Las vacas también llevan 'wearables'
Esta tecnología no solo cuida el bienestar animal, mejorando sus condiciones de vida, si no que permite controlar información en tiempo real, incrementando la eficiencia y la calidad de la producción
Relojes inteligentes, zapatillas con GPS, pulseras que controlan nuestro estado de salud... La tecnología 'wearable' está por todas partes y el sector agroalimentario no quiere quedarse atrás. Por eso, la innovación, el 'big data' y la inteligencia artificial han abierto la senda al nuevo concepto denominado ganadería de precisión o 'precisión livestock farm', que pretende incrementar la eficiencia, la calidad de la producción y la rapidez en la respuesta de los ganaderos mejorando el bienestar de sus vacas.
Hoy, la mayor parte de las ganaderías ya han alcanzado un alto nivel de automatización. Los primeros en incorporarse han sido los sensores de identificación y de actividad de los animales, situados en sus extremidades o en el cuello. Lo que podríamos denominar como los ‘fit bit’ de las vacas.
Estos sensores proporcionan información del ordeño, la actividad del animal, enfermedades...
El mecanismo de actuación es similar a los sistemas utilizados por las personas pero variando el software. La información que aporta es más compleja. Estos sensores proporcionan información en tiempo real de sus vacas desde la entrada del ordeño (hora, tiempo, producción, flujo de leche, conductividad etc.) hasta información sobre la actividad del animal como nivel de confort, posibles enfermedades, celos, etc. De esta forma, la tecnología ayuda a los ganaderos a mejorar la calidad de vida de sus vacas.
Bienestar animal, una preocupación creciente
El bienestar animal es un tema que inquieta cada vez más a los consumidores, que además de demandar alimentos sanos también exigen que sean obtenidos mediante prácticas que aseguren una adecuada protección animal. Según el último Eurobarómetro sobre protección animal, el 94% de los españoles cree importante el bienestar de los animales de granja y al 71% le gustaría contar con más información.
Una garantía de consumir productos obtenidos de animales en buenas condiciones es el certificado Bienestar Animal AENOR Conform. Su modelo de acreditación es pionero en Europa y tiene en cuenta diferentes parámetros agrupados en cuatro principios básicos: buena alimentación, buen alojamiento, buen estado de salud y comportamiento apropiado para las necesidades de la especie. Este modelo ha sido desarrollado junto al Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA) y basado en el referencial europeo Welfare Quality®, estándar utilizado para hacer las evaluaciones en granja.
Calidad Pascual, no solo cuenta con este certificado, sino que es el único gran fabricante con todas sus granjas certificadas por AENOR, un total de 348. La compañía ha situado la política de bienestar animal como uno de sus pilares estratégicos. El censo de vacuno lechero español en abril de 2018 ascendía a 850.804 vacas y la compañía se ha propuesto situarse en la vanguardia de las condiciones de vida de las 90.000 vacas que viven en sus granjas.
La compañía lleva años trabajando en mejorar las condiciones de manejo y cuidado de las vacas ya que, en su opinión, el bienestar animal puede ser un factor clave del sector lácteo español para diferenciarse. “Nosotros no hacemos leche, la leche la hacen nuestras vacas. Nuestro objetivo es dar lo mejor en cada parte del proceso para garantizar que llega la mejor leche a los hogares, ahora 100% bienestar animal”, señala Tomás Pascual, presidente de la compañía.
Además, tal y como señala Pascual, “las principales propiedades de un alimento tan importante en la alimentación como la leche dependen fundamentalmente de cómo se trate desde su origen. Una leche obtenida mediante un proceso cuidado y controlando todos los parámetros que pueden afectarla es crítico para obtener una leche de alta calidad”. La alimentación y el descanso son imprescindibles para una buena salud del ganado vacuno y esa buena salud repercute directamente en la calidad de leche.
Pascual es el único fabricante de España que ha conseguido el aval del iTQi (Organización líder mundial dedicada a catar y promover productos alimenticios de sabor superior) en todas sus leches clásicas (entera, semidesnatada y desnatada) y sin lactosa. El iTQi concedió a su leche entera el pasado año el Diamond Taste Award en reconocimiento a su sabor, conviertiéndose en la única leche del mundo con esta distinción.
Para producir leche ya no es sufriente ordeñar las vacas, se debe tener un control sobre todos los parámetros de la ganadería para asegurar, así, la calidad desde el origen. Hoy la tecnología permite un control total e individual sobre el ganado lo que permite mejorar la rentabilidad, la sostenibilidad ambiental y el bienestar animal.
Relojes inteligentes, zapatillas con GPS, pulseras que controlan nuestro estado de salud... La tecnología 'wearable' está por todas partes y el sector agroalimentario no quiere quedarse atrás. Por eso, la innovación, el 'big data' y la inteligencia artificial han abierto la senda al nuevo concepto denominado ganadería de precisión o 'precisión livestock farm', que pretende incrementar la eficiencia, la calidad de la producción y la rapidez en la respuesta de los ganaderos mejorando el bienestar de sus vacas.