Llega el churronut, la dulce tentación de la que todos hablan
Un nuevo bollo corre de boca en boca en Barcelona y no deja a nadie indiferente. Su secreto, unir lo mejor de dos delicias, el churro y el donut. Así se ideó y así sabe...
Quien piense que ya nada puede sorprenderle en el mundo de la repostería está claramente equivocado. Hay que dejar espacio para la sorpresa, porque de vez en cuando aparece... y con éxito. Prueba de ello es el dulce del que todo el mundo habla estos días en Barcelona, el churronut. Sí, su nombre no deja lugar a dudas, es la mezcla definitiva del churro y el donut.
Lo ha ideado Andreas Kanakis, venezolano instalado desde hace años en Barcelona y fundador de Alsur Cafe, y desde que empezó a comercializarse y a anunciarse en sus redes sociales, todo el mundo quiere probarlo. Alimente ha hablado con él para que nos cuente cómo surgió su idea y cuál ha sido el proceso de creación del churronut: "El pasado mes de agosto estábamos haciendo un viaje por Escandinavia y hay un producto de su pastelería cuya textura y sabor me recordaron un poquito al churro. A raíz de ahí se nos ocurrió crear el churronut, una mezcla de churro con donut".
"Tiene un sabor dulce más ligero que el churro y un crocante también más suave, como el del donut"
Kanakis es un amante de la mezcla de productos, algo que practica habitualmente en su café: "Básicamente nos dedicamos al cross fooding, un movimiento que mezcla estilos de comida, algo de toda la vida con otras cosas más modernas. Es una forma de hacer que la gente, que normalmente puede ser un poco tímida para probar novedades, se atreva, porque lo que se le ofrece es una combinación que lleva algo que ya conocen y el hecho de que les resulte familiar hace que la gente se anime más. Me apasiona el mundo del cross fooding, distinto de la fusión, porque esta suele referirse más a la combinación de culturas y a la alta cocina, mientras que la nuestra es más común, digamos, de toda la vida". Así, en su carta ofrece por ejemplo carrot cakes-pancakes o un grilled cheese waffle-sándwich.
Volviendo al churronut, ¿estamos más ante un churro o ante un donut? ¿A qué sabe exactamente? Kanakis nos cuenta que "con la idea en mente pedimos al jefe de pastelería que empezar a experimentar con ella. Resultó que la masa del churro no funcionaba para lo que queríamos y la escandinava sí le iba muchísimo mejor. Tardamos unos meses en desarrollar una masa que fuera una mezcla de sabores y tal vez la proporcion sea 60% churro, 40% donut. Tiene un sabor dulce más ligero que el churro y un crocante también más suave, como el donut".
A raíz de ponerlo a la venta antes de finales del pasado año, los clientes y las redes sociales hicieron el resto. Como señala Andreas, "cuando anunciamos en Instagram el churronut la cuenta se disparó y tuvo más likes que nunca. Se fue haciendo viral y viene gente desde lejísimos a probarlo. Ya casi se ha convertido en un motivo más para visitar Barcelona".
Próximamente, el black velvet churronut
Tanto es así que ya que el público lo demanda y que a este empresario le encanta innovar, la cosa no se va a quedar en este único producto: "Ahora mismo está a la venta la primera versión, que lleva un glaseado, parecido al del donut, pero con una receta un poquito cambiada que lo hace 'superfrosting'. Pero tenemos nuevos sabores que van a salir de forma inminente: el black velvet churronut, el churronut con dulce de leche, con chocolate y el lemon pie churronut. Nuestra idea es hacer 20 sabores más a lo largo del año".
El clásico churro, cuyo origen árabe se pierde en el abismo de los tiempos, y el poderoso donut, nacido en Holanda hace tres siglos (al principio sin agujero en su interior, eso sí) y exportado con fulminante éxito a Estados Unidos, han encontrado en esta pastelería barcelonesa un punto de encuentro. Existe también alguna variante parecida en Australia, y sin irnos tan lejos, las tradicionales rosquillas leonesas de San Froilán también se dan un aire a este nuevo y sorprendente dulce ideado en Escandinavia en un viaje de placer. ¿Su precio? 2,50 euros el churronut.
Quien piense que ya nada puede sorprenderle en el mundo de la repostería está claramente equivocado. Hay que dejar espacio para la sorpresa, porque de vez en cuando aparece... y con éxito. Prueba de ello es el dulce del que todo el mundo habla estos días en Barcelona, el churronut. Sí, su nombre no deja lugar a dudas, es la mezcla definitiva del churro y el donut.