Dieta disociada: cómo puedes adelgazar haciendo un mínimo cambio en tu alimentación

Pasa siempre en verano, pero no solo. Se acaba y con él se da el carpetazo final a tres meses en los que la mayoría habrá disfrutado de sus vacaciones… y de algunos excesos. Eso se traduce en una vuelta a la rutina con algunos kilos de más, por lo que es el momento de pensar cómo adelgazar de la manera más rápida posible, pero también de una manera saludable.

Una forma que respaldan muchos expertos en nutrición es por medio de una dieta disociada. Se trata de un modelo en el que no se permite mezclar alimentos de diferentes grupos durante la misma comida. Es decir, no hay que renunciar a comer los alimentos que más nos gustan, sino, simplemente, comerlos de manera separada. Por lo tanto, es un tipo de dieta muy permisiva.

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Alimente

Esta dieta divide los alimentos en tres grupos: glúcidos, proteicos y neutros.

• Alimentos glúcidos: tienen un alto contenido en hidratos de carbono, como cereales, harinas, pastas, arroces, patatas o dulces.
• Alimentos proteicos: son ricos en proteínas, como el pollo y otras carnes de ave, pescados, legumbres, huevos o lácteos.
• Alimentos neutros: no predominan ni hidratos ni proteínas, como las verduras, grasas de origen vegetal, etc.

Cómo adelgazar con la dieta disociada

La base de la dieta disociada estipula que el sistema digestivo no procesa los tres tipos de alimentos correctamente cuando se ingieren a la vez. Por eso, almacena el azúcar en el cuerpo, hasta que se convierte en grasa. Solucionarlo es sencillo: solo hay que comer alimentos glúcidos por una parte y los proteicos por otra, sin mezclarlos. Eso sí, cualquiera de ellos se puede consumir al mismo tiempo que los alimentos neutros, ya que eso no genera problemas.

Hay que tomar alimentos glúcidos por un lado y proteicos por otro, sin mezclarlos

Lo mejor de esta dieta para adelgazar es que no es restrictiva, es decir, no elimina grupos de nutrientes necesarios para el organismo. Por eso, es un tipo de alimentación fácil de seguir por aquellas personas que quieren perder peso. Eso sí, se recomienda seguir algunos consejos mayormente, como no comer fruta sola con el estómago vacío o no combinar frutas dulces con ácidas.

Además, durante el tiempo que dure esta dieta no hay que beber más que agua, restringiendo el consumo de otros líquidos como el café, aunque tampoco se puede tomar alcohol. Como siempre en estos casos, lo mejor es ponerse en manos de un nutricionista profesional para que nos pueda aconsejar y asesorar personalmente con lo que es mejor para cada persona.