El truco para pelar un huevo duro sin tocarlo: adiós a los quebraderos de cabeza

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Los huevos son imprescindibles en cualquier cocina. Un alimento muy versátil y saludable que nos resuelve cualquier comida. Además de incluirse en infinidad de recetas, no existe una sola forma de hacerlo. Frito, cocido, mollet, pasado por agua, escalfado o en una tortilla. La variedad es extensa por lo que es difícil cansarse de ellos.

Aunque durante años le ha perseguido mala fama por su vínculo al colesterol, la ciencia ha desterrado el viejo mito de que es perjudicial para la salud cardiovascular. Se pueden tomar sin problemas varias raciones a la semana. De hecho, un estudio demostró que los huevos aumentaban la colina, un nutriente que el cerebro y el sistema nervioso usan para regular la memoria, el estado de ánimo, el control muscular y otras funciones corporales. Además, sus proteínas son de gran calidad, ya que contiene los 9 aminoácidos esenciales. Estas proteínas nos ayudan al control del apetito, ya que los alimentos ricos son saciantes.

El truco para pelar huevos sin las manos

A la hora de cocinarlo, existen varios trucos para que su preparación sea más sencilla, sobre todo cuando utilices técnicas más sofisticadas. En caso de hacerlo cocido, su preparación es sencilla y rápida, aunque hay un paso que puede crearte un quebradero de cabeza.

En redes se ha hecho viral un curioso y eficaz método para pelar la cáscara del huevo después de cocerlo. Un truco con el que ni lo tocarás. Parece magia, pero solo se trata de una técnica culinaria desconocida para muchos.

Y no, no nos referimos a meterlos en agua con hielo. Aunque esto también sirve, hay otra forma en la que no tendrás que utilizar tus manos para quitar la cáscara. Cuando el huevo esté cocido, solo tienes que sacarlo del fuego y meterlo en un pequeño tupper con agua y agitar enérgicamente. Puedes usar otros recipientes como un bote de garbanzos.

Si los huevos llevan varios días en la nevera mejor, porque te costará menos pelar la cáscara. También es conveniente que los saques del frigorífico un poco antes para que no haya mucho contraste de temperatura. Un truco para que no se rompa la cáscara mientras están en el fuego es añadir vinagre al agua.