Esta es la consecuencia para el corazón de beber alcohol siendo joven

Las reuniones sociales y las celebraciones suelen girar en torno a la bebida, incluido entre los jóvenes. Muchos de ellos comienzan a experimentar con el alcohol durante la adolescencia. El problema es que cuanto antes comiencen a consumir alcohol, mayor será el riesgo de desarrollar problemas relacionados con el alcohol más adelante a lo largo de su vida. Pero, ¿qué pasa con los adultos jóvenes que suelen consumir grandes cantidades de alcohol en cortos periodos de tiempo?

Ahora, un equipo de investigadores en Alemania ha llevado a cabo un estudio esclarecedor en el que se examinó cómo el alcohol afecta los ritmos cardíacos en adultos jóvenes. Los hallazgos son a la vez reveladores y preocupantes, ya que indican que el consumo excesivo de alcohol puede alterar el ritmo normal del corazón y provocar arritmias cardíacas.

El consumo excesivo de alcohol, definido como el consumo de una gran cantidad de alcohol en un período corto, es particularmente común entre los adultos jóvenes. Este comportamiento está asociado a numerosos riesgos para la salud, incluida la intoxicación aguda y el deterioro cognitivo a largo plazo.

Para el estudio, los investigadores contaron con la participación de 193 jóvenes voluntarios que estaban equipados con monitores de electrocardiograma (ECG) móviles. Estos dispositivos rastrearon sus frecuencias cardíacas durante una noche de consumo excesivo de alcohol planificado, cubriendo tanto el período de consumo (de 1 a 5 horas) como el período de recuperación posterior (de 6 a 19 horas). Los participantes registraron un valor máximo de alcohol en sangre de 1,4 gramos por kg en promedio.

Arritmias

Los resultados fueron realmente llamativos: se detectaron arritmias clínicamente significativas en más del 5% de los participantes, principalmente durante la fase de recuperación. Las arritmias incluyeron fibrilación auricular y taquicardias ventriculares, y algunos participantes experimentaron frecuencias cardíacas superiores a 100 latidos por minuto. Entre los casos más extremos de los voluntarios, destacó un chico de 26 años que desarrolló fibrilación auricular 13 horas después de haber bebido, a pesar de no tener antecedentes de dicha afección y una chica de 29 años que sufrió un bloqueo cardíaco de tercer grado durante la fase de recuperación.

"Cualquier alteración del ritmo cardíaco normal puede ser potencialmente peligroso"

"Se detectaron arritmias clínicamente relevantes en más del cinco por ciento de los participantes sanos, y principalmente en la fase de recuperación", afirmó el cardiólogo Moritz Sinner de la Universidad Ludwig Maximilian de Múnich (LMU Múnich) en la revista European Heart Journal.

Los hallazgos del estudio subrayan los posibles peligros del consumo excesivo de alcohol, una práctica común entre los adultos jóvenes. La alteración del ritmo normal del corazón se conoce desde hace décadas, pero esta investigación proporciona datos en tiempo real sobre cómo los cambios inducidos por el alcohol en el sistema nervioso autónomo pueden provocar arritmias incluso en personas sanas. Nadie está a salvo de los efectos del consumo excesivo de alcohol, ya que puede suponer un grave riesgo para la salud en general.

Hay que investigar más

Los investigadores exponen que estas conclusiones solo refuerzan la necesidad de llevar a cabo más estudios para comprender los mecanismos que subyacen a estas arritmias causadas por la ingesta de alcohol. Estudios futuros podrían explorar por qué se producen estos cambios y qué consecuencias a largo plazo podrían tener para los jóvenes que beben en exceso con frecuencia.

El alcohol afecta el hígado, al cerebro y otros órganos vitales, lo que puede provocar enfermedades hepáticas y otras afecciones crónicas. También está vinculado a un mayor riesgo de trastornos de salud mental, como depresión y ansiedad y puede exacerbar problemas de salud mental existentes, creando un círculo vicioso de dependencia y deterioro. De la misma forma, suele estar relacionado con comportamientos de riesgo como practicar sexo sin protección, consumir de drogas y llevar a cabo una conducción peligrosa.