La enfermedad olvidada por los planes de salud que padece el 55% de los mayores de 50
El paciente suele enterarse de su diagnóstico tras una fractura por fragilidad. Lo que se pretende es diagnosticar la enfermedad antes de que se produzca esa rotura
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La osteoporosis es un importante problema de salud por varias razones. La primera de ellas, la alta prevalencia entre mayores de 50 años. Según el último estudio de la Sociedad Española de Reumatología sobre esta epidemiología, el 54,4% de mayores de 50 años presentaron osteopenia (disminución en la densidad mineral ósea, DMO); y un 10,7% osteoporosis.
Por otro lado, se trata de una enfermedad “silente”, es decir, que no ocasiona síntomas perceptibles. Por lo que, con frecuencia, no se diagnostica hasta que se produce su principal complicación: el desarrollo de fracturas por fragilidad.
De hecho, un 65% de las personas que sufre una de estas roturas óseas osteoporóticas, no ha sido diagnosticada previamente de osteoporosis (OP), según datos del Observatorio de la Osteoporosis, de la Fundación Hispana de Osteoporosis y Enfermedades Metabólicas Óseas (FHOEMO).
Dicho de otro modo, y en palabras de Laia Gifre, del Servicio de Reumatología del Hospital German Trias i Pujol, “actualmente se producen 782 fracturas por fragilidad al día en población española; sin embargo, tan sólo el 36% de estos individuos reciben tratamiento para la osteoporosis”.
También antes de los 50 años
La osteoporosis más frecuente se produce después de la menopausia, es decir, en mujeres, aunque también puede afectar a los hombres (2,6%, según recientes estudios). Su prevalencia, además, aumenta considerablemente con la edad, afectando al 80% de las mujeres mayores de 80 años.
Los expertos insisten en la importancia de realizar un adecuado diagnóstico y tratamiento para reducir el riesgo de fracturas osteoporóticas
Pero también afecta, aunque en menor medida, “a personas de ambos sexos de menos de 50 años. En este caso afecta por igual a ambos sexos, y es más frecuente encontrar alguna enfermedad de base que provoque la patología”, puntualiza María Cortés Berdonces, coordinadora del Grupo Metabolismo Mineral y Óseo de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición, SEEN.
Enrique Casado, del Hospital Universitari Parc Taulí, apunta también a que una parte de los jóvenes de hoy “son más sedentarios, tienen menos exposición solar, consumen menos leche y menos lácteos en general, y un número creciente de personas jóvenes son vegetarianas o veganas. Con estas dietas hay que ser estrictos y comprobar que se están alcanzando las cantidades recomendadas de calcio: 1 gramo al día”.
Diagnóstico temprano
Por todo ello, los expertos, endocrinólogos y reumatólogos, insisten en la importancia de realizar un adecuado diagnóstico y tratamiento, con el objetivo de reducir el riesgo de fracturas osteoporóticas: vertebrales, de cadera, de hombro o de muñeca, principalmente.
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Conseguir diagnósticos tempranos podría pasar por someterse a densitometrías óseas periódicas en mujeres a partir de la menopausia. Estas pruebas miden la densidad del hueso y predicen el riesgo de fractura. De ese modo se puede instaurar tratamiento a tiempo para revertir la osteoporosis en osteopenia.
¿Enfermedad crónica?
La SEEN ha solicitado por todo ello que incorporen esta patología en las Estrategias y Planes de Salud como una enfermedad crónica, con el objetivo de que sea posible prevenir sus consecuencias, es decir, prevenir las posibles fracturas osteoporóticas.
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La razón la explica María Cortés: “Al entrar en un programa de salud pública, conlleva que se elaboren estrategias de prevención, se establezca un protocolo que se paute en centros de atención primaria y hospitales, gracias a los que se podría alcanzar a toda la población”.
De esa forma, todos los pacientes van a tener “las mismas posibilidades de diagnóstico y tratamiento, porque todos los médicos actuaríamos según un mismo protocolo. Realizando, por ejemplo, cribados a pacientes con determinados factores de riesgo”, concluye la endocrinóloga.
La osteoporosis es un importante problema de salud por varias razones. La primera de ellas, la alta prevalencia entre mayores de 50 años. Según el último estudio de la Sociedad Española de Reumatología sobre esta epidemiología, el 54,4% de mayores de 50 años presentaron osteopenia (disminución en la densidad mineral ósea, DMO); y un 10,7% osteoporosis.