Menú
¿Quieres mantenerte joven más tiempo? Empieza a comer esto
  1. Nutrición
SE ACABARON LOS PREJUICIOS

¿Quieres mantenerte joven más tiempo? Empieza a comer esto

Es una verdura que cuenta con muchos detractores. Sin embargo, se trata también de uno de los alimentos con más beneficios para nuestra salud. Que no falte en tu despensa

Foto: Foto: iStock.
Foto: iStock.

Durante muchos años, el brócoli ha sido una verdura arrojada al ostracismo, no solo por los más pequeños de la casa, también por los adultos a los que no convence su peculiar sabor, muy similar al de uno de sus parientes más cercanos: la coliflor. Sin embargo, detrás de este rechazo encontramos también un amplio abanico de propiedades nutricionales, que lo convierten en un diamante en bruto digno de descubrir. Sin ir más lejos, el brócoli es rico en vitaminas A, K y del grupo B, aunque la vitamina C es su principal fuente de beneficios pues una porción de 100 gramos aportan un total de 110 miligramos de dicho compuesto.

Además, posee un alto contenido en minerales como, por ejemplo, el magnesio, el cromo, el zinc, el hierro, el potasio o el fósforo. Sin olvidar la fibra, las proteínas, los bioflavonoides y los fitonutrientes, que también forman parte de su composición. Bajo esta premisa, ¿qué cualidades hacen del brócoli un alimento tan recomendado para nuestra salud?

Propiedades y beneficios del brócoli

placeholder Foto: iStock.
Foto: iStock.

Como es bien sabido, el consumo de frutas y verduras está muy vinculado a la disminución del riesgo de padecer ciertas enfermedades y a una mejora de la calidad de vida de los comensales. Dos logros en los que el brócoli tiene mucho que aportar.

  • Tal y como acabamos de ver, el brócoli es rico en vitaminas C y E, betacarotenos y flavonoides, nutrientes considerados antioxidantes y fieles combatientes contra la oxidación natural del organismo y, por ende, el envejecimiento. Un proceso amparado por la producción de colágeno que la vitamina C estimula, reforzando igualmente las células de la piel.
  • Esta verdura también ejerce una acción hepática muy potente, por lo que en muchas ocasiones se utiliza para ayudar a depurar el organismo y eliminar las toxinas.
  • Son muchos los estudios que hablan sobre la efectividad del brócoli a la hora de prevenir la aparición de varios tipos de cáncer. Esto se debe a que su consumo estimula el sistema inmunitario, así como las defensas encargadas de luchar contra las células tumorales. Y no solo eso, también actúa como antibiótico y disminuye la presencia de la bacteria Helicobacter pylori, responsable de las úlceras de estómago.

Para aprovechar todas sus propiedades, lo mejor es no cocerlo más de 10 minutos o comerlo en crudo

  • Su gran aporte de ácidos grasos omega 3 lo convierte en un bocado antiinflamatorio a tener en cuenta, muy interesante sobre todo para aquellas personas que padecen artritis, ya que las enzimas que provocan la destrucción de las articulaciones quedan bloqueadas. Por su parte, el calcio, el fósforo y el magnesio unen sus fuerzas para conseguir que los huesos permanezcan sanos y fuertes.
  • El colesterol malo o LDL es igualmente uno de sus principales enemigos, siendo capaz de reducir sus niveles considerablemente. Además, junto a su contenido en fibra, previene las enfermedades cardiovasculares y vela por la salud del corazón.
  • La vitamina B2 que posee se encarga de asegurar una buena visión. De hecho, nos ayuda a que los ojos se adapten a los cambios de luz drásticos, disminuye el riesgo de padecer degeneración macular -gracias a la luteína y la zeaxantina que también incluye- y previene la aparición de cataratas.
  • Su alto contenido en hierro, ácido fólico y clorofila hacen de esta verdura un alimento indispensable en la dieta de aquellos que padecen anemia ferropénica, debido a su déficit de hierro.

Cómo cocinarlo para mantener sus propiedades

placeholder Foto: iStock.
Foto: iStock.

Para poder aprovechar todas sus propiedades nutricionales y que estas se mantengan prácticamente intactas, es importante cocinar el brócoli de manera adecuada. Muchos de sus compuestos son solubles en agua y sensibles al calor, por lo que si lo cocemos demasiado podrían verse reducidos y, con ellos, sus beneficios sobre el organismo. Por lo tanto, lo mejor es consumirlo a modo de germinado, crudo como ingrediente en ensaladas y cocido o al vapor, pero nunca más de 10 minutos. Además, debido a su sabor, basta con aliñarlo con ingredientes tan básicos y consuetudinarios como el aceite de oliva, el vinagre de manzana o la pimienta negra recién molida. Aunque, gracias a su versatilidad, combina a la perfección con otros muchos alimentos, todo depende de los gustos y la creatividad del comensal.

Por otro lado, antes de ponerse el delantal, es aconsejable limpiar los tallos del brócoli correctamente, pues pueden contener bacterias. Además, la parte más dura de los tallos debe eliminarse parcialmente, pues en algunas elaboraciones aportan un toque crujiente y consistente muy interesante. Tampoco debéis tirar el agua de cocción que ha quedado impregnada con su sabor, ya que puede ser de gran utilidad para añadir a los platos de pasta o los caldos donde dicha verdura participe. Al igual que ocurre con las hojas de los ramilletes, estas son ricas en vitaminas y aportan un contrapunto amargo que puede resultar muy agradable en algunos paladares.

Durante muchos años, el brócoli ha sido una verdura arrojada al ostracismo, no solo por los más pequeños de la casa, también por los adultos a los que no convence su peculiar sabor, muy similar al de uno de sus parientes más cercanos: la coliflor. Sin embargo, detrás de este rechazo encontramos también un amplio abanico de propiedades nutricionales, que lo convierten en un diamante en bruto digno de descubrir. Sin ir más lejos, el brócoli es rico en vitaminas A, K y del grupo B, aunque la vitamina C es su principal fuente de beneficios pues una porción de 100 gramos aportan un total de 110 miligramos de dicho compuesto.

El redactor recomienda