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Enrique Rojas revela las 4 señales para identificar a una persona soberbia y actuar en consecuencia
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Enrique Rojas revela las 4 señales para identificar a una persona soberbia y actuar en consecuencia

La soberbia, definida como altivez y ceguera psicológica, puede complicar relaciones y generar aislamiento. Descubre cómo identificar esta actitud según el reconocido psiquiatra Enrique Rojas y su análisis experto

Foto: El psiquiatra Enrique Rojas (Archivo)
El psiquiatra Enrique Rojas (Archivo)

La soberbia, considerada uno de los siete pecados capitales, ha sido estudiada durante siglos como una actitud que puede deteriorar relaciones y complicar la vida personal. Según la Real Academia Española (RAE), este concepto se define como “altivez y apetito desordenado de ser preferido a otros”, “satisfacción y envanecimiento por la contemplación de las propias prendas con menosprecio de los demás” y “cólera e ira expresadas con acciones descompuestas o palabras altivas e injuriosas”. Estas definiciones dibujan a una persona que, además de considerarse superior, tiende a menospreciar a quienes la rodean.

Las personas soberbias presentan una visión distorsionada de sí mismas. Este fenómeno implica que estas personas son incapaces de reconocer sus defectos, enfocándose únicamente en sus virtudes o logros, lo que dificulta enormemente sus relaciones interpersonales. La soberbia se manifiesta no solo en las relaciones personales, sino también en el ámbito laboral, afectando el desarrollo emocional y profesional del individuo.

Entre las características más evidentes de las personas soberbias se encuentran una actitud de autosuficiencia, un alto nivel de susceptibilidad y una carencia de autocrítica. Este perfil psicológico también puede conducir a relaciones amorosas inestables y a una tendencia a ignorar limitaciones personales. La soberbia, aunque menos estigmatizada que en épocas anteriores, sigue siendo una conducta que puede trabajarse en terapia si la persona está dispuesta a cambiar.

Claves para identificar a los soberbios, según Rojas

El psiquiatra Enrique Rojas, en su cuenta de Instagram, ha compartido una reflexión sobre este tema, describiendo a la soberbia como una “ceguera psicológica” que aísla emocionalmente a quien la padece. Según Rojas, las personas soberbias se perciben como autosuficientes, ignorando sus limitaciones y siendo incapaces de abrirse al mundo emocional de otros. Además, ha identificado cuatro señales clave que permiten reconocer a estas personas.

  • Aire de autosuficiencia: las personas soberbias muestran una actitud de “bastarse a sí mismas”, reflejada en un engreimiento que endurece sus gestos y les confiere una apariencia altanera, que esconde una profunda desconexión emocional.
  • Susceptibilidad casi enfermiza: otro rasgo distintivo es su alta sensibilidad a la crítica. Estas personas tienen una gran dificultad para pasar desapercibidas y suelen hablar constantemente de sí mismas, mostrando desprecio hacia aquellos que sobresalen en algún aspecto.
  • Relaciones amorosas débiles: para Rojas, el amor desordenado hacia uno mismo impide que estas personas se entreguen emocionalmente a otros. Su constante necesidad de reconocimiento de logros y cualidades dificulta la construcción de relaciones afectivas estables.
  • Falta de percepción de limitaciones: finalmente, estas personas no reconocen las restricciones que enfrentan los demás. Su visión poco real de sí mismas les lleva a ignorar obstáculos y a enfrentarse a las consecuencias de sus actos con poca autocrítica.

Reconocer estas señales puede ayudar a entender mejor las dinámicas de la soberbia, tanto en uno mismo como en los demás, y ofrece herramientas para mejorar las relaciones interpersonales. Según Enrique Rojas, aprender a lidiar con estas actitudes es esencial para mantener una vida social y emocional más equilibrada.

La soberbia, considerada uno de los siete pecados capitales, ha sido estudiada durante siglos como una actitud que puede deteriorar relaciones y complicar la vida personal. Según la Real Academia Española (RAE), este concepto se define como “altivez y apetito desordenado de ser preferido a otros”, “satisfacción y envanecimiento por la contemplación de las propias prendas con menosprecio de los demás” y “cólera e ira expresadas con acciones descompuestas o palabras altivas e injuriosas”. Estas definiciones dibujan a una persona que, además de considerarse superior, tiende a menospreciar a quienes la rodean.

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