Hasta cuándo es seguro comerse un huevo cocido que has dejado en la nevera

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El huevo es un alimento básico en muchas cocinas, pero su correcta manipulación y almacenamiento son esenciales para garantizar su seguridad y frescura. Este producto tan consumido es uno de los más sensibles a la contaminación y puede conllevar riesgos para la salud como la salmonella.

La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) y el Departamento de Agricultura (USDA) explican cómo debe guardarse correctamente los huevos estén o no cocinados y dan algunos consejos a los consumidores para evitar problemas y disfrutar de este alimento sin preocupaciones.

Cuánto dura un huevo cocido en la nevera

Una vez cocidos, los huevos deben ser refrigerados lo antes posible, idealmente dentro de las dos horas posteriores a su cocción. Es fundamental mantenerlos a una temperatura de 4 °C o menos para evitar la proliferación de bacterias. Bajo estas condiciones, los huevos duros, ya sea con cáscara o pelados, pueden conservarse en la nevera hasta por siete días, manteniendo su frescura y seguridad alimentaria.

El huevo cocido, a diferencia del huevo fresco, pierde la capa protectora que cubre la cáscara durante el proceso de cocción, lo que lo hace más susceptible a la contaminación bacteriana. Por este motivo, no deben dejarse a temperatura ambiente por más de dos horas, ya que esto podría comprometer su seguridad.

Si tienes sobras de platos que contengan huevo, también debes refrigerarlas de inmediato

Para evitar cualquier riesgo, es aconsejable cocinar los huevos hasta que tanto la yema como la clara estén completamente firmes. Esto asegura que cualquier posible bacteria presente en el huevo sea eliminada. Además, los platos preparados con huevos deben cocinarse a una temperatura interna de al menos 71 °C, utilizando un termómetro para alimentos si es necesario.

Si tienes sobras de platos que contengan huevo, lo mejor es refrigerarlas de inmediato en recipientes poco profundos, lo que permitirá que se enfríen rápidamente y se conserven adecuadamente durante tres o cuatro días.

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Andrea Muñoz

El almacenamiento de los huevos frescos también requiere ciertas precauciones. Deben guardarse en su envase original dentro de la nevera y se aconseja utilizarlos en un plazo de tres semanas para disfrutar de la mejor calidad. Evita lavarlos antes de almacenarlos, ya que esto podría permitir la entrada de bacterias a través de los poros de la cáscara.