Menú
Cuatro comidas que puedes preparar al horno y te hacen la vida fácil
aliado en la cocina

Cuatro comidas que puedes preparar al horno y te hacen la vida fácil

Con este electrodoméstico se pueden hacer una serie de elaboraciones de manera muy sencilla, con menos calorías que con otros métodos y que no están exentas de sabor

Foto: Foto: Unsplash/@gillyberlin.
Foto: Unsplash/@gillyberlin.

El horno no solo existe para hacer pizzas, lasañas y pollos asados. Más allá de estas preparaciones tan comunes, hay una serie de alimentos que también pueden aprovechar las virtudes de este aparato de manera más saludable que otros métodos de cocción. Y es que no hay necesidad de emplear aceite en determinadas recetas como ocurre, por ejemplo, con las patatas fritas en la freidora o la sartén. Además, otra de las ventajas de este electrodoméstico es que resulta muy cómodo de utilizar, pues solo requiere de cierta atención para ver el punto de cocinado, dar la vuelta a los ingredientes o añadir líquidos de vez en cuando.

Para aquellas personas que quieran comer de manera equilibrada, cocinar sin complicarse demasiado y obtener platos sabrosos y suculentos, el horno puede ser la solución a todos sus problemas. Por ello, en Alimente recopilamos una serie de preparaciones que cumplen con estas premisas.

Patatas fritas

placeholder Patatas al horno.
Patatas al horno.

Como su propio nombre indica, esta receta está pensada para que las patatas se frían en aceite. No obstante, el horno posibilita que se puedan preparar sin tener que emplear dicha cantidad de grasa. Hay varias maneras de elaborarlas y obtener un resultado igual de apetitoso y mejor a nivel de salubridad, pues incluye menos lípidos y calorías.

Por un lado, se pueden utilizar patatas naturales, cortarlas en láminas finas y rociarlas con un poco de aceite en spray -mucha menos cantidad de la que se suele emplear en una sartén-. También se puede recurrir a las que venden congeladas y cocinarlas en el horno a unos 200 grados durante 30 minutos para disfrutar de unas patatas de lo más crujientes. Algunas incluso están pensadas para prepararlas siguiendo este método. Solo hay que poner sal por encima al acabar.

Sanjacobos y otros preparados similares

Prácticamente, cualquier tipo de carne se puede cocinar al horno. Y los preparados elaborados con esta como, por ejemplo, los sanjacobos no son una excepción. Dependerá del grosor que tienen los filetes pero si el aparato está precalentado, en unos 20 o 30 minutos estarán perfectamente cocinados y jugosos.

Uno de los aspectos destacados de hacer este tipo de comidas al horno es que, al estar empanadas, permiten que la carne no se seque, pues sus jugos permanecen en el interior y se mezclan con el queso fundido. Además, el pan rallado externo queda crujiente cuando se calienta y se tuesta lo suficiente, lo que otorga un matiz adicional en el paladar. Tampoco es necesario emplear aceite, evitando así una comida mucho más pesada.

Pimientos asados

placeholder Pimientos asados.
Pimientos asados.

Los pimientos son una de las verduras más polivalentes del mercado. Pueden formar parte de sofritos a los que aportan sabor o lucir crudos en las ensaladas. Otra opción muy tradicional en España es freírlos, pero también existe la alternativa de hacerlos asados. Los rojos, por ejemplo, son una de las variedades más comunes, ya que emiten un destacado aroma que envuelve la cocina del hogar y acaban obteniendo un sabor intenso y una textura más tierna y jugosa. Se pueden comer en solitario, como guarnición o para elaborar una ensalada de pimientos morrones.

Berenjenas rellenas

Uno de los platos más sorprendentes y resultones que se pueden preparar en el horno tiene de protagonistas a las berenjenas. Estas se calientan en su interior para poder retirar la pulpa. Después, esta masa carnosa se utiliza para elaborar un sofrito que puede ser de verduras, de carne picada o de legumbres como la soja y las lentejas, que se emplea como relleno. Dicha preparación se introduce en el interior de la mitad de una berenjena abierta, que ha quedado vacía tras extraer la pulpa. De esta forma, funciona como un recipiente que luego se calienta en el horno con queso rallado por encima, dando lugar a un plato que destaca especialmente a nivel visual y gustativo.

Pescados al papillote

placeholder Foto: iStock.
Foto: iStock.

El horno puede ser también un gran aliado para cocinar pescados. La técnica del papillote posibilita el prepararlos de manera muy sencilla con un resultado mucho más jugoso del habitual, además de mantener su sabor e impregnarse fácilmente con el aroma de los otros ingredientes.

El papillote requiere básicamente de un pescado -como el mero, el bacalao, la merluza, la trucha o la rosada-, papel de aluminio, vegetales al gusto, aceite, sal y pimienta. Se coloca la carne sobre el papel, se acompaña por ejemplo de rodajas de cebolla y tomate, se salpimentan y se le añade un chorreón de aceite. Se envuelve todo, se cierra herméticamente y se hornea durante unos 20 minutos. Con esta receta, el pescado no pierde sus jugos y se mezcla con los de las verduras y el aceite para lucir más suculento.

El horno no solo existe para hacer pizzas, lasañas y pollos asados. Más allá de estas preparaciones tan comunes, hay una serie de alimentos que también pueden aprovechar las virtudes de este aparato de manera más saludable que otros métodos de cocción. Y es que no hay necesidad de emplear aceite en determinadas recetas como ocurre, por ejemplo, con las patatas fritas en la freidora o la sartén. Además, otra de las ventajas de este electrodoméstico es que resulta muy cómodo de utilizar, pues solo requiere de cierta atención para ver el punto de cocinado, dar la vuelta a los ingredientes o añadir líquidos de vez en cuando.

Alimentos
El redactor recomienda