Cuatro positivos por tuberculosis en Extremadura: ¿está España en riesgo?

El 5 de noviembre, la dirección de salud del área de Badajoz recibió la notificación de un caso tuberculosis, convirtiéndose en el primer caso de la enfermedad detectado este mes. Tras la notificación, el Servicio Extremeño de Salud (SES) se puso a investigar en el CEIP Juventud de Badajoz y ha encontrado otros tres casos positivos tras estudiar 24 contactos.

Sobre los nuevos positivos la Consejería de Salud y Servicios Sociales de Extremadura señalaba este lunes que "hasta el momento, los resultados indican que tres de ellos han obtenido un primer resultado positivo" y que "actualmente, se está a la espera de los resultados de pruebas complementarias para confirmar si presentan la enfermedad".

Aunque el aumento contagios en Extremadura pueda sonar alarmante, los expertos trasmiten tranquilidad. Daniel López Acuña, que fue director de Acción Sanitaria en Situaciones de Crisis de la OMS, señala a El Confidencial que se trata de casos aislados y que por el momento solo se está realizando la valoración si hay que dar tratamientos profiláctico. “No debe preocuparnos la idea de extensión, ni podemos hablar siquiera de un brote”, sentencia.

Patricia Guillem Saiz, catedrática de Epidemiología, Salud Pública y Medicina Preventiva de la Universidad Europea de Valencia, da una de las claves de que la enfermedad haya aparecido en la región: “Extremadura es la comunidad que cuenta con un mayor número de positivos respecto a otras zonas, sobre todo por presencia de enfermedad en animales: jabalíes, ciervos, gamos y de ahí su transmisión al ganado vacuno”.

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"Extremadura es una importante comunidad con grandes explotaciones ganaderas donde puede circular la tuberculosis transmitida por especies de mycobacterias que afectan de forma específica a estas especies y que pueden producir zoonosis", hace hincapié la epidemióloga.

¿Está España en riesgo?

Si bien los casos de tuberculosis experimentaron un descenso significativo desde 2018, en los últimos años se ha vivido un ligero aumento. En concreto, en 2022 se observó un ligero repunte en la tasa en España (7,83 frente a 7,69 por 100.000 en 2021), deteniéndose la tendencia decreciente que veníamos observando desde hace una década. Esta tendencia decreciente ya había mostrado cierta ralentización en los últimos años (el descenso en 2021 respecto al año 2020 fue de 2,2%, mientras que el de 2020 respecto a 2019 fue del 19%).

Entre los motivos del aumento de los casos, la catedrática apunta a que "los factores ambientales en la transmisión son importantes. La transmisión aumenta si la exposición es frecuente o prolongada a pacientes no tratados que dispersan gran cantidad de bacilos tuberculosos en espacios cerrados y poco ventilados". Y también se puede dar por "la rapidez en la detección y declaración de los casos a fin de que se pueda cortar la cadena epidemiologica se la transmisión".

Pero a pesar de las cifras, la epidemióloga también trasmite a este periódico tranquilidad: “Al tratarse de una enfermedad transmisible, esto es normal”.

Asimismo, añade que "todas las enfermedades transmisibles están monitorizadas bajo una estrecha vigilancia epidemiológica. Es fundamental la detección precoz de los casos, establecer pauta de tratamiento y vigilar los contactos frecuentes que pueda haber tenido el paciente con la finalidad de controlar un posible brote".

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En la misma línea se sitúa el exdirectivo de la OMS, que señala que “la tuberculosis está presente en todo el mundo, incluida España, pero no tiene dimensiones epidémicas preocupantes”.

Eso sí, matiza que sí preocupa que a nivel mundial el problema no se reduzca como fijan los Objetivos de Desarrollo Sostenible, ya que la enfermedad “está estancada y en algunos lugares va en aumento”.

Cómo se trasmite la tuberculosis

La epidemióloga valenciana explica que la principal transmisión se produce por el aire: "Una persona que no esté en tratamiento y sea portador podrá contagiar a otras personas mediante estornudos, tos o incluso a través de microgotas [aerosoles] que producimos y expulsados al hablar. Las bacterias ingresarían por la vía respiratoria superior hasta alcanzar los pulmones. Aunque no todas las tuberculosis dan patología pulmonar, estos son uno de los órganos diana más afectados".

Otra forma de transmisión que apunta que es "mucho menos frecuente" es "la vía digestiva, ingiriendo alimentos o leche contaminados".

El gran riesgo mundial: la tuberculosis multiurresistente

Acuña señala que uno de los grandes culpables de aumento mundial es la tuberculosis multirresistente, de la que lleva tiempo alertando la OMS.

La farmacorresistencia surge cuando los fármacos antituberculosos se toman de manera inadecuada debido a una prescripción incorrecta por parte de los proveedores de atención de la salud, a la mala calidad de los medicamentos o a la interrupción prematura del tratamiento por parte de los pacientes. Lo que provoca que esta tuberculosis “no se cura fácilmente con los fármacos de primera línea”.

A todo ello suma, “el aumento de las condiciones de marginalidad, pobreza y desnutrición, el creciente hacinamiento de amplios sectores marginados, y a la sinergia de la infección tuberculosa con situaciones de inmunodepresión como la generada por el VIH”.