¿Por qué mi sudor huele peor que el de otras personas?

Aunque a menudo resulta desagradable y produce momentos de cierta incomodidad, el sudor es un proceso fisiológico que, en algún momento, todos tenemos. Los motivos los comenta Belén Fabre, dermatóloga de la unidad de dermocosmética de Vithas Valencia 9 de Octubre.

“El sudor es una secreción líquida compuesta fundamentalmente por agua, aunque también contiene electrolitos y otras sustancias”. Lo producen las glándulas sudoríparas y su función es “regular la temperatura corporal. Se libera cuando la temperatura interna aumenta y al evaporarse sobre la piel, produce un enfriamiento corporal”, afirma la experta.

Hay que tener en cuenta que hay dos tipos de glándulas sudoríparas: las ecrinas y las apocrinas. Las primeras se encuentran en la mayor parte del cuerpo. Las apocrinas se encuentran en áreas donde hay vello, como las axilas, el ano o alrededor de las zonas genitales.

Son estas las que producen un sudor compuesto por ácidos grasos, proteínas, azúcares y amoniaco. La degradación de sus nutrientes por bacterias presentes en la piel generan compuestos que dan lugar al mal olor corporal. Porque esa es la otra función del sudor: eliminar pequeñas cantidades de sustancias tóxicas y de desecho.

No todos los sudores huelen igual

En efecto, hay personas a las que el olor les huele más fuerte (o peor) que a otras. “Depende de distintos factores como la composición del sudor, factores genéticos, la composición de la flora bacteriana de cada persona, factores climáticos como la temperatura o la humedad o la higiene”, comenta la especialista.

A esto hay que añadirle “la concentración de los distintos componentes del sudor en cada persona”. Porque algunas personas segregan un tipo de bacterias responsables de un olor acre intenso; y otras segregan otro tipo de bacterias, asociadas a olores más ácidos.

La alimentación influye

Los distintos alimentos tienen la capacidad de influir en el olor corporal. Los expertos de Driosec, laboratorio especializado en sudoración, “la cafeína, los alimentos ultraprocesados y el azúcar contribuyen a alterar el olor corporal”. También el pescado puede incrementar la concentración de ácidos grasos insaturados otorgando un olor más ácido y acre.

El estrés y la ansiedad también provocan sudor de un olor intenso

“El ajo, la cebolla y el curry y otras especias, al ser digeridos, expulsan gases con sulfuro, generando que el olor del sudor sea desagradable e intenso. Asimismo sucede con dietas ricas en proteínas”. Pero también con el alcohol. Al ser un tóxico, “el cuerpo intenta expulsarlo a la mayor brevedad posible” y una de las maneras de hacerlo es mediante la sudoración.

También se suda en invierno

Aunque existe la falsa creencia de que solo se suda en verano debido al calor, lo cierto es que hay otros motivos que provocan el sudor. El más popular es la práctica del ejercicio físico que, al aumentar la temperatura corporal, requiere la regulación de la misma.

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Pero también se puede sudar ante situaciones de estrés y ansiedad por tres motivos: el ritmo cardíaco aumenta; se segregan hormonas con más intensidad y la adrenalina campa a sus anchas por el cuerpo. Todo ello puede provocar mal olor en el sudor.

Precauciones con el sudor

Generalmente no es habitual detectar un cambio en el tipo de olor del sudor. Pero es importante hacerlo porque, en algunos casos, “podría aparecer asociado a trastornos metabólicos o infecciones”, según la dermatóloga de la unidad de dermocosmética de Vithas Valencia 9 de Octubre.

Por otro lado, aunque no suele significar situaciones peligrosas, es cierto que en determinadas personas, el sudor “puede causar irritación, especialmente si permanece en la piel por mucho tiempo, pudiendo facilitar la aparición de dermatitis o infecciones como el intertrigo”, concluye Fabre.