Del diagnóstico tardío a la contaminación: lo que hay tras la mortalidad del cáncer de pulmón
Establecer un cribado que permita la detección precoz es una de las principales vías para aumentar la tasa de supervivencia en esta enfermedad. También las políticas sanitarias preventivas a nivel público y la atención a los factores ambientales
El cáncer de pulmón es el tumor con mayor incidencia a nivel mundial y el primero en términos de mortalidad, según el Global Cancer Observatory1. De hecho, se estima que cada 20 minutos muere una persona a causa de esta patología2. Detrás de la mayoría de estas muertes se encuentra un diagnóstico tardío, que reduce las opciones terapéuticas. “El 80% de los casos de cáncer de pulmón se diagnostican en fases avanzadas, más de la mitad en estadio IV, limitando las posibilidades de un tratamiento”3, ha señalado Laureano Molins, coordinador nacional de la Lung Ambition Alliance (LAA) y consultor del Servicio de Cirugía Torácica del Hospital Clínic de Barcelona en la IV Edición de Juntos ahora.
El encuentro, que tuvo lugar recientemente en los Cines Callao de Madrid, reunió a varios miembros de la comunidad científica, autoridades sanitarias y pacientes de la enfermedad con el objetivo común de continuar trabajando para aumentar la supervivencia en cáncer de pulmón. Uno de los caminos que se abren para conseguirlo es el cribado4, con el que ya contamos en España para la detección precoz de otros tumores -mama, colon y cérvix- y cuya utilidad para el de pulmón se ha hecho cada vez más evidente a través de diferentes estudios5,6. Estos determinan que su implementación podría reducir la mortalidad atribuible a este cáncer entre un 20%5 y un 39%6. La supervivencia también aumentaría, pues los datos indican que en un paciente diagnosticado en estadio I la supervivencia a cinco años puede superar el 90%, mientras que en estadio IV puede ser inferior al 10%7.
Pero no es la única vía, los esfuerzos también deben centrarse en la prevención de la enfermedad. Para ello, los expertos han defendido en el evento la necesidad de implementar políticas de salud pública que aborden los factores de riesgo de forma más contundente y que son, principalmente, el tabaquismo -responsable de entre el 80 y 90% de los casos de cáncer de pulmón8- y la contaminación atmosférica, pues a partir de un cierto nivel de partículas en suspensión puede ser un agente que contribuya al desarrollo de este tipo de tumores, incluso en personas no fumadoras9.
El Dr. Carlos A. Jiménez Ruiz, especialista en Neumología y experto en tabaquismo, ha señalado que “para dejar de fumar el paciente tiene que recibir el tratamiento adecuado. Los datos científicos señalan que la combinación del tratamiento psicológico y farmacológico es eficaz para conseguirlo” 10 y ha añadido que, aunque el cáncer ya haya sido diagnosticado, “hay que convencerles de que dejar de fumar va a tener beneficios de salud inmediatos. Hay estudios que comparan ambos tipos de pacientes y se ve que hay una mejoría de la calidad de vida, de los índices de supervivencia y en las recidivas”11,12.
Asimismo, el experto ha destacado que uno de los problemas añadidos actuales son los cigarrillos electrónicos y los calentadores de tabaco. “Hay que decir a los pacientes que estos dispositivos no sirven para dejar de fumar ni para reducir el daño asociado al consumo de tabaco, ni desde un punto de vista oncológico. En el aerosol de estos existen exactamente las mismas sustancias que hay en el humo del tabaco y, aunque en menor cantidad, es suficiente para lesionar el ADN celular”13. En esta línea, Antonio Sisó, presidente de la Sociedad Catalana de Medicina Familiar y Comunitaria (CAMFiC) y Director de Investigación del Consorcio de Atención Primaria de Salud Barcelona Esquerra (CAPSBE), ha denunciado que “no podemos seguir siendo el estanco de Europa, el precio de la cajetilla es muy barato respecto a otros países”.
Respecto al riesgo asociado a los factores ambientales, Laura Mezquita, médico adjunto del Servicio de Oncología Médica y Clínica-Científica Juan Rodés del Hospital Clínic de Barcelona, ha alertado de que “hasta el 9% de las muertes por cáncer de pulmón son atribuibles a la contaminación”9. En este sentido recalca que la exposición al radón, un gas radioactivo de origen natural que puede encontrarse presente en los espacios interiores, aumenta el riesgo de desarrollar este tumor14. “Las casas, sobre todo en zonas del norte de España, oeste de Castilla y León, Madrid, Cataluña… están muy expuestas y no todo el mundo lo sabe. Se puede medir y tomar acciones para reducir su presencia”, ha indicado.
