La tarta de una profesora jubilada que arrasa en España: estas son las ciudades donde puedes probarla

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A veces, las recetas caseras familiares que se preparan durante toda la vida en el hogar acaban trascendiendo, y siendo apreciadas por un grupo de consumidores muy amplio. Buen ejemplo de ello es un postre conocido como "la tarta de la madre de Cris", obra de una profesora granadina jubilada.

Pilar Molina se jubiló después de 35 años trabajando como profesora de Lengua y Literatura en un instituto. Para una fiesta de su hija Cris, preparó una tarta de queso que resultó ser tan deliciosa que los amigos de la hija se quedaron con ganas de más. El destino quiso que uno de ellos fuese gerente de un restaurante, y la tarta le parecía tan buena que planteó la idea de comercializarla, y el resto es historia. Pilar Molina ha hablado recientemente sobre todo ello ante los micrófonos de Cadena SER.

Tal como explica, empezaron a ofrecer degustaciones gratuitas hace ya diez años, y gustaron tanto que pronto empezaron a crecer y expandirse. Se trata de una tarta de queso artesanal, que define como "cremosa pero firme", y que se ha convertido en un fenómeno en diversas ciudades españolas.

Tiendas de "La tarta de la madre de Cris"

Ya tienen seis tiendas en las que venden estas tartas tan especiales: una en Granada (la original), dos en Sevilla, dos en Málaga y una que abrieron recientemente en Madrid. Además de la clásica tarta de queso con la que alcanzaron la popularidad, también hay otras variedades: de queso azul o curado, de queso y chocolate, de coco y dulce de leche, etc.

Se han expandido y tienen seis tiendas: cinco de ellas en Andalucía y la otra en Madrid

Además, no solo están disponibles en sus propias tiendas, sino que también han sido solicitadas por restaurantes de toda España para incluirlas en sus cartas. La tarta de queso de la madre de Cris ha llegado a estar presente incluso en un restaurante con estrella Michelin de Bilbao, y también en establecimientos de otros países como Inglaterra y Bélgica.

Otra manera de degustar estas tartas es pedirlas a domicilio desde su página web, ya que la mayoría de ellas están disponibles para envíos a toda la Península. La clásica de queso tiene un precio de entre 20 y 30 euros, dependiendo del tamaño.