El superalimento para deportistas: reduce el cansancio, ayuda a prevenir lesiones y agiliza la recuperación muscular
En Asia es muy habitual tomar la raíz de esta planta por sus beneficios medicinales, y un reciente estudio señala que puede ayudar mucho tras hacer ejercicio
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Hace 5.000 años ya se usaba en Asia la planta ginseng, del género Panax, por los efectos medicinales y beneficios para la salud que percibían en ella. Durante todo este tiempo, su raíz ha tenido un papel destacado en las medicinas china y coreana, y su popularidad ha propiciado que en las últimas décadas haya llegado también a países occidentales.
Algunos de sus efectos más comentados, y que más consumidores le ha hecho ganar, son sus capacidades para proporcionar energía, combatir el cansancio, mejorar la circulación sanguínea y aportar efectos antiinflamatorios. Sobre esto, un reciente estudio llevado a cabo por investigadores de la Universitat Oberta de Catalunya, y publicado en la revista científica Nutrients, aporta pruebas de que el consumo de ginseng puede ayudar significativamente al organismo tras realizar ejercicio físico.
Dichos investigadores revisaron y analizaron más de setecientos artículos de literatura científica, y llegaron a la conclusión de que "el ginseng puede tener un rol importante como complemento nutricional para la recuperación después del ejercicio", según explica el preparador físico Borja Muñoz, uno de los autores del estudio. Aunque por supuesto, para que esto funcione también es preciso llevar a cabo una dieta equilibrada y saludable en el día a día.
Es capaz de evitar lesiones
Las ideas principales del estudio señalan que la práctica del ejercicio físico pueden producir ciertos daños musculares debido al esfuerzo y a la carga a los que están sometidos los músculos, pero estos efectos quedarían contrarrestados, al menos en parte, por el posterior consumo de ginseng. Y es que una de las propiedades de la raíz de esta planta es que produce efectos antiinflamatorios y antioxidantes, lo cual consigue "atenuar la respuesta de los marcadores biológicos responsables del daño y la inflamación muscular inducidos por el ejercicio, principalmente la creatina-cinasa (CK) y la interleucina 6 (IL-6)".
Los efectos antiinflamatorios del ginseng pueden reducir el daño muscular y evitar lesiones
Además, con el ejercicio físico intenso y la falta de oxígeno en el músculo también puede aparecer lactato en sangre, y el estudio también constata que el consumo de ginseng lo reduce y amortigua. Por otra parte, la recuperación muscular y la reducción de la fatiga permiten desarrollar un rendimiento físico más notable y continuado.
Según ha explica el propio Borja Muñoz, tuvo la idea para llevar a cabo este estudio por las experiencias que él mismo presenció al pasar un tiempo en China. Allí, es habitual que los deportistas (él era readaptador físico en un club de fútbol) tomen ginseng tras sus entrenamientos y partidos, y le hablaban de los beneficios que les aportaban, llegando a compararlo con tomar bebidas energéticas.
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Hace 5.000 años ya se usaba en Asia la planta ginseng, del género Panax, por los efectos medicinales y beneficios para la salud que percibían en ella. Durante todo este tiempo, su raíz ha tenido un papel destacado en las medicinas china y coreana, y su popularidad ha propiciado que en las últimas décadas haya llegado también a países occidentales.
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