Como respuesta a todos estos puntos, el proyecto Cassandra15 (Cancer Screaning, Smoking Cessation and Respiratoy Assesment) busca demostrar la viabilidad de la implementación de un programa en España que combine la prevención primaria mediante la deshabituación tabáquica y la prevención secundaria con programas de cribado-mediante tomografía computarizada de bajas dosis de radiación para fumadores y exfumadores que cumplan los criterios de inclusión. La iniciativa ha sido impulsada por la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) y cuenta con la participación de 39 hospitales y centros de atención primaria de 16 comunidades autónomas.
Los pacientes piden ser escuchados
En la jornada de Juntos ahora ha habido un espacio dedicado a los pacientes, en el que han podido compartir su experiencia y su visión acerca de la calidad del trato y la humanización en la atención sanitaria. Carmen Barga, superviviente de cáncer de pulmón y representante de la Asociación Española de Afectados de Cáncer de Pulmón (AEACP), ha compartido su caso como ejemplo de éxito de los programas de cribado. “Yo participé en un programa de cribado -mis hermanos habían fallecido por cáncer de pulmón- y me lo detectaron muy pronto, me operaron y no necesité ni quimioterapia ni radioterapia. A los seis meses me detectaron otro tumor, que por suerte no era metástasis del primero, y tampoco necesité estos tratamientos”.
Julián del Saz, también representante de la AEACP, ha señalado por su parte la importancia del diagnóstico molecular con biomarcadores16. “A mí me lo detectaron hace casi cuatro años. Este tipo de diagnóstico garantiza que el paciente tenga el tratamiento más adecuado, pudiendo aportar años de vida por delante y calidad”. También aprovechó la ocasión para pedir a las autoridades “escucha y apoyo”.
En esta línea, Margarita Majem, oncóloga médica del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona, recordó la importancia de “fomentar un abordaje integral del paciente que incluya el acceso a servicios de psicooncología y fisioterapia para ayudarles a lidiar con el impacto funcional, emocional y sociales que supone esta enfermedad”. Marta Moreno, directora de Asuntos Corporativos y Acceso al Mercado de AstraZeneca en España, coincide en que “el sistema sanitario debe tener en cuenta todas las necesidades de los pacientes de manera integral, con una atención multidisciplinar para mejorar no solo sus resultados sino su calidad de vida”.
Un proceso asistencial integrado para todos
Durante el evento también se presentó el documento Recomendaciones para la elaboración de un Proceso Asistencial Integrado de Cáncer de Pulmón, una guía de la LAA que busca mejorar y unificar la atención que reciben los pacientes, asegurando un abordaje integral desde el diagnóstico hasta el tratamiento. “El primer paso es la monitorización del proceso, lo que nos permitirá identificar ineficiencias y áreas de mejora. Para ello la información clínica del paciente debería recogerse de forma estandarizada. Eso también facilitaría la coordinación entre todos los profesionales sanitarios involucrados, fomentando la toma de decisiones conjuntas destinadas a ofrecer un tratamiento adecuado y personalizado a cada paciente”, ha defendido Florentino Hernando, jefe del Servicio de Cirugía Torácica del Hospital Clínico San Carlos.
También se ha tratado la importancia de que todos los pacientes del sistema sanitario -independientemente de dónde vivan- tengan acceso a una atención de calidad. Vanesa Rodríguez, representante de la Fundación Ricky Rubio y paciente de cáncer de pulmón, ha señalado que “se tiene que generalizar la equidad en el diagnóstico y el cribado, si no también estamos incrementando las desigualdades. También el acceso a ensayos clínicos. No tiene que ser el paciente quien se busque su ensayo clínico, tiene que ser el oncólogo el que los derive”.
La IA protagoniza la investigación oncológica
Por último, como cierre a la jornada, se ha llevado a cabo la entrega de los II Premios a Proyectos de Investigación y los IV Premios a Proyecto de Innovación para la detección precoz del cáncer de pulmón de la LAA.
