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Las increíbles recetas de iconos del siglo XX como Hemingway, Sinatra y Elvis
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ARTISTAS Y GASTRONOMÍA

Las increíbles recetas de iconos del siglo XX como Hemingway, Sinatra y Elvis

El autor de 'Adiós a las armas', conocido bebedor, elaboró una deliciosa receta de hamburguesa. Presley creó su sándwich de plátano y Sinatra una salsa de albóndigas

Foto: El sándwich de Elvis Presley. (iStock)
El sándwich de Elvis Presley. (iStock)

Ernest Hemingway es conocido, además de por sus portentosas novelas, por su no menos generosa afición a la bebida, sus cócteles de grandes proporciones etílicas y su desmedida pasión por el daiquiri de sus años en Cuba, cuya huella permanece en la imprescindible Floridita de La Habana. Se habló menos de su afición por la comida y de sus propias recetas, que trascendieron en sus papeles privados durante su estancia en Cuba en la Finca Vigía, donde vivió intermitentemente desde mediados de los 30 hasta 1960. Entre ellas, su mítica hamburguesa Hemingway, que ha sido motivo de estudio. Una receta muy particular que provocó que varios chefs la recuperaran en sus libros de cocina.

Elvis Presley popularizó el sándwich de plátano, beicon y crema de cacahuete: se notaría en su ocaso

Elvis Presley tiene dos caras, la del joven rebelde del King Creole que aturdió a la pacata sociedad de EEUU en los 50 con sus golpes de cadera. La revolución de un blanco de Memphis que llevaba en las venas el rythm and blues de los negros de la América del Jim Crow, pero su afición por comer también fue legendaria. Su origen de clase obrera le predispuso con el éxito a no escatimar con la comida cuando llegó a la cima.

placeholder La salsa de Joan Crawford.
La salsa de Joan Crawford.

Se notaría en su evolución posterior, cuando arrastraba sus kilos de más con la energética combinación de baile y artes marciales en los templos del juego de Las Vegas, poco antes de hundirse en su bañera de su mansión de Graceland en un cóctel de alcohol y medicamentos. De sus recetas ha pasado a la historia el sándwich más rotundo que podamos conocer, un fundido de mantequilla de crema de cacahuete, plátano y beicon.

El autor de 'Adiós a las armas' dedicó mucho tiempo a la elaboración de la hamburguesa en Cuba

La bella actriz Joan Crawford, cuyo estrellato en la meca del Hollywood de los años 40 quedaría fijado por su obsesiva y destructiva enemistad con Bette Davis, que con los años rayó en la locura, tal y como mostró la reciente serie de HBO 'Feud', no solo brilló en su juventud y como actriz dramática en su madurez, también inventó una deliciosa salsa para untar los doritos o tortas de maíz. Para ello utilizaba queso cremoso, leche, crema agria, el zumo de medio limón, media cebolla tierna y rábano picante. Crawford mezclaba primero el queso con la leche y después añadía la salsa agria. Cuando estaba ligada, añadía el resto de ingredientes y los dejaba reposar durante 30 minutos.

Reproducidas en cientos de libros

Frank Sinatra, el delgaducho bailarín y cantante que despuntó a principios de los 40 con clásicos del musical como 'Un día en Nueva York', conquistó la cima envuelto en una peligrosa relación con la mafia y con un grupo de amigos destructivo denominado el Rat Pack, que incluía a los cantantes Sammy Davis Jr y Dean Martin, la imagen más completa de una pandilla de golfos que haya dado el famoseo. Cuando se hizo mayor, su pasión gastronómica se sustanció con un notable aumento de peso. Frankie 'Ojos Azules', como buen italoamericano, tenía su propia receta de espaguetis y albóndigas, que también ha sido célebre.

Al público le apasiona saber qué platos inventaron los famosos que creó la cultura pop en el siglo XX

Todos pertenecen a una época en la que la preocupación por la nutrición estaba a años luz de lo que es hoy. Elvis, sin embargo, fue uno de los primeros devotos de la dieta milagro Atkins, aunque la ejecutara con sus propias reglas. Son algunos ejemplos de lo que hoy llamaríamos celebrities, las estrellas de toda la vida, que más allá del cliché tuvieron su inspiración no solo en la escritura, la actuación, la música o el baile, sino en la gastronomía. Crearon recetas que han sido reproducidas en cientos de libros de cocina. Puede que tengas en tu casa la idea perfecta de un guiso, una tarta o unas galletas, pero al público le apasiona saber qué comían y qué inventaron los iconos del siglo XX, el momento en el que la cultura pop de masas creó a los verdaderos famosos antes de las redes sociales.

placeholder Ernest Hemingway en Cuba.
Ernest Hemingway en Cuba.

