Días después se sigue tratando de localizar a las personas, mientras los ciudadanos tratan de limpiar todos los restos que ha ido arrastrando, pero más allá de los destrozos visibles, existen peligros invisibles que afectan a la salud de quienes intentan recuperar sus municipios y las personas que les ayudan a ello: las aguas estancadas, las fugas de aguas residuales y la descomposición de cadáveres animales. Todo ello representa un foco de infección y riesgo sanitario que puede agravar la situación en las próximas semanas.

Desde la Fundación iO, una organización científica dedicada al estudio y control de las enfermedades infecciosas en el mundo, alertan de que el contacto con aguas estancadas pueden ser el caldo de cultivo para diversas enfermedades. En concreto, mencionan a la leptospirosis, una patología bacteriana que se transmite principalmente a través del contacto con agua o suelo contaminado con orina de animales infectados, especialmente roedores. Las condiciones de inundación facilitan la diseminación de esta bacteria en el agua estancada.

Asimismo, señalan que tras las inundaciones en aguas estancadas es frecuente la proliferación de mosquitos, posibles vectores de algunas enfermedades. En la Comunidad Valenciana, la presencia del mosquito Aedes albopictus, también conocido como mosquito tigre, representa un riesgo adicional. Las condiciones húmedas y la abundancia de agua estancada tras las recientes inundaciones generan un entorno favorable para su reproducción y proliferación. El citado mosquito ha sido el responsable este verano de un brote de dengue en Cataluña.

No debemos olvidar que las lesiones provocadas por objetos oxidados o contaminados presentes en aguas de inundación. María del Mar Tomás, microbióloga del Hospital Universitario de A Coruña y portavoz de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC), señala que "las infecciones más frecuentes asociadas a la exposición a agua contaminada procedentes de inundaciones suelen ser infecciones de heridas que se han provocado durante la catástrofe, especialmente por bacilo negativo como acinetobacter baumannii, E. coli y otros patógenos procedentes de la Tierra", al mismo tiempo que hace referencias al tétanos y sarpullidos.

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Asimismo, la Dra. Tomás, hace referencia a este periódico a las enfermedades gastrointestinales que se pueden dar por la exposición a aguas contaminadas y la falta de condiciones higiénicas adecuadas, lo que aumenta el riesgo de infecciones gastrointestinales como Salmonella, E. coli, y Shigella, que derivan en diarrea, vómitos y dolor abdominal.

En este sentido, Daniel López Acuña, que fue director de Acción Sanitaria en Situaciones de Crisis de la OMS, señala a El Confidencial que "toda inundación, todo desborde de ríos, de sistemas de desagüe o de alcantarillado, puede generar una contaminación de aguas negras a aguas para uso humano. Esto es lo que hay que cuidar mucho después de fenómenos como esta DANA".

"Podemos tener contaminación cruzada de tuberías de aguas negras a conductos con agua para el consumo humano. Por ello, el monitoreo microbiológico de la calidad del agua es extremadamente importante y es algo que tendrán que hacer las autoridades sanitarias y ambientales de la Comunidad Valenciana, con gran celo y con gran dedicación", añade

Eso sí, en cualquier caso, Acuña descarta que se pueda producir contaminación por los cadáveres humanos: "Desde hace décadas, la Organización Mundial de la Salud viene repitiendo por activa y por pasiva que los cadáveres que se generan a consecuencia de desastres, terremotos, inundaciones y otro tipo de fenómenos como la DANA que acabamos de vivir en Valencia, no generan un peligro sanitario para la población. No hay riesgo de que los cadáveres en descomposición estén transmitiendo enfermedades como se suele decir. Desafortunadamente, proliferan muchos bulos o informaciones y equívocas que generan confusión y miedos innecesarios. Por supuesto que es muy importante la identificación, la recuperación de los cadáveres, la disposición adecuada para que pueda haber el tipo de inhumación o funerales que los familiares tengan que tener o la identificación de las personas que lamentablemente han fallecido, pero no representan un peligro sanitario".

Desde el Ministerio de Sanidad han señalado que están trabajando para asegurar el correcto funcionamiento del sistema sanitario algo que es clave, "y también lo es garantizar las actuaciones para prevenir posibles brotes infecciosos (inicialmente de tipo digestivo, sobre todo, pero hay que prever situaciones como enfermedades transmitidas por vectores y otras) así como garantizar el abastecimiento de medicamentos en toda la red sanitaria", ha expresado en X Mónica García.

"Ahora mismo lo imprescindible es que se garantice la salubridad de la zona, y para ello vamos a intensificar los contactos y coordinación con los órganos responsables de Salud Pública de la Generalitat Valenciana para garantizar que pasada la fase hiperaguda no aparecen situaciones evitables de enfermedades transmisibles", ha señalado la ministra.

Los graves riesgos para los voluntarios

La solidaridad ciudadana ha estado más que patente en estos días. En la mañana de este viernes, cientos de personas armadas con palas, azadas, escobas, cubos, bolsas de víveres y botellas de agua se lanzaron a ayudar en la medida de sus posibilidades en las tareas de limpieza, desescombro y distribución en los pueblos del sur del área metropolitana de Valencia. Del mismo modo, este sábado, miles de ciudadanos han llegado a la Ciudad de Las Artes y Las Ciencias de Valencia para ofrecer su ayuda y que les distribuyesen en distintas tareas. Imágenes parecidas se han vivido en Castilla-La Mancha.

