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Mejillones: razones (y recetas) para incorporar en tu menú el 'superalimento del mar'
  1. Gastronomía y cocina
COCINA SALUDABLE

Mejillones: razones (y recetas) para incorporar en tu menú el 'superalimento del mar'

Es, posiblemente, el más humilde —y económico— de los mariscos. Pero bajo esa aparente sencillez se encierra una gran riqueza nutricional, como su poca cantidad de grasa o un alto aporte de hierro y otros minerales

Foto: Foto: O. V.
Foto: O. V.

Las tendencias en alimentación están cambiando y, hoy, el consumidor apuesta por productos de origen local, sostenibles y con un buen aporte nutricional que brinde beneficios para la salud. Tres factores que definen al mejillón gallego, a menudo considerado el superalimento del mar.

Hablar del mejillón es hacerlo de bateas y de las Rías Baixas. Cada año, 250.000 toneladas de este bivalvo se cultivan en esta zona. De hecho, las rías gallegas están consideradas una de las mayores reservas mundiales de fitoplancton, el alimento del mejillón. Allí, más de 3.300 bateas sirven de hogar a este molusco. En estas balsas flotantes, los bateiros se ocupan de vigilar las crías para que se alimenten y engorden, y, una vez crecidas, las recogen, limpian y seleccionan. Este trabajo, artesanal y a la antigua usanza, representa por volumen más del 75% de la producción española de acuicultura. El 40% se destina a la línea de negocio de molusco vivo, que se comercializa a través de las depuradoras, y el restante a la industria de elaboración en sus modalidades de refrigerado, congelado y conserva.

placeholder Cambados. (O. V.)
Cambados. (O. V.)

Un alimento rico en nutrientes

El mejillón es, posiblemente, el más humilde —y económico— de los mariscos. Pero bajo esta aparente sencillez se encierra una gran riqueza nutricional. Este alimento destaca por su aporte de proteínas de buena calidad, así como de hierro, zinc y yodo. Precisamente, el hierro que contienen (4,5 mg por 100 mg de carne de mejillón) es superior incluso al de muchas carnes como la de cerdo o ternera. Lo mismo ocurre con el selenio, con una ración es casi suficiente para cubrir el total de la ingesta diaria recomendada de este mineral en las mujeres y la mitad en el caso de los hombres. También es fuente de vitaminas del grupo B (destaca especialmente por la vitamina B12), y contiene muy poca cantidad de grasa, por lo que su valor calórico no es elevado (100 g de porción comestible de mejillones aporta 60 Kcal).

placeholder Bateas de mejillones. (Foto: O.V.)
Bateas de mejillones. (Foto: O.V.)

Además, los mejillones de las rías gallegas son de acuicultura extensiva, la cual presenta ventajas como, por ejemplo, que solo consume los recursos del medio circulante, por lo que no es necesaria la adición de nutrientes, antibióticos o suplementos nutricionales, generando de esta forma menos impacto en la zona que otros tipos de acuicultura. Por otra parte, el cultivo en batea permite la creación de microhábitats que sirven de refugio para multitud de especies y favorecen su protección.

Cómo incorporarlos a tu dieta

A menudo tendemos a pensar en los mejillones como una solución para el aperitivo o los entrantes, pero también pueden formar parte de numerosas recetas de platos principales.

  • Ligeros. Si quieres una receta sencilla, puedes tomarlos al vapor. Bastará añadir luego unas gotitas de limón o una vinagreta suave.
  • Con pasta. Galicia e Italia en un matrimonio muy bien avenido al que le puedes añadir todo tipo de ingredientes, como tomatitos Cherry, orégano, anchoas, una pizca de ajo y guindilla.
  • Con arroz. Una preparación muy original es hacerlos con arroz basmati y un toque de picor. La base es sencilla: verduritas picadas y pochadas, con cayena y chorreón de txakoli.
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Foto: O.V.

  • A la marinera. Un clásico de nuestro recetario que tiene mil revisiones: más o menos picantes, con azafrán, cebolla, vino blanco…
  • En paté. Una vez cocidos, mételos en el robot (o usa la batidora) con queso crema y te quedará un delicioso paté.
  • En croquetas. Puedes utilizar su carne, y un poco del caldo de la cocción, para añadir a tu bechamel favorita. El sabor a mar está garantizado

Es posible que te dé pereza la idea de tener que raspar la cáscara, quitarles las barbas y limpiarlos bien antes de meterlos a la cazuela. Según datos del estudio ¿Cuánto cocinan los españoles?, realizado por Aguinamar®, "nueve de cada 10 españoles incluirían pescado o productos del mar en el día a día". Los encuestados reconocen que lo harían porque es bueno para la salud, seguido del sabor, la facilidad de cocinar y de combinarlo con otros alimentos. Sin embargo, el 61% reconoce que no se enfrentan a los fogones por falta de tiempo.

En este sentido, Aguinamar®, empresa especializada en la depuración, limpieza, transformación, envasado y comercialización del mejillón, ofrece la posibilidad de consumirlo sin necesidad de limpiar, lavar y cocinar. A la facilidad de su preparación, se une otra ventaja. Y es que no hace falta cocinarlos en el mismo día, como ocurre con los mejillones que compramos en la pescadería, por lo que se alarga la vida útil del producto. La compañía ha desarrollado la atmósfera protectora, que aporta ventajas en la mejora de las condiciones higiénicas; además de eliminar el goteo, el olor en la nevera y la posible contaminación del molusco en los sacos tradicionales.

Las tendencias en alimentación están cambiando y, hoy, el consumidor apuesta por productos de origen local, sostenibles y con un buen aporte nutricional que brinde beneficios para la salud. Tres factores que definen al mejillón gallego, a menudo considerado el superalimento del mar.

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