Cómo elegir la mejor app para adelgazar y comer bien
Los expertos coinciden en que pese al boom de estas aplicaciones, no todas ofrecen las suficientes garantías. Lo importante es que hayan sido elaboradas por expertos cualificados
Para gustos están los colores y los sabores. Y para opciones sobre cómo asesorarse en nutrición, las apps. La e-salud ha desembarcado con fuerza arrolladora, empoderando al paciente, estrechando lazos entre ellos y sus médicos, facilitando el seguimiento y la adhesión a los tratamientos o manejando a distancia distintos parámetros médicos. De hecho, en el universo de las Tecnologías de Salud y Comunicación (TIC), uno de los campos que más está pegando es el de la salud y dentro de ella, todo lo destinado con alimentación, estilos de vida saludables y ayudas para seguir una dieta sana según diferentes enfermedades crónicas, por citar algunos ejemplos. Todo sin olvidar las que te ayudan a calcular el índice de masa corporal (IMC), a contar calorías o a seguir dietas para perder peso.
El informe Ditrendia 2017 confirma esta tendencia. En España hay 27,7 millones de usuarios activos de apps. Y dentro de la inmensa oferta de aplicaciones, las de salud están en el grupo de cabeza. Se suma a ello una previsión de crecimiento de un 20% anual en los próximos tres años. De todas, un 70% van dirigidas a la población en general (aplicaciones de bienestar y ejercicio físico, incluidas las de alimentación general o las dietas) y un 30% para profesionales sanitarios y sus pacientes.
“Siempre hay que asegurarse de que hay profesionales de solvencia detrás”
Pero ¿vale todo? Los expertos coinciden en la importancia de que, en temas de salud, los usuarios se aseguren concienzudamente de que las recomendaciones aportadas en estas nuevas herramientas hayan sido elaboradas bajo los máximos criterios de calidad. Carmen Gómez Candela, jefa de la Unidad de Nutrición Clínica y Dietética de Hospital Universitario de La Paz (Madrid), insiste en ello. “De la misma forma que las webs sobre salud y medicina se diferencian con sus sellos de calidad porque detrás está la información elaborada por profesionales sanitarios, las apps deben registrar estos mismos filtros. Se requieren aval científico y material referenciado”.
Precisamente, la doctora Candela es coordinadora de la recientemente creada aplicación Nutreapp Diabetes. Ha sido elaborada por profesionales de Endocrinología y Nutrición de varios centros de España para facilitar la realización de una correcta valoración nutricional y la elaboración de un plan individualizado para los pacientes diabéticos desnutridos por parte de profesionales sanitarios de centros hospitalarios, Atención Primaria o centros sociosanitarios. El motivo, la necesidad real de su existencia dado que, según los expertos, uno de cada tres afectados presenta desnutrición en el momento del ingreso hospitalario.
Adelardo Caballero, director del Instituto de Obesidad de Madrid (IOB), defiende la misma posición que la especialista de La Paz. “Siempre hay que asegurarse de que hay profesionales de solvencia detrás”. Sobre todo en el caso de “las que proponen dietas o calculan el IMC”, insiste.
Este especialista es coautor de una nueva aplicación en este campo: Calculadora de IMC. “Actualmente hay disponibilidad de multitud de aplicaciones que calculan el IMC (que determina, a partir de la estatura y el peso, el peso más saludable que puede tener una persona), pero ninguna de ellas orienta después al usuario sobre el mejor tratamiento a seguir según los datos calculados y explica en qué consiste cada terapia recomendada. La nuestra utiliza un sistema adaptado de la Organización Mundial de la Salud y ha sido elaborada por el equipo médico del IOB. Es muy útil y de fácil manejo. Permite en pocos minutos dar a conocer todos los tratamientos para el sobrepeso y la obesidad existentes para cada paciente concreto. Además, está disponible para los sistemas Apple y Android”, recalca.
De hecho, la oferta actual de las mismas para adelgazar o combatir la obesidad ha aumentado exponencialmente en los últimos años. Sin embargo, y como se detalla en una investigación presentada en la Cumbre Europea sobre Obesidad de 2016, que se celebró en Gotemburgo (Suecia), solo el 0,5% de ellas han sido desarrolladas por profesionales sanitarios o por personal universitario.
“Este hecho es muy relevante porque con la salud no se juega y la información y los consejos o indicaciones terapéuticas para perder peso deben estar siempre en manos de equipos multidisciplinares experimentados”, apostilla el director de IOB.
Kaiser Foundation Health Plan of Washington (EEUU) publica este año en su web las mejores apps de nutrición y dietas del otro lado del Atlántico. Según sus propias palabras: “El teléfono inteligente en el bolsillo es un milagro de la ciencia moderna. Su poder de procesamiento es millones de veces mayor que el de las computadoras que la NASA utilizó en su día para los alunizajes en la Luna y lo conecta a una red mundial de más de 3.000 millones de personas”.
Las mejores aplicaciones dietéticas de hoy en día, según la institución, “aprovechan el poder del móvil para ayudar al usuario a controlar su nutrición y salud a través de una mejor alimentación. Probamos 10 de las opciones de aplicaciones de pérdida de peso más populares para Android y iPhone (iOS)”. Reconocen, no obstante, que la valoración se basa en las opiniones de los usuarios y resaltan entre otras: HealthyOut o Calorie Counter & Food Diary de MyNetDiary.
“Las apps han crecido de forma imparable para dirigirse tanto a profesionales sanitarios como al público en general. Pero no se deben perder de vista sus garantías, sobre todo cuando este campo de expansión es muy útil”, recuerda la doctora de La Paz
“Con la salud no se juega. Perder peso debe estar siempre en manos de equipos experimentados”
En España, los especialistas coinciden en su auge, tanto las destinadas a llevar hábitos dietéticos saludables, perder peso o las elaboradas para orientar al profesional sanitario. El abanico de las primeras incluye las destinadas al público general o pacientes con distintas enfermedades. Ejemplo de estas últimas son Facemovil, de la Federación de Asociaciones de Celiacos de España para los que padecen este tipo de alergia alimentaria, y Social Diabetes, elaborada por la Federación de Diabéticos Españoles. La lista de todas ellas es interminable e incluye multitud de las que informan sobre lo que realmente comemos, como es el caso de FoodMeter, cuyo objetivo es ayudar a cualquier persona, de cualquier edad, sea hombre o mujer, a conocer la información nutricional de cualquier alimento para poder llevar un equilibrio en su dieta. Y así, miles.
Por todo ello, es importante que la población se asegure de la calidad de la información aportada, de los profesionales que están detrás y, en caso de duda, nada como consultar con el médico.
Para gustos están los colores y los sabores. Y para opciones sobre cómo asesorarse en nutrición, las apps. La e-salud ha desembarcado con fuerza arrolladora, empoderando al paciente, estrechando lazos entre ellos y sus médicos, facilitando el seguimiento y la adhesión a los tratamientos o manejando a distancia distintos parámetros médicos. De hecho, en el universo de las Tecnologías de Salud y Comunicación (TIC), uno de los campos que más está pegando es el de la salud y dentro de ella, todo lo destinado con alimentación, estilos de vida saludables y ayudas para seguir una dieta sana según diferentes enfermedades crónicas, por citar algunos ejemplos. Todo sin olvidar las que te ayudan a calcular el índice de masa corporal (IMC), a contar calorías o a seguir dietas para perder peso.
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