Tomar este fruto reduce las probabilidades de que tengas helicobacter pylori

A menudo solemos relacionar los frutos rojos con deliciosas tartas o mermeladas, muy rico a la vez que insano. Pero la investigación científica, en los últimos años, ha estudiado a fondo las propiedades de estas frutas del bosque, y los resultados de dichos ensayis han probado que pueden resultar más que saludables para nosotros.

Todo se debe a las sustancias químicas contenidas dentro de ellos, los famosos flavonoides como las antocianinas. Ahora un nuevo estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Pekín, aleatorizado, de doble ciego y controlado por placebo se ha encargado de esclarecer porque aquellos que toman más arándanos rojos tienen una incidencia muchísimo menor de Helicobacter pylori.

"Esta bacteria es la responsable del 90% de los casos de halitosis". Además, está relacionada con el cáncer de estómago

Pero lo primero que debemos hacer es tener muy claro qué es la H. pylori. Se trata de una bacteria microaerófila (que necesita menos oxígeno para sobrevivir del que se encuentra en el aire), de forma helicoidal (como un sacacorchos) y con multitud de flagelos. Su hábitat ideal es nuestro estómago, dado que se alimenta del hidrógeno liberado por las bacterias de nuestro tracto intestinal y también por los procesos ácidos en el interior de nuestro sistema digestivo. Aparte de causar las enfermedades anteriormente mencionadas, también es la responsable del mal aliento, como explican desde el CMED: "Esta bacteria es la responsable del 90% de los casos de halitosis".

Como explican en un estudio el investigador Khalid O. Alfarouk y su equipo del Alfarouk Biomedical Research en Estados Unidos y de la Universidad de Khartoum en Sudán, en 1875 se planteó la hipótesis de que las úlceras gástricas podían estar causadas por bacterias. No fue hasta 1982 que los científicos australianos Barry Marshall y Robin Warren descubrieron la bacteria helicoidal responsable: la Helicobacter pylori (ese descubrimiento fue la razón de que los científicos recibiesen en el año 2005 el Premio Nobel de Medicina). Desde ese momento se investigaron en profundidad los efectos de esta bacteria, llegando a la conclusión de que la gastritis no era (exclusivamente) una afección causada por el estrés, sino que tenía un origen infeccioso. Esta gastritis es la que está relacionada claramente con el aumento del riesgo de padecer cáncer de estómago.

Aunque multitud de estudios observacionales y estadísticos relacionan claramente la infección por H. pylori y el cáncer gástrico, los mecanismos por los que esto tiene lugar nunca antes habían sido descritos.

El estudio

Para llevar a cabo su investigación científica, los miembros del equipo utilizaron cómo grupo de estudio a 522 adultos chinos con edades comprendidas entre los 18 y los 60 años. Todos y cada uno de ellos habían dado positivo el Helicobacter pylori pero ninguno había sido tratado con antibióticos para erradicar la infección.

Se separó a los participantes diversos grupos a los que se le administraron diferentes cantidades de zumo de arándano rojo. A otro grupo, en vez del producto natural, se le administró un placebo. El tratamiento se le administra los pacientes durante un periodo comprendido entre las 2 y las 8 semanas para comprender en detalle la potencia y la velocidad de actuación sobre la Helicobacter pylori del zumo de arándano rojo.

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"Los hallazgos del estudio revelan que el zumo de arándano rojo puede ser útil a la hora de luchar contra la Helicobacter pylori en zonas donde la tasa de infección supere el 50%", explica el autor principal del estudio, el profesor Kai-Feng Pan. Y continúa: "A pesar de que no son una alternativa a los antibióticos, si se trata de una estrategia complementaria muy efectiva, que puede contribuir a gestionar las infecciones por esta bacteria sin riesgo a sufrir efectos secundarios".

Los sujetos de estudio qué mayor cantidad de zumo de arándano rojo tomaron redujeron la cantidad de bacterias en su estómago durante ese periodo de 8 semanas comparados con los que tomaron menores cantidades del líquido o los que directamente tomaron placebo.

El riesgo que supone para nuestra salud la Helicobacter pylori la convierte en uno de los mayores riesgos de salud a los que nos enfrentamos (sin contar el covid-19, por supuesto). Que existan ayudas tan eficaces y simples como el zumo de arándano rojo solo juega a nuestro favor.