5 bebidas para tomar verduras de manera fácil y muy diferente

Las verduras son un alimento que los especialistas en nutrición no dejan de recomendar diariamente por lo saludable que resulta. Son una gran fuente de micronutrientes y antioxidantes muy beneficiosos para el organismo. Comerlas en crudo a veces puede resultar tedioso para niños y adultos. No obstante, una solución muy práctica para poder aumentar el consumo de las mismas es hacer bebidas con ellas, aunque se pierda parte de su aporte en fibra. De esta manera, se preparan de una forma diferente para quienes no disfrutan comiéndolas al natural o buscan cierta variedad.

Para ello, en Alimente hemos recopilado varias bebidas con verduras que son una opción alimenticia de lo más saludable, además de ayudar a controlar el apetito y no excederse en las calorías por su bajo aporte energético. Smoothies, zumos y más, a continuación.

Gazpacho

Este clásico de la gastronomía andaluza y española es una de las bebidas que demuestra que es posible disfrutar de todo su sabor a la vez que se aprovechan todas las propiedades que los ingredientes tienen que aportar. El pepino, la cebolla, el pimiento verde y, sobre todo, los tomates son las verduras que conforman la base de esta refrescante receta que es ideal para los días de verano, pero que también se puede consumir en invierno. Y estos, combinados con el aceite de oliva, el vinagre y el ajo, fundamentales en la receta tradicional, acaban creando una mezcla con un punto de sabor muy especial y atractivo.

Smoothies verdes

Estos han obtenido una gran popularidad en los últimos años por lo saludables que resultan. Se pueden hacer con hojas de vegetales verdes como las espinacas, el brócoli, el kale, las acelgas, el apio o el perejil. Estos conforman en torno al 50% de la receta, mientras que la otra mitad se elabora con frutas como pueden ser los plátanos. De esta manera, el sabor del smoothie se suaviza y acaba teniendo un gusto más dulce y menos amargo, a la vez que la textura se vuelve algo más densa.

Aojiru

La cocina tradicional japonesa se caracteriza, entre otras cosas, por elaborar creaciones muy saludables y emplear una amplia cantidad de verduras y hortalizas en ellas. Una prueba de ello es la bebida conocida como aojiru -o zumo verde en inglés por el color que tiene-. Esta se prepara utilizando kale u hojas de cebada, convirtiéndose así en una gran fuente de vitaminas y minerales. No obstante, tiene una pega: su sabor suele ser muy amargo, pero hay algunas que se elaboran con un poco de azúcar o edulcorante para que se reduzca este gusto y sean más agradables al paladar.

Zumo de zanahoria

Las zanahorias, esa gran fuente de betacarotenos y vitaminas tan beneficiosas, pueden incorporarse a la dieta de muchas maneras diferentes. En sofritos, ensaladas, en crudo, a bocados o incluso en una versión líquida. Un zumo elaborado con esta hortaliza obtendrá un llamativo color naranja y un sabor suave, a la vez que se convierte en una manera muy cómoda y diferente de poder consumirla. La zanahoria se puede combinar con el apio, los tomates, las manzanas e incluso el zumo de una naranja para que así gane consistencia, sabor y una mezcla de nutrientes más interesante para el organismo.

Zumo de remolacha

Sus elevados niveles de nitratos, que favorecen la circulación sanguínea, el aporte de oxígeno a los músculos y reducen la presión arterial; convierten a la remolacha en un alimento con unas propiedades nada desdeñables para la salud. Es muy común consumir esta en ensaladas, pero también se puede degustar en estado líquido sin que pierda gusto. Mezclándola con manzana y jengibre se crea un zumo que es ideal para deportistas y para cualquiera que quiera llevar una vida sana con una alimentación en la que no falten frutas y verduras.