Teniendo todo el sentido del mundo que la gente se haya volcado con sus vecinos, los voluntarios también pueden poner en riesgo su salud e, incluso, la del resto de ciudadanos. Muchos de ellos no tienen formación ni los conocimientos para evitar ciertos riesgos. Se exponen a contraer enfermedades, que incluso luego pueden transmitir a sus allegados.

Patricia Guillem Saiz, catedrática de Epidemiología, Salud Pública y Medicina Preventiva de la Universidad Europea de Valencia, no entiende bien "por qué no se lanza el mensaje desde la Conselleria de Sanitat o desde el Ministerio de Sanidad diciendo que la ayuda está muy bien, y que desde luego a falta de la ayuda oficial la ayuda ciudadana es muy buena, pero que transcurridos más de dos días es un caldo de cultivo para enfermedades". No solamente por los cadáveres de animales, "que puedan estar en inicio de descomposición, sino sobre todo por las aguas fecales y los químicos que están potencialmente en solución", explica a El Confidencial.

En este sentido lanza una recomendación: "La gente, aparte de llevar sus propios utensilios, debe llevar mascarillas FP2 y guantes gordos. Y por supuesto, mantener mucha higiene dentro de lo posible. No solo deben llevar agua para beber, también para poder mantener una higiene, por ejemplo con jabón de manos para poder limpiarse antes de comer los bocadillos". Los mismos consejos que señala la portavoz de SEIMC, que añade emplear gafas protectoras para evitar que los patógenos lleguen a los ojos.

Recomendaciones para locales y voluntarios desplazados

El Ministerio de Sanidad ha emitido un comunicado con recomendaciones para la población local y los voluntarios desplazados a la Comunitat Valenciana para colaborar con las tareas de limpieza.

Como medidas generales ha destacado seis aspectos:

• Participación en la limpieza: Las personas con algún problema de salud (principalmente de tipo respiratorio o situación de inmunodepresión), así como niños, niñas y mujeres embarazadas no deberán participar en las labores de limpieza.
• Ropa y protección: Se debe utilizar ropa de manga y pantalón largos que no deje descubiertos brazos o piernas. Además, la limpieza deberá realizarse con protección de nariz, boca, ojos y manos, utilizando mascarilla, protector ocular y guantes.
• Lavarse con agua y jabón tras retirarse los guantes, especialmente antes de los descansos, antes de ingerir comida y al finalizar los turnos de limpieza, prestando especial atención a posibles heridas. En caso de no disponer de jabón, se pueden usar geles hidroalcohólicos para lavarse las manos tras retirar la suciedad visible con agua.
• Lavar con agua caliente y detergente la ropa que esté contaminada con aguas residuales o de inundación antes de volver a usarla.
• Desconectar la electricidad y el gas para evitar incendios, electrocuciones o explosiones.
• Solicitar ayuda sanitaria en caso de sentir malestar o presentar síntomas de infección.

En el caso de encontrar cadáveres humanos lo que se debe hacer es "no tocar y llamar a las autoridades" y con los animales "no tocar, en lo posible, y seguir las instrucciones de cada ayuntamiento al respecto".

En cuanto al consumo de agua, desde Sanidad indican que hay que seguir las recomendaciones de las entidades locales a este respecto. Si existe algún tipo de duda, utilizar agua embotellada en el caso de estar disponible.

Respecto a la comida, señala el Ministerio que "aquellos alimentos húmedos que no puedan limpiarse y secarse en menos de 48 horas deberán desecharse. Además, en el caso de existir moho abundante, la limpieza deberá realizarse con protección de nariz, boca, ojos y manos, utilizando mascarilla, protector ocular y guantes". Asimismo señalan que no se debe consumir ningún alimento que haya estado en contacto con el agua de la inundación, salvo latas de conservas, que habrá que secar y dejar una hora antes de abrir o almacenar; en todo caso se seguirán las indicaciones del envase.

Respecto a los desechos, se deberá mantener la basura y restos orgánicos separados del contacto con seres humanos u otros objetos que vayan a entrar en contacto con estos.

Sanidad también recomienda ventilar las estancias todo lo posible, limpiar paredes y suelos y desinfectar con lejía o jabones similares. Retirar los muebles y utensilios mojados, así como el agua estancada.

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El Ministerio también alerta del riesgo del monóxido de carbono (CO), de hecho en la tarde de este sábado 19 personas se han intoxicado en Chiva. Para evitar riesgos recomiendan no utilizar dispositivos de combustión y que "los generadores que se utilicen, hacerlo a más de 5 metros de distancia de puertas, ventanas o rejillas de ventilación". "Si se usa una máquina de lavado a presión, asegurarse de que el motor quede fuera y a una distancia de al menos 5 metros de las puertas, ventanas o rejillas de ventilación. No dejar encendido el motor de los vehículos dentro de un garaje que esté junto a la casa, ni siquiera con el portón abierto", añaden.

En cuanto a la coordinación del personal sanitario voluntario que se ofrece a colaborar apunta a que la Conselleria de Sanitat de la Generalitat Valenciana, con la finalidad de coordinar el voluntariado de personal sanitario que se ofrece para colaborar en las zonas afectadas por la DANA en la provincia de Valencia, ha creado un formulario de registro a través del portal web www.san.gva.es para atender y coordinar las muestras de solidaridad del personal sanitario que ofrece su colaboración a través de distintos cauces.