¿Eres cafemaníaco? Estas cinco recetas te encantarán

Hay quien lo bebe por las mañanas o después de comer como parte de la sobremesa y para estar activos durante la tarde. El café está asociado a estas elaboraciones en forma de bebida, pero hay recetas que llevan el grano más allá de este clásico de los desayunos. No todo se reduce al expreso, el capuchino o el combinado con leche, sino que hay preparaciones en las que se emplea en carnes, ensaladas o pescados.

En Alimente recopilamos ahora cinco recetas en las que se utiliza el café como ingrediente diferenciador para aportar un sabor variado y único en ciertos platos clásicos. Una manera de sorprender a los paladares de los amantes de este grano con diversas elaboraciones que van desde entrantes hasta platos principales e incluso como postre.

Hojas verdes al café

Un entrante que aproveche el sabor de este grano y sea fácil de hacer es una ensalada de hojas verdes al café. La marca Candelas, especialista en esta materia prima, recomienda esta receta como una forma de emplear dicho ingrediente como elemento principal.

Para ello solo hay que elaborar una vinagreta en la que se mezcle aceite de oliva, vinagre balsámico, café molido y pimienta. Se remueve con un tenedor hasta que se emulsione y se vierte por encima de una ensalada de hojas verdes como podría ser rúcula, lechuga verde, endibia o escarola. No obstante, se puede emplear con prácticamente cualquiera de estos tipos de elaboraciones.

Solomillo con café

El café puede jugar un rol protagonista como aderezo para la carne. Una manera de otorgarle un matiz en el aroma y el sabor y ofrecer nuevas notas gustativas. La receta de solomillo marinado con este grano y otras especias es una de las más sencillas y sabrosas de elaborar.

El café aporta un sabor diferente y novedoso a muchos platos en los que no se suele utilizar

Los ingredientes para cuatro personas son: dos solomillos de cerdo, una taza de café preparada, dos dientes de ajo, una cucharada de azúcar, guindilla, romero, aceite de oliva, sal y pimienta.

Para elaborarlo solo hay que mezclar en un bol los ajos machacados, la guindilla, el azúcar, el romero, la sal, la pimienta y la taza de café. Se mezcla todo y posteriormente se trocean los solomillos en rodajas y se remueven bien con ese líquido. Se dejan marinar al menos durante dos horas para que adquieran sabor. Posteriormente, en una sartén con aceite se cocinan dichas piezas de carne al punto que cada uno desee y se vierte un poco del marinado hasta que reduzca.

Merluza al café

El pescado también se puede combinar con este grano amargo. La merluza al café, receta recomendada también por Candelas, es una manera en la que integrar dicho ingrediente.

La elaboración requiere de 400 gramos de merluza, 2 zanahorias, 1 cebolla y una cuchara de café. Primero se cuecen durante 5 minutos los dos vegetales en agua con sal y pimienta, y posteriormente se añaden el pescado y el grano a la cocción durante 10 minutos más. Tras este lapso de tiempo, se retira la merluza. Posteriormente se riega con una salsa realizada con la mezcla de 5 cucharadas de mayonesa, 3 de brandy, 2 de zumo de limón y 3 de tomate natural.

Salsa barbacoa

El café es uno de los ingredientes que se pueden utilizar para elaborar una salsa barbacoa única que acompañe a carnes rojas y pollo. Se trata de una manera diferente de aportarle un sabor más intenso a estas carnes respecto a la elaboración más clásica de la misma.

Para ello, es necesario contar con una taza de expreso o de café de intensidad fuerte, una de kétchup, tres cuartos de azúcar, media de vinagre, media de cebolla, un diente de ajo y dos cucharadas de salsa de soja. Se introducen en una olla y se mezclan. Se cocinan a fuego lento durante 40 minutos y se remueve constantemente hasta que todos los sabores e ingredientes se hayan integrado en un todo homogéneo.

Amor bandido

Si hay un lugar donde el café destaca, es Colombia. El país suramericano cuenta con diversas recetas en las que este ingrediente es uno de los elementos principales. El amor bandido, con un peculiar nombre, consiste en una refrescante bebida caracterizada por un sabor dulce y el contraste amargo de dicho grano.

Los ingredientes necesarios para su elaboración son: maracuyá o fruta de la pasión, agua, leche condensada, azúcar al gusto y café. Se mezclan todos estos en una licuadora y posteriormente se sirve la bebida bien fría y acompañada con cubitos para que mantenga dicha temperatura. También se pueden elaborar otras variedades utilizando otras frutas.