El primer galardón ha sido para el proyecto Identificación de Biomarcadores genéticos para el diagnóstico precoz del Cáncer de Pulmón mediante el estudio de fenotipos extremos de alto y bajo riesgo con secuenciación completa del exoma e inteligencia artificial, dirigido por José Luis Pérez Gracia, coordinador del Área de Ensayos de Oncología de la Clínica Universidad de Navarra. El objetivo del mismo es revelar mecanismos moleculares relacionados con alta y baja susceptibilidad a la carcinogénesis inducida por tabaco, mejorar significativamente la identificación de individuos de alto riesgo e identificar nuevas dianas preventivas, diagnósticas y terapéuticas.
El segundo premio ha recaído en el proyecto Predicción temprana del cáncer de Pulmón mediante Inteligencia Artificial, liderado por Joaquín Dopazo, director de la Plataforma de Medicina Computacional de la Fundación Pública Andaluza de Progreso y Salud. Para llevarlo a cabo se utilizan datos del mundo real de la Base Poblacional de Salud del Sistema de Salud Andaluz -con información de más de 15 millones de pacientes- que permiten desarrollar un modelo predictivo basado en IA. De esta forma, se puede identificar una subpoblación de individuos con alto riesgo de desarrollar cáncer de pulmón, lo que permitirá un cribado más eficiente y preciso que mejore la atención temprana y reduzca los costes asociados al tratamiento.
REFERENCIAS
1.Bray F et al. Global cancer statistics 2022: GLOBOCAN estimates of incidence and mortality worldwide for 36 cancers in 185 countries. CA Cancer J Clin .2024; 74(3):229-63.
2. Grupo Español de Cáncer de Pulmón(GECP). Último acceso: noviembre 2024.
3.GECP: El cáncer de pulmón cambia su perfil: más impacto en mujeres y pacientes más jóvenes.
4. European Lung Foundation (ELF). Cribado del cáncer de pulmón: European Lung Foundation; 2021
5. National Lung Screening Trial Research Team (NLST) et al. Reduced lung-cancer mortality with low-dose computed tomographic screening. N Engl J Med 2011; 365(5):395-409.
6. Pastorino U, et al. Ten-year results of the MILD trial demonstrate the safety and efficacy of biennial lung cancer screening. Eur J Cancer. 2019 Jul 20;118:142–148.
7. Ning J, et al. Early diagnosis of lung cancer: which is the optimal choice? Aging (Albany NY) 2021; 13(4): 6214-27.
8. Ministerio de Sanidad. Estrategia en Cáncer del Sistema Nacional de Salud. 2021.
10. Rabadé-Castedo C et al. Clinical Practice Guideline of Spanish Society of Pneumology and Thoracic Surgery (SEPAR) on Pharmacological Treatment of Tobacco Dependence 2023. Archivos de Bronconeumología 2023; 59: 651–61
11. Sheikh M, Mukeriya A, Shangina O, Brennan P, Zaridze D. Postdiagnosis Smoking Cessation and Reduced Risk for Lung Cancer Progression and Mortality : A Prospective Cohort Study. Ann Intern Med. 2021 Sep;174(9):1232-1239. doi: 10.7326/M21-0252. Epub 2021 Jul 27.
12. Thulasee J et al. Changes in Cigarette Smoking Behavior in Cancer Survivors During Diagnosis and Treatment. Nicotine Tob Res 2022;24(10):1581-8.
13. Abelia, X. A., et al. Comparison impact of cigarettes and e-cigs as lung cancer risk inductor: a narrative review. European Review for Medical and Pharmacological Sciences 2023; 27(13), 6301–18.
14. Ministerio de Sanidad. Mortalidad atribuible a la exposición a radón residencial en España. 2021
15. Cribado del cáncer de pulmón mediante TC de baja dosis. Proyecto piloto nacional Cassandra.
16. Seijo L, et aL. Biomarkers in Lung Cancer Screening: Achievements, Promises, and Challenges. J Thorac Oncol. 2019; 14(3): 343-57.
El cáncer de pulmón es el tumor con mayor incidencia a nivel mundial y el primero en términos de mortalidad, según el Global Cancer Observatory1. De hecho, se estima que cada 20 minutos muere una persona a causa de esta patología2. Detrás de la mayoría de estas muertes se encuentra un diagnóstico tardío, que reduce las opciones terapéuticas. “El 80% de los casos de cáncer de pulmón se diagnostican en fases avanzadas, más de la mitad en estadio IV, limitando las posibilidades de un tratamiento”3, ha señalado Laureano Molins, coordinador nacional de la Lung Ambition Alliance (LAA) y consultor del Servicio de Cirugía Torácica del Hospital Clínic de Barcelona en la IV Edición de Juntos ahora.