El umami de Hemingway

La hamburguesa del autor de 'Por quién doblan las campanas' o 'Adiós a las armas', entre otros clásicos, radica en una compleja mezcla de ingredientes, algunos de los cuales es dificíl encontrar hoy en día. La revista 'Paris Review' hizo su interpretación sobre las anotaciones del escritor de su creación culinaria. En principio, se necesita simple carne de vaca picada, que el autor marinaba con una combinación muy específica de especias, cebolla, ajo y pimienta y vino.

"La hamburguesa estaba deliciosa: cada bocado tenía un complejo sabor umami, terroso y profundo"

Parece simple puesto que todo se basa en la preparación de la carne picada ya que contiene poco más, pero el escritor dedicó tiempo a su receta, tal y como afirma la experta Cheryl Lu Lien Tan: "La hamburguesa estaba deliciosa, cada bocado tenía una textura y un complejo sabor umami, terroso y profundo. Nunca había experimentado una combinación de sabores tan rica en una hamburguesa".

Para ello se necesita, además de la carne picada, un diente de ajo picado, cebollas tiernas también en finas capas, salsa de pepinillos, alcaparras, huevo batido y un tercio de vaso de vino tinto. Hemingway mezclaba primero la carne picada con el ajo y las cebollas y lo dejaba reposar unos 15 minutos; después añadía la salsa de pepinillos, las alcaparras y el vino y lo dejaba marinar otros diez minutos. Las hacía gruesas y procuraba que los dos lados quedaran bien hechos y crujientes, y el centro poco hecho y jugoso.

El gusto sencillo de Elvis

Para los fans de Elvis no es nuevo. Su sándwich de plátano y mantequilla de cacahuete es más que una leyenda. Aunque Pamela Clarke Keogh revisara el mito en su libro ' Elvis Presley: The Man. The Life. The Legend', tras hablar con el cocinero de Graceland, Joe Esposito, quien afirmaba que Elvis "no comía tantos emparedados de plátano y crema de cahachuete" como se caricaturizó y que su menú preferido era el de "un tío complejo con gustos simples: su plato favorito era la hamburguesa de queso y mucha Pepsi", aunque su afamada combinación pasara a la historia.

placeholder Elvis Presley comiendo el sándwich.
Elvis Presley comiendo el sándwich.

Consiste en una mezcla de beicon, pan, crema de cacahuete y plátano, que debe elaborarse de la siguiente forma: primero freír el beicon y añadir las rebanadas de pan con la grasa, después untar la matequilla de cacahuete en la parte de arriba y las rodajas de plátano con el beicon en una de ellas. Cuando ambas están suficientemente tostadas, se juntan y se presionan dejándolas hacer un poco más hasta que se derrite un poco.

La salsa del jefe del Rat Pack

Para conseguir la particular receta italiana de espaguetis con albóndigas del cantante y actor Frank Sinatra -en España es más habitual la salsa boloñesa-, se necesita para las albóndigas una masa con la carne picada, dos dientes de ajo, media taza de queso parmesano, dos huevos, una taza de migas de pan, una cucharada de orégano y otra de perejil, sal y pimienta al gusto. Se mezcla todo bien y con la masa resultante se hacen las albóndigas, que se fríen en aceite de oliva.

placeholder Espaguetis con albóndigas.
Espaguetis con albóndigas.

Para la salsa hace falta una lata grande de tomates pelados, una lata de pasta de tomate, una cebolla pequeña, una cucharada de orégano, media taza de aceite de oliva, una cucharada de perejil, otra de canela, sal y pimienta negra, y queso parmesano rallado. Primero se sofríen los ajos y las cebollas en el aceite de oliva que se utilizó para las albóndigas. Después se vierten los tomates y se machacan con el aceite de oliva y se añaden las especias. Se cubre todo y se deja cocer la salsa a la que se añaden las albóndigas a fuego lento por lo menos durante una hora.

Ernest Hemingway es conocido, además de por sus portentosas novelas, por su no menos generosa afición a la bebida, sus cócteles de grandes proporciones etílicas y su desmedida pasión por el daiquiri de sus años en Cuba, cuya huella permanece en la imprescindible Floridita de La Habana. Se habló menos de su afición por la comida y de sus propias recetas, que trascendieron en sus papeles privados durante su estancia en Cuba en la Finca Vigía, donde vivió intermitentemente desde mediados de los 30 hasta 1960. Entre ellas, su mítica hamburguesa Hemingway, que ha sido motivo de estudio. Una receta muy particular que provocó que varios chefs la recuperaran en sus libros de cocina.

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